Lover of Mine [ 34 ]

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Michael estaba conmigo había descubierto que me gustaba pintar lienzos. Así que para dejar de pensar en ya sabemos quién. En este momento mi modelo era el chico de cabello teñido.

Extrañamente Michael había estado demasiado unido a mí, más de lo normal pero no quería decir nada porque bueno. Sería raro, aunque no me quejo su compañía me agradaba muchísimo. De por si siento que volvimos a tener la unidad de antes, así que no iba a quejarme.

-¡Michael! Quédate quieto por dios -él ríe negando haciendo que yo sonriera también.

-¿Por qué? Me veo hermoso de todas formas- hace una pose extraña. Sin evitarlo empecé a reir.

-Ya, enserio quédate quieto por favor.- hago un puchero.

-Esta bien hermosa- sonríe, extrañamente me sonroje porque no estoy acostumbrada a esos tratos por parte de él.

Él se quedó viéndome directamente a los ojos causando que yo me pusiera algo ansiosa. No me gustaba que me quedarán viendo mucho por lo mismo pero traté de ignorar su mirada.

Arreglé los últimos detalles de la pintura y sonrío ampliamente cuando veo sus resultados.- ¡Me encanta como quedo!- exclamé haciendo un pequeño baile de victoria.

-¿Puedo ver?- asiento. Él se acerca a ver, sus ojos se abren totalmente impresionado. Eso había hecho que sonriera más.

-¿Te gusta?- él asiente entonces toma mi rostro para darme un beso en la frente. Sonrío tranquila- Te lo daré de regalo, es mi trabajo mejor hecho.

- ¿Enserio? Gracias hermosa- ahora besa mi mejilla. Por un instante rozo nuestros labios pero moví mi cabeza para que me diera el beso en la mejilla.

-Bueno, creo que iré a mi casa. Ya es tarde- tomo mis materiales.

-Te llevaré, no quiero que nada te pasé- asiento sin mucha importancia.

Ambos caminamos hacia la salida de su casa, me despedí de Karen con un beso en la mejilla. Luego salimos de casa en silencio, estaba viendo mi celular cuando me cae una notificación de mi padre llamándome urgente a la casa. Confundida le escribí diciendo que iba a casa en unos minutos.

-Debemos ir rápido, papá dice que debo estar ahí urgente- Michael asiente subiendo al coche pero antes fue abrirme la puerta a lo que agradecí con una leve sonrisa.

Había mucho tráfico dándome un poco de ansiedas por saber por que mi padre estaba apurandome para ir a casa. La verdad trataba de no pensar en cosas malas, pero era inevitable cuando se que puede involucrar a los que amo.

-Hey, nena- Michael toma mi mano acariciandola- tranquila, todo estará bien ¿si?- trato de sonreír pero salió una mueca- tal vez es algo bueno lo que te dirá tú padre, no sabes linda- beso mi mano, sorprendiendome por ese acto.

-Supongo- trato de alejar mi mano disimuladamente, aunque él no me dejó.

Traté de que esto no me afectara pero era inevitable, así que miraba a la ventana esperando llegar a casa aunque sea una buena notícia.

Mi casa estaba cerca, provocando miles de nervios en mi cuerpo primeramente porque Luke estaba afuera de su casa sentado en la acera mientras fumaba un cigarrillo. Por dios, que guapo se miraba así. Muerdo mi labio también porque escuché a Michael gruñir, sabía que ahora no le caía bien Luke y solo me protegía como buen amigo. Lo sé.

Estaciona el coche enfrente de mí casa y suelto rápidamente nuestras manos. El suspira cerrando los ojos unos segundos mientras que yo no sabía que hacer. Como había dicho antes, él ha estado actuando demasiado raro y me daba sospechas de otras cosas pero no quería exagerar.

Lover Of Mine| lrhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora