Enredados (Laliter)

Capítulo 25

Cuando recibí el mensaje de Peter lo ignoré hasta la noche.
Llegaron Milan y Ricky, siempre con una energía para arriba, mi esposo estuvo mimando un rato a la princesa de la familia, sonreí frente a esa imagen, mi teléfono volvió a vibrar y lo dejé en mi mesita de luz, claramente no cociné, esta vez pedimos delivery de comida china.
-Cada vez se leer más cosas, y escribir-nos contó Milan entusiasmado y lo vi a Ricky orgulloso.
-¡Vas a podes escribirle cartas a Alle!-le sonreí y él asintió con la cabeza.
-¿Ella las va a entender?-quiso saber y reí.
-Cuando sea más grande las va a entender mejor, pero igualmente vas a poder leérselas-asentí con la cabeza-¿vieron lo bien que cociné?
Ricky levantó sus cejas conteniendo la risa.
-El mismo chiste de todos los días...-me abrazó y me sentí rara, nunca había sentido ganas de apartarme desde que nos habíamos conocido, lo disimulé, otra vez Lali actriz saliendo a la luz, la pude ocultar, pero en algún lugar sigue estando.
Me quedé abrazada a mi Allegra, Milo le hablaba a su hermanita y me morí de ternura, él le besó la frente.
-Se durmió-Milo me miró- me gusta tener otra familia más, ¿siempre vas a estar con nosotros?
Él siendo un nene me hizo esa pregunta y sentí pánico de responderla, no podía garantizar nada, lo único estable que ahora tenía era una cosa: ahora era mamá.
Le sonreí sintiéndome rara, lo abracé.
-Tu hermana es muy afortunada de tenerte-le besé la mejilla.
Él se fue a su habitación dejándome en la mía, Ricky se apareció y me abrazó.
-¿Como estuvo tú día?-quiso saber besándome el cuello, suspiré-¿todo bien?-él me miró ahora serio.
-Sí... Me gusta sacar a Alle a caminar-asentí con la cabeza- tal vez mañana tenga que ir a hacer un trámite más tarde, por la tarde.. Noche.. No se..
-¿Me lo estas diciendo para que me quede con ella? Todo bien-él me sonrió y lo abracé tratando de sentirme segura en sus brazos de nuevo, sentía que me estaba ahogando.
-¿Podemos dormir?-le pedí y él asintió con la cabeza.
Nos recostamos y entraba poca luz por la ventana, me miré la mano, mi anillo de casada, lo acaricié y suspiré, había llegado tan lejos en tan poco tiempo.
Agarré mi teléfono y le respondí... A Peter.

Cuando me desperté los hombres de la casa ya no estaban, me desperté porque Allegra lloraba, le preparé una mamadera y se la di mirándolo, la verdad que era un calco mío, era toda chiquita, le sonreí y ella se quedó mirándome, la cambié y fuimos a caminar, cuando recibí un mensaje me puse nerviosa, miré a mi hija.
-¿Estoy metiéndome donde no debo, cierto?-la miré y ella se rió de mí, la llené de besos y caminamos por una plaza, estábamos ambas tranquilas cuando empezó a sonar mi teléfono.
-Necesito verte ahora-Peter soltó como si nada-Lali necesito hablar, no pude dormir, no pude dejar de pensar en eso
-Asunto tuyo-le respondí cortante, iba a cortar cuando lo escuché, estaba llorando, una parte de mí se..¿sensibilizó? Suspiré-esta bien.. ¿Donde?
Él me pasó la dirección, lo vi en un café apretado de la gente, llevaba capucha, como toda estrella estaba escondido.
-Hola...-me saludó y acuné a mí hija, él se me quedó mirando- estas distinta, estas rubia..
-Pasaron unos años.. No soy la misma-le dejé en claro y suspiré- no se que buscas conmigo, solo quiero dejarte en claro que aunque busques no vas a encontrar nada-elevé mis cejas y él achino sus ojos verdes, me estaba desafiando.
-Lo se.. Puedo percibirlo...-él notó inmediatamente mi anillo, después miró a mi hija que dormía- solo.. Necesitaba hablar que es lo que pasó.. Yo cambié también Lali, deje cosas y hábitos atrás, lo que nos pasó.. Me hizo crecer.. No volví a salir con nadie...
Recordé que fue lo último que hizo y se me formó un nudo en la garganta.
-Mejor me voy..-quise ponerme de pie y él me agarró de la mano, sentí una descarga eléctrica, mierda, creí que eso no iba a pasar nunca más.
Allegra abrió sus ojos y lo miró fijamente a Peter, que se quedó maravillado, él le hizo caras y ella se rió, mi hija era tan simpática.
-Tiene tú energía..-observó- tú simpatía... Y es hermosa..
Eso lo dijo y me sonrió, Allegra estiró su mano para tomar la de Peter.
-¿Puedo?-él preguntó y yo estaba en shock, asentí con la cabeza.
Allegra agarró la mano de Peter y percibí emoción, Peter estaba emocionado, me miró a los ojos después de mirar a mi hija, y supe en lo que estaba pensando: en el hijo que perdimos, el hijo que perdí.
Me sentí horrible nuevamente, iba a ponerme a llorar, acuné a mi hija y me puse de pie, salí de la cafetería y Peter me siguió, me agarró de la mano y se le salió la capucha, y pude verlo bien, él también estaba distinto, estaba rapado, tenía los ojos brillosos.
-Lali te extrañé-supe que estaba siendo sincero, él no me soltó, pero yo sí lo solté.
-Chau Peter-me desaparecí conteniendo las ganas de llorar, cuando llegué a mi casa Allegra estaba con mucha energía, no sabía que hacer con ella, yo quería llorar y ella alegrarme, suspiré, ella había llegado a mi para alegrarme, sobre todo en momentos difíciles, la abracé.

La noche anterior Ricky cocinó, comimos en familia y casi no pude comer, tenía el estómago cerrado, había tenido muchas emociones juntas, lo que más me impresionó fue la conexión de Peter y Allegra, haber percibido la emoción de él, haber podido leer sus pensamientos, su cara, sentí su dolor, mi dolor y eso hizo que sintiera la cicatriz que tenía en mi alma.
Como todas las mañanas fui a caminar con Allegra, esta vez a la costa, le puse un sombrero pequeño y traté de ir por la sombra, estábamos tranquilas cuando escuché un ruido, me volteé y no vi nada, seguí caminando junto a ella y volví a escuchar más ruidos, me volteé y vi una fila larga de paparazzis, negué con la cabeza, mi primer instinto fue cubrir a mi hija, entré en pánico, aceleré mi paso tratando de perderlos de vista, cuando al fin lo hice volví a mi casa, la respiración se me aceleró, Allegra empezó a llorar y traté de calmarla mientras yo misma me calmaba a mí.
-Soy un desastre de madre-lloré abrazándola a ella-no soy la madre que mereces
Ella lloró más fuerte y traté de respirar más tranquila, suspiré y cuando me sentí mejor ella dejó de llorar, besé su frente y al cabo de unos minutos se durmió, la metí en su cuna, me quedé sentada en el borde de mí cama, me metí adentro, como en aquellos días, me sentía abrumada, quería desaparecerme nuevamente de todo, de todos lados.
Ricky llegó y me miró con una cara indescifrable, la sangre se me heló.
Milo estaba con su mamá hoy, éramos solo él y yo.
-Mariana Espósito-él pronunció mi nombre- me casé con Mariana Espósito, no Mariana Riera-suspiró- así que eso me ocultaste por tanto tiempo, ¡Lali podes confiar en mí!
Mis ojos se llenaron de lágrimas.
-Perdón...-no sabía que decir, otra vez tenía un nudo en mi garganta.
-Mis amigos me llamaron, me contaron esto, y me contaron que viste a tú..¿ex?-él tenía sus ojos brillosos-siento que no te conozco, tal vez en verdad es así, no te conozco.. Nunca me contaste mucho de vos, lo respeté porque creí que en algún momento lo harías, ¡Lali te amo! Pero necesito que confíes en mí
Ricky me abrazó cuando me lancé a sus brazos llorando, estaba tan confundida, el aire empezó a faltarme y él quiso contenerme.
-Otra vez se vuelve a repetir...-pude decir y traté de normalizar mi respiración- mi pasado fue una mierda
No dije más, quedé agotada de tanto llorar, Ricky se quedó a mi lado abrazándome, cerré mis ojos y por agotamiento me dormí.

Fui al supermercado a hacer las compras, junto a mi pequeña monita, Allegra miraba todo con detenimiento, yo tenía la mirada perdida, traté de concentrarme en algo tan simple como buscar las cosas de mi lista, cuando conseguí todo y pagué se me acercó una adolescente, me miró y sonrió.
-Lali, ¿puedo sacarme una foto con vos?-me pidió educada, me sentí rara, hace tanto no me pasaba algo así, asentí con la cabeza y sonreí para la foto, aunque lo único que quería era sonreír.
Me subí a mi auto después de poner a Allegra en un carrito en el asiento de atrás, estaba por empezar a manejar cuando aparecieron paparazzis, cerré mis ojos fastidiada y aceleré después de pedirle que se corran, busqué una dirección en el buscador de mi celular, no me importó tener cosas de heladera en el auto, bajé junto a Allegra enfurecida y lo vi, su mirada conectó con la mía.
-Desaparece de Los Angeles-le pedí directa-quiero mi vida de nuevo, me lo debes
-Lali yo estoy grabando acá, no puedo..-él empezó a decir pero no lo deje terminar.
-Si tanto me quisiste.. ¡¿Porque no podes dejarme volar, ser, vivir en paz?!-le pedí suplicante, mis ojos se llenaron de lágrimas y Peter intentó abrazarme, retrocedí.
-No es lugar para hablar..-él suspiró.
-Estoy HARTA de esto, HARTA de que el pasado me persiga siempre-solté y Allegra se puso a llorar- quiero ser feliz por UNA vez Peter, no te estoy pidiendo mucho...
Allegra empezó a llorar más fuerte, Peter me la sacó de mis brazos y la acunó, ella se sintió cómoda con él y lo miró calma, mi furia, mi deseo de seguir gritando se evaporó cuando vi eso, mi hija sintiéndose cómoda con la persona que más quise en la vida, se me puso la piel de gallina.
-Perdón que la agarré pero no podía verla así-él bajó su mirada avergonzado- Lali, no puedo irme... Acepté este trabajo y no puedo irme...-suspiró- igual, si realmente lo necesitas, lo queres.. Lo soñas, lo deseas.. Puedo hacerlo, solo si de verdad lo queres, vos misma me lo dijiste, te lo debo
La voz se le quebró, y eso me quebró también a mi, iba a ponerme a llorar frente a él, no quería, pero eso ocurrió, Peter me abrazó, Allegra estiró sus brazos y puso sus manitos en la cara de él, Peter besó mi frente, suspiré, cerré mis ojos tratando de normalizarme, me separé de él.
-Mejor me voy...-lo saludé con la mano, no esperé a que me respondiera, me subí a mi auto y entrecerré mis ojos, Allegra apoyó sus manos en mi cara, no quería volver a llorar, conteniéndome besé su frente.