¡¡¿Reencarne como la hija de Tony Stark?!!

Capítulo 17: Niñeras Y ¡Madres Tengo Visitas!

¿Recuerdan que mamá dejó de contratarme una niñera debido a que era muy inteligente y por eso no la necesitaba?... Bueno todo se fue al demonio después de que intente hacer por recomendación de Shuri  una bomba de pintura ya saben como esa que sale en Lluvia de Hamburguesas para hacer una fiesta.

El punto es que cuando mamá llegó a la casa, la sala, el comedor y parte de la cocina estaba pintada de diferentes colores, con brillos y un cartel que decía "Fiesta" además de que quise intentar cocinar y digamos que hubo que comprobar que no hubiera nada vivo en el horno por que estoy segura que algo se movió allí dentro.

Hubo muchas candidatas pero ninguna convencía a mamá, según ella algunas eran muy buenas y me iban a consentir, otras eran muy jóvenes y traerían a sus novios y otras solo le cayeron mal por que si.

Ancestral no podía por obvias razones y Beyonce digamos que tiene suficiente con aquello de enseñarme magia.

Pero honestamente nunca pensé que él sería mi niñero.

— ¿Por qué los juguetes hablan? ¿Lo hacen en la vida real? — Preguntó confundido.

Suspiré frustada— Capileta ya te lo dije ellos hablan porque es la magia del cine y no, en la vida real ellos no tienen vida. ¡Asi que deja de ver a mi peluche de Iron Man como si te fuera a saltar encima!.

— ¡Lo siento! Pero esa película te hace pensar.

— Pensar nada, es solo ficción te juro por lo que más quieras que ninguno juguete tiene vida... Excepto Chucky pero eso es diferente.

—¿Qué es Chucky?. — Pregunté asustado.

— Olvidalo.

— Como sea, la televisión pudre el cerebro así que mejor hagamos otra cosa. — Apago el televisor y se levantó del sillón.

—¡Oye! Íbamos en la parte en que Lotso los traiciona.

— Te parece si escuchamos música y jugamos un juego de mesa. — Me ignoro encendiendo la radio.

— ¿Y si mejor cocinamos?.

— Tu mamá no quiere que te acerques a la cocina.

— Porfavor. — Junte mis manos y hice un puchero.

— ¿Si te digo que si, dejaras de hacer eso? — Preguntó desviando la mirada.

— ¡Si!

Suspiro resignado— De acuerdo, haremos algo fácil una pizza tal vez.

— ¿Tu a qué le llamas fácil?. — Pregunté confundida.

— La pizza es fácil.

— No, estoy muy segura de que tu concepto esté bien estructurado. Como sea te ayudare.

Fue muy divertido el cocinar junto a Steve al principio fue serio y se veia muy concentrado en su trabajo hasta que le lance un poco de harina en la cara allí fue cuando la cosa se descontrolo  porque el señor odio la bromas en momentos serios ¡Me lanzó harina! La guerra de Ingredientes terminó conmigo bañada en harina, Steve con dos huevos rotos en la cabeza y una pizza en el horno.

— Iré a cambiarme. — Subí corriendo a mi cuarto encontrándome con la reina del drama.

— Midgardiana enana. — Saludo.

— Reina del drama. — Le sonreí. — ¿Qué haces por aquí? Normalmente sueles visitarme por la noches.

— Le conté a madre sobre ti. — Me miró inexpresivo.

Abrí los ojos. — ¿Okay...? Digo me halaga pero no entiendo porque lo hiciste.

— Ella quiere conocerte. — Sonrió ladino mientras otra figura aparecía a su lado.