Un Nuevo Héroe En La Tierra [SEGUNDA PARTE]

Parte 74 (Impactantes Revelaciones/Una Terrible Verdad)

Marco se hallaba de rodillas con los brazos hacia arriba siendo sujetados por aquellas insoportables e incomodas cadenas, tenía la respiración algo agitada, estaba exhausto, había utilizado gran parte de su poder para ayudar a su hijo a recuperar sus recuerdos y así recobrar su memoria la cual había sido borrada gracias al hechizo de Vera. ¿Cuánto más debía seguir así?, ¿por qué esas cadenas eran tan difíciles de romper?, algo extraño debían tener, pues unas esposas comunes habrían sido pan comido para él liberarse.

Deseaba saber del estado de sus hijos, ¿estarían a salvo?, aquello era totalmente desconocido para él, pues la pantalla se desvaneció en el momento en que Jam recobró la memoria y el hechizo se rompió, después de eso no supo que más pasó con él ni con los demás. En su interior rogaba para que sus niños estuvieran bien y lejos de las garras de esa odiosa mujer, de lo contrario no se perdonaría jamás el no haber hecho algo para protegerlos. Maldición, ¿Qué culpa tenían ellos?, ¿por qué debían pagar por los errores de sus padres y más de una manera tan cruel?, se sintió asqueado al recordar lo que Vera había dicho antes de marcharse y dejarlo abandonado dentro de aquel aposento.

Qué destino tan horrible le esperaba al mayor de sus hijos, ser abusado y después asesinado, como si no fuera suficiente por todo lo que había sufrido desde que se dio cuenta que poseía poderes mágicos y tenía la capacidad de crear hechizos, aquel cambio fue bastante drástico y complicado de aceptar para él, eso y el tener que lidiar desde muy niño con la idea de que su padre esté casado con otra mujer y tenga otra familia, y que desgraciados como Jeremy le escupan en la cara que es un hijo ilegitimo y no deseado.

-Jam......no te mereces esto......por favor perdóname hijo......perdóname por no saber cuidarte como es debido...... -Murmuró muy dolido. En ese momento, de manera repentina las esposas comenzaron a arder lastimando sus muñecas al igual que sus tobillos -¡QUÉ DEMONIOS....! –Gritó sintiendo mucho dolor

De pronto, frente a él apareció aquella pelirosa de quien tanto deseaba librarse. Se veía furiosa, al parecer su plan había fracasado y los niños habían logrado salir ilesos. Gracias al cielo.

-¡TÚ! –Le gritó la mujer mostrándose aún más molesta -¡Tú fuiste quien ayudó a esos mocosos a romper el hechizo! ¿¡No es así!?

-No sé de qué me estás hablando.... –Marco desvió la mirada ignorándola mientras resistía el dolor

-¡MIENTES! –Le lanzó un rayo hiriéndolo -¡FUISTE TÚ!

-Demonios.... –El castaño apretó los ojos a la vez que su respiración se aceleraba, estaba comenzando a sudar

-¡Confiesa! ¡TÚ LO HICISTE! –Le exigió con agresividad alzando sus manos hacia él e iluminándolas, dispuesta a atacarlo si volvía a negar la verdad

Marco levantó la cabeza mirándola desafiante y respondió:

-Si....lo hice.... –Frunció el ceño –Y lo volvería a hacer......no permitiré que dañes a mis hijos......y menos que juegues con sus sentimientos de esa manera......

-Maldición.... –Dijo entre dientes pegándole una fuerte patada en el rostro. Un hilo de sangre se deslizó por la nariz del castaño a causa del golpe -¡Lo echaste todo a perder! ¡Casi los tenía en mis manos! ¡A él y a los otros! ¿¡POR QUÉ DIABLOS TUVISTE QUE INTERFERIR!?

-Ya te lo dije, si quieres hacerme algo a mí pues adelante, hazlo....pero no te metas con ellos.... –Le advirtió –Lo digo en serio, tú no me conoces y no sabes lo que puedo llegar a hacer si me provocas.... –La miró amenazante –Por mis hijos soy capaz de convertirme en un asesino si es necesario

-No seas idiota, tú ni siquiera te atreverías a tocarme

-Con tal de protegerlos de ti hasta sería capaz de arrancarte la cabeza y dársela de tragar a los leones del castillo