Capítulo 29

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Oficialmente, comencé a ejercer mi cargo la primera semana de Noviembre. En las mañanas estaba con Peter, afinando detalles con él y asegurandome de que todo lo concerniente a su puesto quedara claro. En las tardes, estaba con Mario Andrés recibiendo mis nuevas responsabilidades.

El problema de cuando tu jefe es tu pareja, es que en vez de concentrarse en trabajar, están pendientes de otras cosas que prefiero no mencionar. En este caso, es él. Yo estaba pendiente de aprender lo que más pudiese de todo lo que él sabe como si de gatear se tratara, pero él se desconcentraba cuando me acercaba mucho y comenzaba a besar mi cuello.

Incluso, el último día propuso que estableciera mi oficina con él porque tenía suficiente espacio para ambos y así estábamos juntos. Obviamente me negué porque ya la remodelación en el piso de finanzas estaba listo, el personal contratado y estoy enamorado de mi oficina.

No es tan amplia como la suya, pero si mucho más grande a la que yo tenía. Una hermosa vista a toda la ciudad, pude colocar un minibar, un sofá, un televisor y un amplio escritorio. Lo único que traje de mi oficina vieja fue la alfombra verde manzana que no se consiguió en ningún otro sitio.

Las dos semanas que dió Don Marco para la presentación de los nuevos proyectos pasaron y se les dió una prórroga de unos días más hasta el viernes, mismo día del cumpleaños de Mario Andrés.

Estoy que me vuelvo loco porque tengo los arreglos pendientes de la reunión sencilla que tendremos, el regalo que le compré en en la tienda británica en Tokio que mandé a envolver con especial cuidado confiando en Carlos como el único que puede saber de él. Y por último, a Dilan y a Stephanie que dejé en el mini gimnasio preparando algunas cosas para la fiesta privada que le daré a Mario donde solo él y yo seremos asistentes.

Mario preside la mesa de conferencias, estoy a su lado derecho y el gerente de finanzas a su izquierda. Don Marco está conectado en teleconferencia para escuchar todos los detalles de los proyectos a iniciar. La empresa está dispuesta a desembolsar una gran cantidad de dinero para la construcción de al menos cinco hoteles.

Ivone luce aterrada delante de casi toda la empresa y más siendo que es la primera el presidente general presenciará la presentación.

—Buenos días —saluda—. El Comité de Proyectos realizó un estudio profundo de los mercados que se ordenó investigar para la construcción y determinó los siguientes países más fuertes para empezar con las construcciones.

Ecuador, El Salvador, Costa Rica, Nicaragua y Paraguay fueron los países que ella consideró eran los mejores. Mario Andrés y yo nos dedicamos varias miradas furtivas mientras Ivone habla sobre los números que le interesan a la empresa. Una vez que termina, Mario Andrés toma la palabra.

—Ivone, explique en palabras sencillas en qué se basa el estudio profundo que realiza el comité de construcción.

La orden de Mario parece tomarle por sorpresa y ella pasa a explicar en palabras que son todo, menos sencilla, en que se basa para el estudio. En medio de su explicación, Mario le hace una seña para que guarde silencio y retoma la palabra.

—La gerencia comercial y vicepresidencia realizaron los mismos estudios en los más de treinta países e islas que componen el continente. Nuestros datos difieren mucho de lo que ustedes presenta. Señor Boat, explique los datos que recopilamos nosotros.

Me levanto de mi puesto y me coloco en la posición que estaba ocupando Ivone antes de sentarse.

—Nuestros estudió se basó en, como solicitó presidencia, el PIB y el IDH de los países donde construiremos. Además de ello, se tomó en cuenta cuáles son los que reciben la mayor cantidad de turistas al año y cuáles son los que más temporada alta poseen.

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