Tres mosqueteras y cuatro dragones (2a temporada)

Capitulo 57: 24 horas

     Pov Natalia:

     James - Pero dígame que todo salió bien.

     Dr - No es tan sencillo, su hijo nació prematuro y tendrá que permanecer un tiempo en una incubadora.

     James - ¿Hay algún peligro de que no sobreviva?

     Dr - Es pronto para decir nada, queremos observarle al menos 24 horas, si las supera sin problemas no creo que haya más complicaciones.

     James - ¿Y Bea sabe todo ésto?

     Dr - Ella está empezando a despertar, a veces en estos casos preferimos que sea la pareja la que de estas noticias.

     - Yo te acompaño a hablar con ella - Le di a Susana su niña y nos fuimos los dos a la habitación de Bea. Cuando entramos estaban cambiándola a la cama, los enfermeros salieron dejándonos a los tres solos. Bea nos miró y temiéndose lo peor se puso a llorar sin consuelo. James fue hacia ella y la abrazó.

     James - Bea tranquila, Jonathan ya nació... Pero está en una incubadora por ser prematuro.

     Bea - ¿Ya lo viste? Yo quiero verlo.

     James - ...

     Bea - No me ocultes nada ¿qué ocurre con nuestro hijo?

     James - No está fuera de peligro, tienen que tenerlo en observación durante 24 horas.

     Bea - Todo es por mi culpa, si me hubiera cuidado como me dijeron ésto no habría ocurrido.

     - No digas eso, Jonathan es vuestro hijo y tiene vuestra fortaleza por lo que va a salir de ésta, crecerá al lado de todos nosotros y será un niño sano y feliz.

     Bea - Nat, hazme un favor... Intenta ver a mi bebé, asegúrate de que esté bien.

     - Vale, voy a buscar la sala dónde está y ahora vuelvo - Cuando salí Susana estaba en la puerta, le conté todo lo sucedido y la petición que me había hecho Bea y fuimos a buscar aquella sala. Preguntamos a una enfermera y nos indicó, cuando llegamos a las dos se nos cayó el alma al suelo al ver a aquellos pequeños metidos en aquellas especie de urnas, miramos por el número de habitación y encontramos al pequeño Jonathan. Era realmente guapo y salvo por los cables no parecía estar enfermo. Susana me abrazó llorando y yo no me pude resistir tampoco - Vamos, dejemos de llorar que va a ponerse bueno ya verás.

     Susana - Si tiene la vitalidad y la fortaleza de su madre saldrá adelante, pero es tan triste verlos tan pequeñines aquí. Vamos por favor, necesito ver a mis hijos.

     - Si, vamos, hay que contarle a Bea que conocimos a su precioso bebé.