Capítulo 7

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Cuando salí a grabar a exteriores los paparazzis y reporteros no dejaron de acosarme, por suerte estaban los guardias de seguridad, cuando me metí en una de las camionetas me sorprendí.
-¡Peter!-lo llamé y él me sonrió.
-Estaba grabando cerca de acá y se me ocurrió saludarte-él besó mi mejilla porque estaba el chofer-todavía no me corrieron de mí trabajo, la producción confía en mí
Él se encogió de hombros y me convidó un muffin, negué con la cabeza.
-Gracias igual-le dije y él me tomó de la mano haciendo que la piel se me erizara, me nacieron nervios-¿a donde vamos?
-A donde quieras.. No vamos rumbo a ningún lado, la camioneta solo está dando vueltas en círculos-él me miró y elevó sus cejas-sabes que no podemos ir a muchos lados..
-Lo se, vamos a mi casa entonces-lo invité y él me sonrió. El chofer manejó y esquivo a los paparazzis, o eso creo yo, ya no se que creer.
Llegamos a la puerta de mi departamento y entramos rápido, en el elevadora él no perdió tiempo en acariciarme el pelo. Cerré mis ojos por un momento, relajada y cuando llegamos a mi piso entramos.
-¿Café?-quise saber y él asintió con su cabeza, Peter se sentó en el sillón y se quedó en silencio. Llevé dos tazas y se me cayó una cuando vi que tenía en la mano, las zapatillas blancas.
-¿Y esto?-quizo saber y traté de elaborar algo rápido.
-Es para mi hermano, voy a tener un sobrino-me apresuré a decir, por lo menos eso último no era una mentira- lo pedí por internet y me lo trajeron
Él miró la caja y la tarjeta que decía mí apodo, se encogió de hombros, por suerte no notó mi nerviosismo.
-Te ayudo-él fue a buscar algo para limpiar el suelo-¿tenes algo para levantar la taza?
-Esta al fondo del pasillo, una puerta gris, ahí guardo lo de limpieza-le di indicaciones y a los minutos volvió, él limpió el suelo y me sonrió. Yo seguía tensa, había estado tan cerca de descubrir mi pasado.
-¿Estas bien?-me preguntó y asentí con la cabeza- olvidas que sos muy transparente-él besó mí frente.
-No pasa nada-traté de sonar convincente, era actriz, algo bien tenía que hacer. Él pareció conformarse con mi respuesta y volvió a jugar con mí pelo. Rocé mi nariz con la suya y me lancé a besarlo, me había contenido para no hacerlo en la camioneta. Él mordió mis labios y me reí-no tengo todo el tiempo del día hoy, tengo que leer libretos nuevos y que ir a una fiesta organizada por Eugenia
-La misma fiesta a la que estoy invitado-Peter me miró con diversión- pero tenemos que llegar por separado
-Sí...-solté un suspiro, esto se iba a volver muy molesto, a veces deseaba ser una persona más normal- así que solo tengo una hora, ¿que te gustaría hacer?
-Puedo sugerir muchas cosas pero hay una que en particular...-él solo dijo eso y lo golpee-solo decía
Los despeiné y me lo quedé mirando por un momento, él también se quedó mirándome pero después apartó su vista.
-¿Qué te pasa a vos? Algo te pasa..-quise saber, él se volvió serio.
-Hoy es el día de las preguntas..-soltó algo molesto- solo.. No tuve un buen día, ¿como hago para seguir con mi vida como si nada pasara cuando pasan cosas?
-A todos nos pasan cosas...-traté de animarlo.
-A vos no te pasa lo que me pasa a mí, vos... Tenes la vida perfecta-él se puso de pie porque estaba nervioso y empezó a caminar de un lado a otro, si solo supiera que mi vida no es perfecta, esta lejos de serlo-Lali quiero tantas cosas, pero lo que más quiero ahora es paz
Peter se acercó a mí y me abrazó, me quedó sorprendida.
-Mejor me voy para mi casa.. Necesito pensar y.. Nos vemos a la noche, solo.. Va a ser complicado, nos van a atacar todos los medios-él suspiro-¿nos vemos, sí?
Asentí con la cabeza y él me besó la frente, se desapareció de mi vista y suspiré, agarré las zapatillas blancas que él había dejado en la mesa y las metí en la caja, la llevé hasta un armario y la guardé, cerré mis ojos, y respiré, dolía, todavía dolía mucho.
Me quedé preparándome por el resto de la tarde hasta que se hizo la hora de la fiesta, mi chofer me llevó hasta el departamento de Eugenia y ella me recibió con una sonrisa.
-¡Estas hermosa!-Eugenia me abrazó. Ella traía puesto un vestido de lentejuelas verde, resaltaba sus ojos.
-¿Llegó ya?-pregunté preocupada.
-¿Peter?-ella rió- no.. Estaba con mi hermano, van a venir juntos
-Está bien.. Solo.. Todo es muy raro, la denuncia, que hable la ex novia cuando él me dijo..-iba a terminar pero mi amiga me interrumpió.
-¿Crees en su palabra? En eso de que no tuvo nunca una novia..-me preguntó.
-Quiero creer... Es más voy a creer.. Le dije que le iba a dar una gota de fe-asentí con la cabeza y empecé a sentir calor, en el fondo siempre estaba la duda- voy a creer..-traté de convencerme.
-Si vos lo decís.. Es decisión tuya, eso sí, siempre voy a estar para vos-ella me guiñó el ojo y me abrazó, al cabo de unos minutos se fue en busca de otra amiga que había llegado.
Agarré una copa con champagne y la bebí, cuando estaba por mí tercera copa escuché ruido, Agustín y Peter hacían una entrada triunfal, siempre con estilo el hermano de Eugenia. Peter le dio una mirada a las personas y se detuvo en mí, volteó para después ignorarme, ¿que había sido eso?
Terminé otra copa más y Gastón me detuvo cuando agarré una que estaba en una mesada.
-¿Que anda pasando por acá?-él me sacó la copa de la mano.
-Tuve un día duro... Mejor dicho.. ¡tuve unos días duros! Me lo merezco-recuperé mi copa y bebí-encima Peter me ignora...
-¿No crees que es lo mejor para los dos? Que lo haga.. Si no lo hiciera en este momento se estaría hablando más de ustedes-Gastón me hizo entrar en razón- te esta salvando, no quiere meterte en todo esto
Lo vi a Peter con una chica, ella le susurraba algo en el oído y voltee para no mirar, ¿eso era parte de su plan también?
Peter Lanzani, conquistador de chicas me habían dicho y había leído de eso al respecto.
Gastón llamó mi atención poniéndose enfrente mío.
-Lali es obvio que no es nada
-No tiene porque importarme, no.. No somos nada, no.. No nada-mis palabras decían algo pero mis ojos lanzaban misiles hacia esa chica-mejor bebamos por... Por.. No se porque..
-Te pegó eh-Gastón se burló de mí-brindemos, una más y..
-¡Ahora brindemos!-le pedí y él pidió una copa, chocamos nuestras copas y lo hice tan fuerte que la rompí, todo el vidrio estalló contra el suelo y se dividió en miles de partículas-perdón
Le pedí disculpas a Eugenia que desde la distancia solo se reía.
-¡No pasa nada!-me gritó.
Gastón me trajo un vaso con agua y sentí que me agarraban del brazo, tiraron de mí hasta una habitación.
-¡¿Que haces así?!-Peter quiso saber y elevó sus cejas algo molesto.
-Yo también tengo problemas, no sos el único ser en el planeta tierra-le dejé en claro mientras lo miraba a los ojos- tengo muchos problemas, pero vos hoy me juzgaste y.. ¿Que fue todo lo que vi desde que llegue a la fiesta?
Maldita sea, porque me ponía tan mal el alcohol, que planteo estúpido.
