Capítulo 7: Pinkie Pie Y El Castigo Del Arbolito Verde

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Explicaré la situación. Estoy escondida debajo de mi cama, con la comida chatarra suficiente para sobrevivir por un mes, ¿Por qué? Esa sería una buena pregunta y bueno eso se debe a varios factores.

Me levante temprano con mucha energía, he de aclarar, por lo que le pedí a mamá que mis amigos vinieran a jugar porque si puedo tener 21 años psicologicamente hablando pero físicamente 6 años los cuales me respaldan en cualquier situación.

Elliot, Noah, y Harper llegaron hace unas cuantas horas, se suponía que sería un día tranquilo. Pero vamos un día tranquilo en este mundo es como decir que Loki no tiene complejo de psicópata y amante de niñas menores, por que si en cada fanfict o la mayoría el men se queda con la chica menor de edad y para la mayoría es hermoso y mágico y bla... bla... bla todos sabemos que en el mundo real eso sería ilegal. De cualquier forma me estoy desviando del tema, como decía los chicos llegaron y comenzamos a jugar todo estaba bien, todos felices y cantando Hakuna Matata, hasta que la puerta sonó...

—¡Martha, sal ahora mismo de donde sea que estés!. —Grito mi madre desde el segundo piso.

Claro está, que yo no me moví.

"Señorita, su madre está viniendo directo hacia usted."

La puerta del cuarto fue abierta de lado a lado.

—Martha, o sales ahora mismo de allí o yo misma me voy a encargar de sacarte.

—...

"Señorita, creo que debería salir."

Emily, por favor a partir de hoy Martha tiene prohibido tocar cualquier herramienta o libro si no sale a la cuenta de tres.

—...

" Señorita... "

1...

"No sería capaz ¿Verdad?"  Pensé.

2...

"Ohhh Heimdall que todo lo ves ¿No podrías sacarme de aquí con el bifrost?"

Tre... — Salí de debajo de mi cama.

—¡Ya estoy aquí, Emily ni se te ocurra ayudarla a ocultar mis cosas o no te actualizo esta semana!. — Grite hacia la IA.

— ¡ME PUEDES EXPLICAR ¿QUÉ DIABLOS PASO CUANDO ME FUI?! Y ¡¿POR QUÉ HAY UN HOMBRE CON PARCHE EN LA SALA MANCHADO DE PINTURA FLUORESCENTE DE COLOR ROSA?!.

¿Alguien más se quedo sordo? ¿No, solo yo?

— En mi defensa el estaba debajo de la pintura, no la pintura encima de él. — Me defendí.

— ¡Eso no tiene sentido!

— ¡Es obvio que no lo tiene! ¿A quien se le ocurre ponerse debajo de pintura?. — murmure.

—Martha...— Esta vez si se enojo.— Vas a bajar de aquí a disculparte con aquel hombre ¡Ahora mismo!.

—Pero...

—¡Nada de peros!

Me encamine hacia la puerta con la vista en el piso, no porque estuviera asustada o triste si no porque estaba mordiendo mi labio evitando reír.

Baje las escaleras bajo la atenta mirada de Nick Fury. El color rosa le daba un toque digamos que mas... reluciente.

Mi madre se paro a mi lado.

—Lo siento. — Baje la cabeza.

— Disculpela, mi hija no tiende a comportarse así. Yo le pago la tintoreria. — Por mas enojada que este ella también quería reírse del hombre que ahora parecía Pinkie Pie de My little Pony.

¡¡¿Reencarne como la hija de Tony Stark?!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora