➤ ⓹⓪

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✦✧✧𝙷𝚊𝚗𝚂𝚎𝚞𝚕✧✧✦

— Adiós —Me despedí sonriendo, acomodando mi mochila en mi hombro.

— Hasta mañana Hani —Ambos chicos agitaron sus manos y se perdieron entre las calles.

Suspiré y seguí mi camino hacia el apartamento, observando las transitadas calles de Beijing. Han pasado tres meses desde que llegué a China, en un principio se me hizo muy difícil acostumbrarme por el idioma pero he sido capaz de acoplarme. En mi primer día me sentía muy nerviosa, pero he de decir que fue mejor de lo que pensé ya que todos fueron muy amables conmigo incluyendo a los que ahora son mi mejor compañía, Ten y FangFang. Son pareja y fueron con quienes primero hablé cuando no sabía dónde se encontraba la oficina del director. 


Desde ahí todo ha ido excelente, esta universidad es muy buena. Hablo todos los días con las chicas y ellas me informan de lo que ha ocurrido allá. Para mi sorpresa me he enterado que JungKook regresó con EunHa, la noticia me tomó por sorpresa y la noche en la que mis amigas lo confirmaron lloré más de lo que hubiese querido. Al parecer todo lo que dijo fue una cruel mentira.


Y lo comprobé cuando veía las fotos que EunHa publicaba, en donde se los veía a ambos muy felices. Aquello afectó mi estado de ánimo por un mes entero, pero gracias a mis amigos he logrado superarlo poco a poco. Me sobresalté al sentir el móvil vibrar en mi bolsillo, iba tan ensimismada en mis pensamientos que no lo había escuchado antes.


— Hola mamá —Sonreí ni bien contesté la llamada, hablar con ella era como una terapia para mí.

Hola pequeña, ¿dónde estás?

— Llegando al apartamento, ¿por qué?

Es que salí a comprar algunas cosas y necesitaba que me ayudes con algo.

Claro, ¿dónde estás? —Me detuve en medio de la vereda.

Te enviaré la dirección, no demores.

Bien, nos vemos allá. Te quiero.

Te quiero más.

Finalicé la llamada y al minuto recibí la dirección, detuve un taxi y le di las indicaciones. Luego de diez minutos llegué al lugar, observé extrañada a mi alrededor al tener varios árboles de cerezo cerca, un lindo puente y debajo de él un riachuelo.


— ¿Quién hace compras aquí? No veo ningún supermercado —Hablé en voz baja, mirando a mi alrededor. Empecé a caminar en busca de mi madre y decidí subir el puente para así tener una mejor visión.


— ¿Buscas a alguien? —Oí que dijeron a mis espaldas.

— Sí —Entrecerré los ojos intentando visualizarla por los árboles, pero era en vano—, ¿tal vez ha visto a una señora cabello negro, alta y...

Giré y abrí los ojos de par en par al ver a quien menos esperaba.

— ¿JungKook? —Pregunté con mi voz entrecortándose, no podía creerlo.

— El mismo —Me regaló una de sus lindas sonrisas.

— ¿Cómo... ¿Qué... —Me veía ridícula pronunciando frases incompletas, estaba segura de ello. Se acercó a mí a pasos lentos y confirmé que realmente era él, su cabello negro, sus lindos ojitos, su naricita y sus labios rosados.

El Príncipe y la Rana » jjk ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora