Cuando Jimena, una chica enamoradiza, se encuentra nuevamente frente al desamor, le llega un extraño mensaje, indicándole que el gran amor de su vida ya lo ha besado.
¿Qué puede hacer ahora para saber cuál de todos es?
-Ahora ¿me podés explicar qué fue todo eso? -pregunta Jimena curiosa.
-Te estaba diciendo que todo me fue terrible anoche, ¿te acordás?
-Si, ¿pero eso que tiene que ver con tu hermano?
-Jimena, soy una tonta, una tonta -Sofía se pone a llorar, Jimena la abraza.
-¿Por tratar así a tu hermano? Tranquila ya se le va a pasar.
-No, no por eso, Alejandro y Andrea, los dos, ellos... los dos, soy una tonta, una total estúpida.
-Tranquila mi amor, no entiendo nada.
-¿Ves mi frente? ¿La ves?
-Si, si la veo, ¿pero qué pasa?
-¿No ves los tremendos cuernos que tengo? Parezco un alce, están inmensos esos cuernos.
-¿Alejandro? -preguntó Jimena.
-Si, con Andrea, mi mejor amiga, y al parecer ya hace un tiempo de esto. ¿Cómo no me di cuenta de eso?
-Yo no entiendo qué es lo que tiene algunos hombres en la cabeza, algún síndrome que bloquea la fidelidad. Pero no te preocupes, vamos a hacer que se arrepienta, vas a ver que si, le vamos a dar su merecido.
-Es que ya le dí su merecido, al menos una parte, y por eso es que Jose se enojó conmigo, porque justo estaba la prensa cuando le dí.
-A ver, a ver ¿Qué hiciste qué?
-Le volqué la cara de un puñete.
-Ja, ja, ja, ¿le volcaste la cara de un puñete?
-Si, se la volqué.
-¿Y no pudiste haberle dado un cachetada y ya?
-Jimena, tengo dos hermanos hombres, dos, vos creés que yo se dar cachetazos, puñete limpio, esa es mi arma. Bueno tenía dos hermanos, ahora solo me queda uno, el más celoso de los dos.
-¿Y el está enojado porque vos le diste un puñete a tu novio para defenderte y la prensa te sacó una foto?
-Si y no, por el puñete no creo que se moleste mucho, pasa que estaba afuera de un hotel, a medio vestir, y el bruto me llamó virgencita entre otras cosas, supongo que el periódico debe decir algo por el estilo.
-Ahh ya veo, y entonces vos y el, ya sabes... ¿pasó?
-No, gracias a Dios no. Debo tener un ángel o algo por el estilo que me cuida, porque imagínate si mi primera vez haya sido con ese animal.
-Yo creo que tenés más de un ángel, tenés tres.
-Si tengo tres.
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