"Brisa Bourgeois".|Segunda parte de "¡Este no es mi cuerpo!"

Introducción.

===17 años después====

Cierta rubia de ojos esmeralda se hallaba platicando junto a su mejor amigo en el patio de su Universidad, aprovechando de que tenían tiempo gracias a que habían terminado sus exámenes antes de la hora dicha por su profesora...

-¿Entonces?...

-¿Entonces qué?...

-¿Vamos al cine con Justin y Maritza?

-¿Quién es Justin?...

-Ya te dije que es un amigo que vive por mi casa... Además de que es hijo de un amigo de mamá...

-Pfff... No lo sé Matías... Tendría que preguntarle a mis papás...

-Ay, Bri... Bien sabes que tus papás si te dejan salir conmigo... Anda, acepta...

-No lo sé, aunque sé que me dejan salir contigo, recuerda que tengo una hermanita menor con la cual pasar el tiempo...

-Que suerte que tengas hermanos... Yo soy hijo único porque mi madre no quiso tener más bebés...

-¿Tan traumada la dejaste?

-No lo creo, pero sabes que mi mamá es alguien a quien digamos que no le gustan tanto los niños... Se desespera un poco rápido...

-En el mundo hay 2 tipos de mujeres porque mi mamá también se desespera rápido y quería un niño más...

-Te entiendo, pero mi padre también es algo especial, porque es también algo bruto y también desespera a mi mamá... —dijo el de cabellera café— Entonces tiene que aguantar con 2 tontos...

-Pobre de tu mamá, pero-

La chica iba a hablar cuando vio como de pronto el cielo se oscureció y grandes granizos juntados con nieve comenzaran a caer, haciendo a los alumnos correr a lugares cerrados por el dolor que causaban los granizos al pegarles...

-¿Qué rayos es esto?... —preguntó sorprendido el de mirada azul— ¿Nieve en verano?...

-Lo peor... Fue todo d-¡Auch!... —tocó su brazo donde le pegó un granizo— Duele...

-¡Vayamos al edificio!

-Cubrete con tu mochila...

Dijo la Bourgeois antes de que ambos usarán sus mochilas como sombreros para correr hacia dentro del edificio escolar  teniendo cuidado de no ser golpeados hasta llegar siendo el chico que volteara a ver preocupado a su mejor amiga que había bajado su mochila al suelo para tocar su brazo...

-Auch...

-Bri... ¿Estás bien?

-No... —dirigió su mirada a su brazo y se lo mostró a su amigo, dejándole ver un gran moretón— Me duele...

-Rayos... Vayamos a la enfermería hermana...

Ambos se dirigieron a la enfermería donde ella no era la única que esperaba por entrar, a lo que negó con la cabeza...

-No Matías, hay mucha gente esperando por entrar...

-Pero no puedes ni mover el brazo...

-Es solo el dolor... En un momento que pase la tormenta, pediré permiso para irme a casa y...

-¿Brisa?... —cuestionó al ver como la chica callaba— ¿Qué pasó?...

-Escucha...

El chico calló para tratar de oír lo que la fémina oía, no teniendo mucho éxito en ello, a lo que esperó por unos momentos hasta que la atención de la blonda se enfocara en una tercera voz que le hablaba, volteando a la dirección de la misma, viendo un chico pelirrojo de un ojo verde y otro azul, dándose cuenta que se trataba de un chico que había visto un par de veces desde que había entrado al colegio, pero hasta ahí...