Capítulo 15

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Llegué al juzgado y todas las cámaras captaron cada paso que di hasta traspasar la puerta. Busqué a una persona que me atendiera, necesitaba hablar, estuve a borde de hacerlo cuando recordé las palabras que me dijo Mariano, que tenga cuidado.
Cerré mis ojos y tomé aire, lo solté.
Pedí hablar con el juez de la causa de Peter, me trataron de llevar hacia la salida nuevamente, pero me resistí, monté un escándalo, tal que me atendió el juez.
-Mariana Esposito-me llamó el juez-¿que tenías para decirme?
-Yo...-traté de despejar mis miedos y levanté mi mirada, miré al juez-Peter Lanzani es inocente
El juez me miró y se quedó pensativo.
-¿Vos no escuchaste el testimonio de la víctima?-me cuestionó-fue claro, se pudo comprobar que..
-Es todo un circo, ¿de que pruebas hablan todos? Nada puntual hay que pueda determinar que..-empecé pero el juez me interrumpió.
-¿Vos a caso tenes pruebas de que él no es culpable? No las tenes, por lo pronto se le cree a la víctima, a la cual se la sometió a tests psicológicos y dieron resultados que determinan que tiene la psiquis dañada- el juez soltó eso y imaginé que eso podría ser cierto por un solo motivo: Mariano estaba haciéndole lo mismo que me había hecho a mí a su nueva mujer.
Iba a seguir hablando con el juez cuando sentí un mareo, se me aflojaron las piernas, me agarré contra la pared.
-Siento que no es justo que hayan decidido meterlo preso sin tener pruebas que determinen que él hizo algo-seguí y el juez suspiró.
-Tengo que irme...-él intentó liberarse de mí y me puse frente a la puerta- correte nena
-Pospone el veredicto final-le pedí y me agarró el mareo más fuerte- o te vomito encima, ganas no me faltan
El juez me miró mal y se fue dejándome sola, antes de irme pasé por el baño, seguía muy mareada, me lavé la cara y traté de respirar mejor para calmar mis nervios.
Cuando salí me enfrenté a los medios de comunicación, buscaban mi palabra, mi abogado salió detrás de mí y mi chofer manejó hasta los estudios donde tendría que grabar.
Gastón me vio la mala cara cuando llegué.
-Me siento mal, desde donde se lo mire...-empecé después de que entrara a mi camerino y que lo haya cerrado- ¿entendes lo que acaba de pasar? Se lo van a llevar preso...
Sentí que la piel se me errizaba, Gastón se acercó para abrazarme.
-Estas temblando Lali-me miró preocupado- no es bueno que estes tan nerviosa, tan..
-Me siento una mierda Gas... Es mí culpa.. Es mi culpa todo, absolutamente todo, esto.. Si hay alguien que tiene que pagar soy yo, él no tiene nada que ver-solté esas palabras y me liberé, me quebré, fui consciente de que realmente estaba temblando, tome aire para soltarlo y tratar de encontrar un poco de calma.
-Primero, relajá Lali... Estas embarazada-me recordó- segundo, vos ya hiciste todo lo que pudiste hacer, ¿fuiste a hablar no?
-Sí... Pero no me creen, necesitan pruebas-lo miré angustiada.
-Todo se puede acomodar, tene algo de fe, ¿sí?-Gastón me dio otro abrazo-¿podes grabar hoy?
Asentí con la cabeza no muy convencida.
-Si no lo hago matan a mi personaje hoy mismo..-traté de ponerle un poco de humor al asunto. Gastón me dejó sola y me cambié, fui a maquillaje y me metí en personaje, me distraje bastantes veces, en en medio de un intervalo me comí todo, para terminar devolviendo y terminar cubierta por una manta en el sofá de mi camerino, encendí un televisor y miré los titulares, Peter saliendo del juzgado, su cara seria, los fotógrafos apuntándolo. Cerré mis ojos e igualmente se me escaparon algunas lágrimas, iba a llorar más cuando me llamaron para grabar.
-Voy..-alcancé a decir- ya voy..
Me puse de pie nuevamente mareada y traté de despejar los pensamientos que me atormentaban.
Cuando finalicé con las grabaciones suspiré aliviada, volví a mi departamento y lo vi a Peter esperándome en la puerta, lo entré lo más rápido que pude para que la prensa no lo acose, cuando estuvimos solos el me abrazó.
-Yo no soy la bestia-fue todo lo que me dijo y se me partió el alma, me destruyó, me puse a llorar en silencio mientras él con una de sus manos me acariciaba el pelo-sos la última persona a la que voy a ver.. decidí pasar estas horas con vos.. Si... Si queres.. Yo..
No lo dejé seguir, lo besé, tenía esa necesidad, la de llenar el vacío que él sentía y el mío con cariño, él me abrazó por la cintura, yo tiré de él llevándolo a mi habitación y lo empujé, me puse encima suyo sin dejar de besarlo pero él me detuvo.
-Lali-me llamó- hoy no Lali, solo quiero.. Estar junto a vos así..-él volvió a acariciar mi pelo, me miró a los ojos-¿que clase de embrujo me hiciste?-él cerro sus párpados y suspiró-soy la peor persona que se pudo cruzar en tú camino
Peter dejó de acariciarme y noté un quiebre en su voz.
-Mereces a una persona mejor, no voy a poder estar presente..-Peter siguió con sus ojos cerrados- Lali hay algo que quiero decirte..
Peter se quedó en silencio por un momento y los latidos se me aceleraron, abrió sus ojos y miró los míos.
-Siento muchas cosas raras.. Cosas que tal vez no tengo definidas aún pero no quiero dejar pasar ese hecho... Cambiaste una parte de mí, algo sí me importa y me va a importar por siempre-Peter dijo eso y puso mi mano sobre mi panza aún plana, mis ojos se llenaron de lágrimas.. Él se estaba despidiendo, me aferré a su cuerpo conteniendo las ganas de llorar, pero fallé- repito Lali mereces una mejor persona, no la que sale en las revistas por salir un día con una, otro día con otra...
Puse una de mis manos en su boca, y me quedé mirándolo.
-Ese no es el Peter que conocí, yo... Creo en que conocí-me atreví a decir.
-Pero ese es una farsa, además..¡Mirame! Estoy por ir preso-él se señaló y percibí angustia, por primera vez notaba como realmente se sentía. Mi respiración se aceleró.
-Peter no creo que vos..-empecé a decir y él fue el que me puso su mano sobre mi boca esta vez.
-Esta en mí naturaleza, cagar todo lo bueno que tengo, Lali lo mejor es que te olvides de nuestra aventura-él soltó eso como si nada y sentí como si me hubiera pegado fuerte.
-Así que aventura...
-Una aventura bonita, pero no quiero meterte más en ella-Peter me miró apenado y me entró furia, él se apartó un poco de mí.
-Sos estúpido eh, ¿crees que me podes apartar así como si nada?-elevé mis cejas- quieras o no ahora estamos atados, por una especie de cuerda imaginaria
-Vas a arrepentirte-insistió y me acerqué a él, agarré su cara entre mis manos-Lali no..
Lo besé, lo atraje hacia mi cuerpo y lo volví a besar, él se entrego y me acarició la cintura por debajo de mi blusa, le desabroché la camisa, él se quedó mirándome, como le iba quitando su ropa, me quitó la mía, y giró dejándome apresada con su cuerpo, me miró a los ojos y percibí algo que no supe como nombrarlo.
-Yo...-él no pudo decir nada más, me abrazó y apoyó su frente con la mía, se puso a llorar en silencio, Peter Lanzani, el galán de cine estaba mostrándose vulnerable, lo abracé y se me hizo un nudo en la garganta, dejé un beso en su mejilla cerrando mis ojos.
-Peter vas a salir de ahí, no vas a..-no pude seguir porque él me besó, me silenció de esa manera, de una pasional, su boca necesitaba a la mía, su cuerpo también.
Él estiró mis brazos y me dio una última mirada, entrelazó los dedos de mis manos con las suyas y nos dejamos llevar, él besó mí cuello en todo el tiempo, cerré mis ojos, la piel se me había erizado. Él rozó su nariz con la mía cuando estuvimos medio agitados, volví a besarme y sentí nuevamente dolor de alma, era tan cobarde que no podía hablar de mi pasado.
El miedo me congeló, me puse a llorar y él me acarició la espalda.
-Lali te quiero-él dijo esas palabras- no se como aún pero te quiero
No me atreví a mirarlo, sentía vergüenza, no dejó de acariciar mi espalda.
-No hace falta que vos sientas lo mismo-él suspiro- pero contra todo pronóstico siento eso, solo quería decírtelo
Él siguió despidiéndose y fue demasiado para mí, sentí un vacío enorme en mi interior, se me escaparon más lágrimas.
Hice todo lo que pude hacer, todo lo que mi cabeza me deja, aunque mi alma quiere gritar, pelear contra todos y liberarlo.
Yo me había vuelto su enemiga sin quererlo, e iba a pagarlo. Él estaba durmiendo con su enemiga, con la traición más grande. Volví a cerrar mis ojos angustiada.
-¿Dormimos?-le sugerí y él suspiró.
-Esta bien..-me abrazó hacia su cuerpo y me acomodé como pude, sentí como él se relajaba hasta dormirse. No pude pegar ojo, no pude hacerlo.
Cuando la luz de sol invadió mi habitación supe que el tiempo se había acabado, Peter se despertó y me miró antes de atravesar la puerta, me abrazó una última vez y no me dirigió la palabra.
Cuando se fue me desplomé en el suelo, abracé mis piernas y me puse a llorar, mi teléfono empezó a sonar, no lo atendí, quería estrellarlo contra una pared, me agarraron nauseas y salí corriendo al baño, me senté nuevamente sobre el suelo y la respiración se me aceleró, al cabo de un rato largo me puse de pie, caminando llegué hasta el living, agarré mi teléfono y tenía llamadas perdidas de mi abogado, Eugenia, Gastón y otros amigos.
Le devolví la llamada a mí abogado en medio de un ataque de pánico, lloré hasta que me atendió.
-Lali tengo novedades-él soltó y se me paró el corazón- volvieron a investigar, van a estar haciéndolo, suspendieron momentáneamente la condena-me agarré contra una pared mareada- va a estar bien Lali, no tienen pruebas..
-Gracias-fue todo lo que pude decir y corté la llamada, me senté en el sofá y fui recobrando el aire lentamente. Llevé mis manos a mi panza y la acaricié.
Sonó el timbre y cuando abrí era Peter con una cara que no pude descifrar.
-Vos lo sabías... Que yo era inocente, fuiste intuitiva-me abrazó- vino tú abogado y me dijo que hablaste con el juez, gracias Lali
Otra vez se me formó un nudo en la garganta, si solo supiera que estuvo en ese lugar de mierda por mi culpa, que por poco no digo nada.
Me quedé abrazándolo y apoyé mi cara sobre su pecho, lo abracé bien fuerte y suspiré.

Enredados (Laliter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora