En casa de Jose Luis, hay al menos unos 30 jóvenes, todos ebrios, la música a tope. Sofía estaba con un vaso de cerveza, su novio Alejandro la lleva a su cuarto y comienza a besarla efusivamente. La tira en la cama, ella intenta pararlo, pero el sigue.
—Basta Alejandro, pará ... no todavía... Alejandro esperá, todavía no estoy lista. ¡BASTA! —dijo empujándolo para poder levantarse de la cama.
—¿Y hasta cuándo tengo que esperar? Estoy cansado de esperar, para que esperar, vos me amás ¿no?
—Si, te amo —dijo ella.
—Entonces probámelo. Hagamos que esta noche sea mágica —dijo Alejandro mientras intentaba besarla a la fuerza.
—¿No te das cuenta que todo esto está lejos de ser mágico? —dijo ella.
—¿Qué querés de mí? ¿Ah? Que querés de mí —dice Alejandro poniendo los ojos en blanco y pasando sus manos por la cara.
—Solo que me tengas paciencia.
—Me estoy cansando Sofía, ¿cuánto tiempo más crees que pueda aguantar?
Se escucha que algo se rompe y Sofía sale del cuarto para ver que era.
—¡Ese adorno era el favorito de mi madre! —dice a punto de llorar— chicos por favor tengan más de cuidado.
Alejandro saca de su bolsillo unas gotas, sirve un par de vasos de cerveza y en uno de esos le pone unas cuantas de gotas, luego le pone otras cinco gotas más.
Se acerca a Sofía y le da el baso en el que le había puesto las gotas.
—Ya no quiero discutir. Salud por nosotros, pero tiene que ser hasta el fondo.
Sofía lo toma hasta el fondo, de pronto algo más se cae y vuelca a ver que era, se siente un poco mareada, intenta seguir caminando, se deja caer en el sillón de la sala. Alejandro se mantiene al margen hasta que esta pierde el conocimiento, la levanta y la lleva hasta su cama y comienza a levantarle el vestido.
En ese momento llega Jimena y Jose Luis, éste seguía apoyado en los hombros de ella para caminar, Jose Luis le indica dónde quedaba su cuarto y ella lo lleva hasta ahí. Tiene que sacar a la pareja que estaba en esa cama, ambos estaban a medio vestir. Luego va a buscar el cuarto de Pablito que estaba al frente, encuentra al niño sentado en una esquina, lo abraza y lo consuela.
—Me duele la barriga.
—Cómo no te va a doler, ¿cuantos paquetes de dulces te comiste? —le dice abrazándolo.
—Muchos, Sofía me los dio para que no salga del cuarto.
—Ya mi amor, tranquilo voy a llamar a mi hermano, el es doctor y me va a decir que hacer ¿si?, mientras échate en la cama.
En el momento en que Jimena estaba saliendo del cuarto de Pablito ve que el cuarto de Sofía estaba un poco abierto, logra ver cómo Alejandro se estaba quitando el pantalón mientras se lanza a la cama.
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Cansada de besar sapos
Kurgu OlmayanCuando Jimena, una chica enamoradiza, se encuentra nuevamente frente al desamor, le llega un extraño mensaje, indicándole que el gran amor de su vida ya lo ha besado. ¿Qué puede hacer ahora para saber cuál de todos es?