Cuando Jimena, una chica enamoradiza, se encuentra nuevamente frente al desamor, le llega un extraño mensaje, indicándole que el gran amor de su vida ya lo ha besado.
¿Qué puede hacer ahora para saber cuál de todos es?
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Al despertar al día siguiente, Jose Luis, va a su cuarto para pasar al baño y Romina aún estaba dormida, ésta roncaba y bastante fuerte. Lo atractiva que la encontró la noche anterior de pronto se le esfumó, no le gustó la idea de compartir su cama con alguien que ronca así de fuerte. Cerró la puerta del baño, tomó una ducha y luego con la toalla en la cintura, limpia el espejo con la mano izquierda y se pregunta a sí mismo.
—¿Qué estás haciendo Jose Luis? ¿qué estás haciendo? ... estas huyendo, aceptar ese compromiso no es mas que estar huyendo por miedo, estas tomando la decisión más fácil. Juan José, vos me dijiste que tengo que enfrentar mis miedos, eso es lo que voy a hacer —dijo golpeando el mesón del mármol— voy a intentar sacar adelante a ésta familia por mis propios medios.
Salió del baño y se cambió lo más rápido posible, luego sacó de una caja un par de cuadernos viejos.
—Vamos a probar la suerte.
Con los cuadernos bajo el brazo salió del cuarto, en el momento en que Romina se despierta y lo llama pero hizo de cuenta como si no la escuchara, se dirigió al comedor y ahí encontró a Pablito, Sofía, y María que les estaba sirviendo el desayuno. De pronto, Romina sale del cuarto de Jose Luis.
María abrió la boca y ojos muy grande.
—Joven Jose Luis, no está bien eso de que primero con una y luego con otra, no es bueno que el niño vea esas cosas.
—María no...
—No va a haber otra, en un mes nos casamos. Servime el desayuno ¿si?. ¿Dónde estas yendo tan temprano mi amor?
—Tengo que hacer unas cosas. Nos vemos en el almuerzo chicos, María puede llevar a Pablito al colegio, ah y Sofía ¿cuándo vas a volver a la universidad?
—No se, no creo que...
—Volvés hoy.
—Pero...
—Pero nada, volvés hoy y punto.
Jose Luis se dirigió a diferentes empresas editoriales, pero ninguna quería aceptar su trabajo para publicarlo.
Sabía que era una posibilidad, la escritura de poemas no era su fuerte. Tomó un curso de literatura, pero su especialidad era el montaje y producción de obras teatrales y audiovisuales. Había montado una productora en el extranjero, sin embargo una falsa denuncia y la crítica periodística a la cabeza de su ex novia lo destruyeron. Haberlo perdido todo de la noche a la mañana lo quebró por dentro, y no tenía ganas de volver a trabajar en el mismo rubro, por eso comenzar una carrera en la poesía, con un seudónimo, era una opción que encajaba en sus pequeños deseos.
Después de haber cerrado la productora, no había tenido la necesidad de trabajar, estuvo viajando por el mundo intentando reponerse por lo sucedido, al menos eso era lo que sus padres pensaban, la verdad era que lo único que quería hacer era esconderse, de todo y de todos, cuando sucedió lo de sus padres y su hermano regresó a casa inmediatamente.