-Lali..-él iba a explicarme algo pero lo descoloqué porque lo besé, él no tardo en abrazarme por la cintura mientras nos besábamos, le puse seguro a la puerta y me besó el cuello, cerré mis ojos y cuando los abrí ya tenía la respiración acelerada, él se encargó de bajar mi vestido y cuando quedé con la ropa interior me sonrió, me dejó besos por todo el cuerpo y después de recostarnos en la cama me acarició el pelo mirándome a los ojos, cerré los míos y él iba quitándome todo, me besó, me besó y le quité su ropa, lo acaricié, lo besé y jugamos a ese juego, descubrí cada parte nueva de él a través de mis manos, mis labios. Él se puso encima mío y me perdí en su mirada, nunca me había pasado algo igual, sentir paz... Sentir paz con solo mirar a alguien.
Él me hizo sentir especial, sentí que me importaba, que sí era distinta para él, pero esa burbuja de felicidad se acabó cuando todo terminó, él empezó a cambiarse y noté como se ponía frío.
-Tenemos que volver-él me miró por última vez y sacó el seguro de la puerta, se fue, y me dejó sola en la cama, me cubrí con la sabana y después me puse de pie, puse de nuevo el seguro y me cambié, suspiré, ¿donde me estaba metiendo?

Salí de la habitación y Gastón me miró cuando agarré nuevamente una copa.
-¡Lali basta!-me regañó-vamos para tú casa, no estas bien..
Le hice caso, sabía en el fondo que él tenía razón, me fui sin saludar a Eugenia y cuando estaba abandonando el edificio la prensa estallo en preguntas y fotos, traté de ponerme en pié pero la realidad es que estaba mareada, la camioneta con mi chofer por suerte llegó y cuando estaba por subirme me tropecé y me caí al suelo, Gastón me ayudó a levantarme y nos subimos, apoyé mi cara en el hombro de él.
-Creo que voy a vomitar..-anuncié y abrieron la ventana. Cerré mis ojos acomodándome nuevamente en el hombro de mi amigo, no se cuanto pasó, cuando abrí mis ojos estaba en la puerta de mi departamento.
-Vamos Lali, te quedaste dormida-él ayudo a que saliera de la camioneta y me llevo hasta mi piso. Me saqué mis tacos y caminando fui hasta la heladera, agarré helado.
-¡Ey! Te sentís mal, no vas a comer ahora-él volvió a guardar ell helado y me mandó hasta la cama, me acosté en ella y me puse a llorar, Gastón se sentó en el borde.
-Todos creen que soy una muñeca a la que no le importan los sentimientos, que soy la persona perfecta, la que no se equivoca.. Yo me equivoqué Gastón, con Peter y...-las lágrimas se me cayeron por el cuello-yo hice algo feo en el pasado, no salió nunca a la luz pero.. No me lo perdono, fui tan estúpida, soy tan estúpida
-No lo sos-Gastón negó con la cabeza- sea lo que hayas hecho perdonate, Lali nadie es perfecto.. Vas a sanar tú pasado, estoy seguro de eso
-Pero no entendes lo que hice, mi vida podría ser otra ahora mismo, yo..-iba a seguir pero Gastón me calló.
-A dormir Lali-él esbozó una pequeña sonrisa algo apenado.
-Quedate-le pedí cuando mi cabeza empezó a darme vueltas- hay una habitación de huéspedes..
-Esta bien-él aceptó y se puso de pie- mañana tenemos que grabar temprano, descansá
Gastón se fue y me quedé sola, otra vez, después de tanto tiempo sentí soledad, el frío se instaló en mí habitación y llevé mi mano a mi panza, cerré los ojos, no le di chance a que creciera, no pensé en nada, fui egoísta, pero el miedo lo superó todo, estúpida, tarada, insensible. Mis lágrimas volvieron a aparecer y lloré, lloré tanto que me cansé, me quedé dormida.

Enredados (Laliter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora