Enredados (Laliter)

Capítulo 8

Cuando Gastón y yo salimos de mi departamento una ola de paparazzis y reporteros nos estaban esperando, nos subimos a la camioneta y se me ocurrió leer las noticias. Agarré mí teléfono y leí en voz alta "Lali Esposito ebria, Lali Esposito y Gaston Dalmau ¿romance?, Lali Esposito y Peter Lanzani, desaparecieron de la fiesta, fueron vistos juntos" terminé y vi algunas fotos, por suerte ninguna con Peter, Gastón solo me miró.
-Negar esto no va a servir de nada-él suspiró, tenía razón, la prensa escribiría siempre lo que le convenía, en este mundo vender revistas lo es todo, tener "exclusivas".
Me puse anteojos de sol y bajé de la camioneta al llegar al estudio de grabación, se me partía la cabeza.
Más periodistas, y el guardia que otra vez me rescató, Gastón entró después de mí y fui directamente a maquillaje, en el camino saludé a algunas personas.
-Hoy tenes una escena cursi con Gastón-me recordó la directora- igual confío en que va a salir bien porque por lo visto se llevan..
Fue la gota que rebalsó el vaso, me puse de pie y la maquilladora me ensució con el pincel por haberme parado.
-No pasa nada, es mi amigo-aclaré y recordé a Gastón diciéndome que no tenía sentido aclarar las cosas si las personas creían lo que querían- solo.. ¿Es en quince minutos no?
-En quince-me recordó algo avergonzada y se fue.
Me vestí y fui hasta la supuesta casa del personaje de Gastón, era puro decorado.
Él me miró con algo de diversión.
-Tiempo de dejar los problemas afuera, y de divertirnos-él me sonrió- se le da a mi personaje
Reí por la manera en la que lo dijo y asentí con la cabeza.
La escena fue una linda escena, mi personaje iba preocupada a la casa del personaje de Gastón porque se da cuenta de que él siempre estuvo para ella, y le da un beso. Después de que cortaron la toma estallamos de risa.
-Nada mal-él me volvió a molestar y me hizo reír nuevamente, hace bastante no reía mucho.
-Diez minutos y vamos a la siguiente toma-la directora dijo en voz alta.
Grabé una siete escenas más y salí por estacionamiento trasero, la prensa esperaba afuera y por suerte la evadí. Cuando llegué a la puerta de mi departamento Anthony estaba esperándome con una tarjeta en la mano, tenía un dibujo familiar.
-Gracias-le agradecí y subí a mi piso, cuando llegué entre y me senté en una silla, abrí la tarjeta y vi su letra, el innombrable.
"Hay un secreto entre los dos, puede salir a la luz, ¿no queres no? Dejame subir a las once de la noche así hablamos, solo quiero hablar, algo que nos quedó pendiente" no hizo falta que firmara, el cuerpo se me paralizó, ¿que hice para que me pasara esto?
Me quedé estática y no pude dejar de pensar en eso, su claro mensaje, me estaba extorsionando, pero..¿Porque?
Simple, seguro para jugar con mi mente de nuevo, él me había retenido a su lado por un tiempo, hasta que vi una especie de salida y dejé ese pasado atrás. Se que él se casó, que tiene un hijo... Sí, tiene un hijo, y igualmente viene y quiere imponerse en mi vida.
Traté de leer los guiones que tenía que estudiar para las grabaciones, pero mi cabeza estaba en otro lado, agarré la tarjeta de nuevo y cuando la giré vi el dibujo que tenía, era una tarjeta igual a la que le había regalado alguna vez.
El tiempo pasó lento, y cuando se hicieron las once escuché que el timbre sonó, Anthony nervioso me preguntó que hacía si lo dejaba pasar o no, le dije que lo dejara pasar, pero que si estaba mucho tiempo conmigo que interviniera.
Tocó timbre, cuando abrí la puerta traté de no temblar, mi cara se transformó aún más, para peor.
-¿Que queres?-fui cortante, me salía ser así con él.
-Hola Mariano, ¿como estas? ¿Y los modales Lali?-se rió y entró a mi departamento- voy a hacerla corta porque soy un señor de familia ahora, necesito que hables maravillas de mí porque mi carrera esta yendo para abajo, todo por ese rumor tonto de que fui malo con vos
Él encontró la tarjeta que me mandó y la dejó nuevamente en la mesa.
-Estaría mintiendo si les hablo maravillas de vos-me atreví a decir y él se acercó, me fulminó con la mirada y quiso tocarme pero me alejé, me generaba asco, rechazo y miedo.
-Los dos sabemos que tenemos pasados oscuros, puedo ventilar algunas cosas.. La fama tiene un precio-él suspiró y esta vez si me tocó la cara, me quedé estática- puedo hacer muchas cosas, tene cuidado..
Sonó el timbre y Mariano se quedó mirándome.
-¿Le dijiste a alguien de nuestra cita?-él me preguntó de mal modo.
-No es una cita, y no..-negué con la cabeza.
-Abrí la puerta-me ordenó y caminé hasta la puerta, la abrí.
Estaba Peter con un ramo de flores, él se quedó sorprendido al verme con Mariano. El innombrable había sido muy famoso en una determinada etapa, todos los programas y películas se lo disputaban, pero ahora no.
Peter vio mi cara de pánico y no me salió otra cosa que abrazarlo.
-¿Nos dejas a Lali y a mí? Teníamos una cita, no se quién sos-Peter lo enfrentó sin saberlo.
Mariano me fulminó con la mirada antes de irse y no dijo más, el reloj empezaba a correr para mí, faltaban horas o minutos para que explotara la bomba de tiempo.
Peter se quedó abrazándome y no dije nada, él me acarició el pelo.
-¿Que pasa?-quiso saber, dejé de lado el que era la última persona a la que quería ver-Lali, ¿estas bien?
Estaba ida, Peter me sacudió con cuidado.
-Es mi ex... Solo pasó a molestarme-me atreví a decirle, él me miró preocupado.
-¿Te hizo algo?-quiso saber y suspiré, si supiera todo lo que hizo y aún hace.
-Todavía no... Algo va a hacer porque no quiero ayudarlo..-le conté pero evitando contarle más cosas.
-Tenes que hacer algo, no puede hacerte nada-Peter me abrazó y me apoyé sobre él, cerré mis ojos y me perdí en su perfume.
-¿Podes quedarte acá? Conmigo..-dejé mi orgullo de lado, hice como si no me hubiera afectado que se haya ido rápido la noche anterior.
Peter asintió con la cabeza.
-¿Comiste?-quiso saber Peter y lo solté, asentí con la cabeza- sino te cocinaba algo...
-Sí.. Gracias igual-como pude esbocé una pequeña sonrisa.
-Entonces vayamos a dormir.. Siento que lo necesitas-él me agarró de las manos-¿por el pasillo a la derecha, no?
Volví a asentir y lo seguí, me saqué la ropa frente a él, no me importó, total él ya me había visto. Él se sacó la camisa y los pantalones quedándose en ropa interior, me recosté dándole la espalda. Estaba cerrando mis ojos cuando sentí una caricia, estaba acariciándome el pelo.
-No quiero hacerte mal-lo escuché decir en voz baja-pero esta en mi naturaleza..
Él suspiró y se giró para dormirse, cerré mis ojos nuevamente y esta vez me dormí, un poco más tranquila, Peter estaba conmigo.

Peter se encargó de que desayunara, cuando me desperté él estaba nuevamente vestido y me había preparado todo, se estaba manejando por mi cocina como si siempre la hubiese visitado.
-Gracias-le agradecí después de terminar mí café, él se me quedó mirando por un momento-¿qué?
Elevé mis cejas y el suspiro.
-Nada...-Peter empezó a lavar lo que había usado, incluida mi taza-¿tenes que ir a grabar no?
-Sí.. Podes salir por la salida trasera-le sugerí y él asintió con la cabeza.
-Eso voy a hacer-él me besó la frente- cuidate Lali..
Peter me miró por una última vez y se fue, fui hacia mí ropero y elegí la ropa, después me fui a bañar, me arreglé y me vestí.
Agarré mi teléfono celular y cerré la puerta.
Una vez en el auto se me ocurrió revisar las noticias.
"Peter Lanzani y Lali Esposito romance, una fuente lo confirma, ¿le importara a ella su reputación?, tuvieron una cita en casa de ella" y vi una foto tomada en la salida trasera de mi departamento, un fotógrafo había logrado sacarle una captura a Peter.
Cerré mis ojos, solo una persona sabía que Peter estaba en mi departamento, estaba declarándome la guerra, y esta vez yo la iba a ganar.