ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 36

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Ambos dioses habían tenido una pelea que duró poco, pero por poco el dios de los mares estaba a punto de ser vencido si no fuera porque ___________ estaba algo cansada y además de eso, Poseidón conocía todo el lugar y sabía cómo usarlo para atacar...

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Ambos dioses habían tenido una pelea que duró poco, pero por poco el dios de los mares estaba a punto de ser vencido si no fuera porque ___________ estaba algo cansada y además de eso, Poseidón conocía todo el lugar y sabía cómo usarlo para atacar de forma desprevenida a Atenea. Si no fuera porque logró esquivar y destruir un ataque muy poderoso de Poseidón, quizás estaría camino al Inframundo.

—Deberías dejar de pelear contra mí, Atenea no podrás vencerme. —dijo Poseidón con burla. —No sabes controlar tu fuerza aún, ni siquiera tu cosmo debido a que aún no has aprendido a manejarlo. Será mejor que admitas tu derrota y puede que tenga piedad de ti.

—No lo haré. —respondió con firmeza. —Tal vez no sepa controlar mi poder como dices y puede que haya usado más de lo que debía, ¿pero sabes algo? A pesar de eso y en las situaciones en las que estado, salí victoriosa. No permitiré que ganes y dañes a mis amigos, Te crees el más poderoso de todos, pero no es así, también tienes un límite.

—Traté de ser amable contigo __________, te confesé mis sentimientos y te di una oportunidad para que puedas unirte a mí, pero ahora lo mejor será enviarte al Soporte Principal, algo que debí hacer desde un principio. —admitió Poseidón apuntando su tridente hacia ___________. —Si quieres que las cosas sean más fáciles, será mejor que me acompañes por las buenas.

—Imagino que ya debes saber mi respuesta, no me rendiré sin pelear.

—Te lo advertí, pero veo que prefieres venir por las malas. —detrás de __________ apareció uno de los generales de Poseidón. —Muy bien Atenea, hagamos las cosas como tú quieras, veremos cuanto puedes resistir peleando contra ambos.

—Adelante. —murmuró ____________.

Ella sabía que en el estado en el que se encontraba no sería fácil vencerlos a ambos, sobre todo cuando Poseidón había llamado a uno de sus generales, era algo injusto, pero así le gustaba jugar en esta guerra. Sin importar lo que pase, tendría que ganar tiempo.

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Después de haberse separado de Shiryu, Hyoga llegó al siguiente pilar y se sorprendió al ver con vida a su maestro Camus de Acuario frente a él, como si su participación en la batalla del Santuario no haya sido real.

—¿Acaso será una ilusión? —preguntó con voz temblorosa, no podía creerlo.

—Hyoga, ¿no me reconoces?

—No es posible... ¡Muere impostor! —molesto de que alguien intente engañarlo con la imagen de su maestro, Hyoga decidió atacar a la persona que se encontraba a unos pasos de él. Pero para su sorpresa, esquivó el ataque.

—¿Qué pretendes Hyoga? ¿Cómo te atreves a atacar s tu maestro? —preguntó molesto.

—¡Cállate! —respondió. —Mi maestro Camus murió en la batalla de las doce casas y su alma descansa en paz con la bendición de Atenea. Intentas ocultarte usando la imagen de mi maestro, no permitiré eso, no mancharás la imagen del caballero dorado de Acuario. —Hyoga se acercaba para atacar otra vez.

𝔈𝔩 𝔫𝔲𝔢𝔳𝔬 𝔬𝔯𝔡𝔢𝔫 𝔡𝔢 𝔄𝔱𝔢𝔫𝔢𝔞 ▬ 𝔖𝔞𝔦𝔫𝔱 𝔖𝔢𝔦𝔶𝔞 #𝟸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora