Enredados (Laliter)

Capítulo 1

Hola a todos! ADVERTENCIA: Esta es una novela que toca temas reales, que pasan en la actualidad, puede ser sensible para ustedes, si no les gusta el drama, NO la lean. En una primera versión tuvo un final que me genero mucho dolor escribir, espero que esta nueva versión les guste.
RECORDATORIO: Quienes escribimos somos personas muy sensibles que le ponemos amor y entregamos lo mejor para escribir una buena historia, tratar de siempre pensar en eso.
Ahora sí, los invito a leer Enredados💫

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Terminé de ponerme un poco de perfume, mi amiga Eugenia se quedó a mi lado hasta que nos abrieron la camioneta negra para bajar. Era el estreno de la película del hermano de ella, así que me pidió que la acompañara.
-¿Me pinte bien los labios? Lo hice sin mirarme al espejo-quiso saber luego que de bajáramos y asentí con la cabeza, las luces de las cámaras de paparazzis se hizo presente y ambas sonreímos amistosas para los periodistas. Caminamos por la alfombra roja y entramos al lugar donde iba a ser la fiesta luego del estreno, nos hubiese gustado poder ver la película pero ambas teníamos compromisos previos.
Entré del brazo de Eugenia, la China y caminamos hasta llegar al salón, estaba todo decorado con luces que si te alumbraban cambiaban el color de tú cuerpo, así y todo estaba algo oscuro. Ella se separó de mí al ver a su hermano, yo la seguí y después de que ella lo saludara fue mi turno.
-Lali que lindo que pudiste venir un rato a la fiesta por lo menos-me sonrió y también le sonreí, le agradecí por haberme invitado y fui hasta la barra de tragos ya que mi amiga se había esfumado, ella solía ser escurridiza. Me senté al lado de la barra y pedí un coctel. Estaba bebiéndolo y cuando me voltee vi venir a toda velocidad a un chico sobre mí, cayó sobre mí haciendo que se me volcara el cóctel.
-Perdón-él se disculpó sintiéndose mal- me tropecé.. Soy algo torpe pero estoy trabajando en eso-pidió una servilleta y empezó a intentar secar parte de mi vestido, cuando él elevó su mirada a mi cara me quedé mirándolo.
Algo es su mirada era familiar.. Y ahí lo vi, años después, él era un hombre y yo ahora una mujer.
-¿Peter?-lo miré aún dudosa, él me sonrió y se apartó un poco de mí, era castaño y tenía unos ojos verdes que agobiaban bastante a quién los mirara.
-¿Vos sos?-quiso saber y me quedé shockeada, ¿que quién era yo?
-Mariana-me presenté como si nada- amiga de la China, la China hermana de Agustín.
-Agustín amigo mío, hermano de la vida-él me sonrió divertido-¿ qué?
-Mariana Esposito, Lali-le respondí y él se quedó paralizado por un segundo, o tal vez minutos.
-Lali..-él pronunció algo nervioso-¿como estas? Yo.. No sabía..
-Solo hicimos una película juntos y.. Era chica, lo se.. No soy la misma a quién recordas-me encogí de hombros.
-La verdad que no.. No te volví a cruzar por ningún otro lugar-me dijo mirándome esta vez con curiosidad.
-Lo mismo digo, no supe mucho de vos.. No volví a verte en películas, lo único que sí supe es que sos muy exitoso, la promesa del cine-fui sincera, había escuchado algo acerca de él.
-Solo.. Tuve suerte en las películas para las que fui elegido-él también se encogió de hombros.
-Fuiste siempre talentoso, te sabías las líneas a decir en un abrir y cerrar de ojos-le conté mi observación y él me sonrió.
-Siempre me sorprendiste porque.. Eras pequeña, tenías carácter y hacías las escenas de una manera que todos se quedaban mirándote después de hacerla
-Sigo teniendo carácter-le advertí divertida y él se acercó a la barra-¿un cóctel no?-me miró- te lo debo
-Pero si son gratis-me burlé de él.
-Deja que piense que lo estoy pagando.. Además, solo quería invitarte algo por los viejos tiempos
-Por los viejos tiempos-elevé mi copa sonriéndole y él chocó la suya con la mía mirándome, bajé mi mirada sintiéndome rara.
-Un gusto verte..-me dijo y bebí todo seguido.
-Mejor me hoy a buscar a..-estaba por irme cuando me agarró del brazo, me soltó y se quedó mirándome.
-¿Tú número?-quiso saber- para no perder el contacto.. Solo para tenerlo.. Me gusta estar en contacto con las personas
-Entendí-él me dio su teléfono celular y anoté mí número- listo
-Después te escribo-me saludó con la mano y me fui luego de regalarle una pequeña sonrisa.
Caminé hacia donde estaba mí amiga que se rió de algo que le dijeron.
-¿Vamos ya?-le pregunté.
-Si queres sí, solo quería pasar a saludar igual-ella me agarró nuevamente del brazo y avanzamos hasta la salida, tomé aire y entré a la camioneta, el chofer se puso en marcha.
-Tenes calor..no hacía calor, es invierno-Eugenia observó porque estaba abanicándome con mis propias manos.
-Solo.. Vi a alguien que conocí hace años-le conté.
-Y te puso nerviosa-ella indagó.
-Sí.. Como todas las personas que uno ve que no ve hace mucho-proseguí- no me reconoció
-¿Quién era?-ella me miró fijo.
-Juan Pedro... Juan Pedro Lanzani-abrí una bebida con gas y bebí algo.
-Peter.. El amigo de Agustín- ella elevó sus cejas- lindo
-Siempre fue carilindo-afirmé porque era obvio- pero sobre todo buena persona
-Lo se, por algo es amigo de mi hermano.. No recordaba que habían actuado juntos-ella agarró una bebida para ella.
-Esa película en la que él se enamora de mí, yo de él y no hay un beso en toda la película porque yo era chica-le conté y sentí el calor apagares, la bebida había venido bien.
-Ahora que decís me acuerdo de la película, buena química eh-ella me gastó.
-Y ahora lo que recordas de toda la película es eso.. ¿Y ahora que pasó?-ella quiso seguir indagando y suspiré-¡¿que?!
-Nada.. Va a escribirme para no volver a perder el contacto-le terminé de contar.
-Claro.. Si él dice..-mi amiga se rió y elevó sus cejas- cuidado con él, él y Agustín viven de manera alocada, aunque ya estén grandecitos siguen apareciendo en revistas por varios rumores
-Como todas las personas que trabajamos en esto-la miré- se cuidarme, además estás hablándome como si me fuera a casar con él.. Es solo una persona que no había visto hace tiempo, que es amable y que quiere mantenerse en contacto, solo eso
-Te doy menos de un mes para que él se acerque a vos-ella me desafió.
-¿Hecho?-reí.
-Mejor te llama en tres días-ella afirmó.
-Me llana mañana-dije y cuando terminé de decir eso recibí un mensaje- me habló ahora..
-¡¿Qué?!-mi amiga saltó del asiento y se dio la cabeza con el techo de la camioneta- ayy
-Solo me dijo que era él.. Seguro para que lo agende-miré el mensaje una y otra vez.
-Agendalo, no seas estúpida-ella me sacó mi teléfono de mis manos- listo, misión cumplida
-¿Nunca vas a dejar de meterte en mí vida, cierto?-la miré.
-Cierto... Pero me necesitas y me queres por eso-dijo eso y la abracé.
-Sí.. Te quiero a vos-ella me sonrió y el chofer nos dejo en mi casa, a veces después de que teníamos eventos una se quedaba a dormir en lo de la otra.
Así fue que me me recosté pensando en el día en general, en todo lo que había tenido.. Y en los ojos de Peter Lanzani.