Enredados (Laliter)

Capítulo 33

Lloré otra vez, hasta que mis lágrimas cesaron, sentía odio, impotencia, ganas de asesinar, sí, asesinar.
Mi foto y filmación gritando frente a los periodistas salió por todos lados, se difundió y otra vez salió a la luz mi reputación de loca.
Tuve ataques de pánico durante varias noches seguidas, Peter se estaba quedando conmigo, me cuidaba, mimaba, aún cuando sabía que yo no le podía devolver lo mismo que él me daba a mí. Siempre tengo el pensamiento de que en algún momento él se va a cansar de mí, que se va a ir con otra chica sin problemas, pero en vez de eso cada día me demuestra gestos más lindos para conmigo, trata de ser detallista y alegrarme, no me deja sola en ningún momento, ni para bañarme, me baña él y no deja de mirarme a los ojos, no lo hace de manera provocativa, solo lo hace por.. Por amor.
-Hoy hice la cena, no me juzgues-me pidió y elevé mis cejas- hice comida china, un chow mein
-¿Un chau qué?-le pregunté para molestarlo.
-Fideo con verduras salteadas y pollo-resumió y me sonrió, puso el plato en la mesa y comí solo porque él me había cocinado, no tenía apetito.
-Rico, soy sincera creí que no me iba a despertar ningunas ganas de comerlo pero esta bueno-le dije agarrando un poco más con mi cubierto, Peter se me quedó mirando-¿qué?
Suspiró, me acercó a su cuerpo y me abrazó.
-Extraño a la Lali con confianza en si misma, la que comía, la que soñaba con desafiarse en papeles actorales, la que conocí-él soltó y eso me revolvió el estómago-solo quiero verte bien
Me aparté un poco poniéndome mal.
-Yo... Peter no puedo darte todo eso, creí que ya lo sabías, la vida me pasó y dejé de pensar igual, sentir lo mismo...-suspiré yo apartando mi mirada que se había conectado con la de él, me sentía avergonzada.
-Sé que cambiaste, puedo notarlo.. Pero hay algo en tu esencia que hace que yo esté acá con vos, enamorado...-él me dejó en claro-solo me preocupo por vos, quiero que te pasen cosas lindas, ya... Ya pasaste muchas mierdas
-Pasamos mierdas...-le corregí y me dieron ganas de golpear, gritar-¡va a pagar ese imbécil!
Peter me sostuvo porque me puse de pie de la silla y me empezó a doler fuerte la cabeza, me tomé algo bajo su supervisión.
-Ya.. Se me va a ir..-le dije todavía tocándome la frente, había sentido una punzada de dolor, horrible había sido, como una descarga eléctrica.
-¿Vamos a dormir?-Peter sugirió y suspiré, asentí con la cabeza y lo seguí, él me abrazó contra su cuerpo cuando nos cambiamos para estar más relajados.
-Peter enserio quiero matarlo...-solté sin anestesia y él se quedó mirándome.
-Cree que yo también, pero no somos asesinos, él sí lo es-me hizo entrar en razón, me besó la frente- mejor dormimos algo..
-Es que ya no lo soporto más a él, su mentira, descaro, es un psicópata, tengo miedo de que le haga eso a otra persona Peter, tengo miedo de que le haga algo a Allegra...-solté eso y me quebré, Peter me abrazó nuevamente.
-Estamos juntos, ¿podes entenderlo de una vez?-Peter me sacudió para hacerme entrar en razón-nada le va a pasar a Allegra, ni a vos, ni a otra persona más, yo de mi parte estoy pensando algo para que pague..
-La condena nunca va a ser suficiente-yo seguía con la voz quebrada, era obvio que estaba recordando el pasado que quise dejar atrás- lo sabes..
-Lo se.. Pero es lo único que podemos hacer-Peter me besó la frente pausadamente, había sido un acto sumamente dulce-intentá descansar Lali-me pidió suplicante y quise darle el gusto, así que cerré mis ojos, pero no dormí nada.

Cuando desperté tenía mala cara, Peter se dio cuenta y me mandó nuevamente a dormir, se recostó a mi lado hasta que se hizo algo más tarde.
-Tengo que irme a grabar...-me miró apenado- te quedas con Stephanie-él me besó en los labios y una pequeña sonrisa se asomó sobre mis labios, a pesar de todos los problemas que tenía en la cabeza estábamos en una etapa extraña pero de luna de miel, demostrándonos todo el tiempo cariño.
Stephanie era la enfermera psiquiátrica que me cuidaba cuando Peter se iba, a veces venía Ricky a cuidarme, pero trataba de evitarme, cuando venía lo hacía con las dos personas que más amaba, mi Allegra y mi Milan, él era prácticamente mi hijo, su mamá se desapareció al divorciarse de Ricky.
Me puse a pintar en el jardín cuando sonó el timbre, me alteré porque estaba compenetrada pintando, abstraída de la realidad, Stephanie fue a atender, cuando voltee lo vi después de tanto.
-¡Gastón!-lo abracé emocionada- no pudiste venir en año nuevo, creí que no me querías ver porque me desaparecí...
-Nunca no quiero verte chiquita-él me abrazó nuevamente levantándome del suelo- te extrañé
Gastón se puso emocional y por poco lloro con él, yo estaba teniendo días muy sensibles, raro en esta nueva Lali.
-Te traje algo...-él me dijo animado para alegrarme- me dio un pequeño ramito de flores-Peter no se va a poner celoso por esto, ¿no?
Negué con la cabeza.
-Me enteré por Eugenia que estás saliendo con alguien, me alegro mucho-volví a abrazarlo, lo había extrañado tanto, ¿porque al intentar dejar mi vieja vida atrás también quise borrar a Gastón y Eugenia?
-Sí, ya voy a presentarte a mi novio, pero esta vez esta tarde es para los dos-elevó sus cejas mirándome con picardía-¿estabas pintando?
Asentí con la cabeza.
-Podemos pintar...-le sugerí y él me sonrió, Gastón estaba impecable, todo bien vestido y él empezó, me tiró pintura encima, yo no me quedé atrás y empezó una guerra infantil, algo tan simple como jugar me hizo sonreír, reír, volver a esos tiempos en los que nos divertíamos con tan poco.
Sonó el timbre y la vi a Eugenia con Milan y Allegra de la mano, mi bebita, ya más niña me abrazó las piernas y la cargué, Milan también se alegró de verme.
-Llegué de NYC y pasé por tus chicos-Eugenia me abrazó a pesar de estar llena de pintura-como se nota que te quiero..-se limpió la ropa, se había ensuciado. Ella saludó con la mano a Gastón que estaba más sucio que yo.
-Podes bañarte y agarrar ropa-le dije a Gastón, él se rió.
-¿No queres que ensucie nada, no?-él me molestó.
-Estás en lo correcto-le dije y él se desapareció después de preguntarme donde estaba el baño.
-Vos también necesitas un baño-Eugenia se rió de mí- seguís en la lista después de Gastón
Admiraba tanto el buen humor de los dos, sobre todo que quisieran visitarme.
Stephanie se fue para dejarnos más solos.
-¿Como estas?-quiso saber Eugenia cuando los chicos salieron al patio y la miré a los ojos-algo estas pensando..
-Tengo tantos pensamientos oscuros últimamente...-me sinceré, no le podía ocultar mi verdad a ella- quiero que se muera Chinita
-Lali, La..-ella me llamó- eso no va a traer de nuevo a.. -no siguió, se entendió, ella no quería meterse en ese terreno delicado para mí, se me formó un nudo en la garganta.
-Quiero que se muera, y si tengo que matarlo yo lo voy a hacer-le dije con la voz entrecortada- me cansé, estoy más allá del bien y del mal, no sabes lo que es vivir siendo yo
-Lali despejá esos pensamientos-me pidió Eugenia.
Eugenia me miró con seriedad y justo nos vio Gastón, entró a la sala animado y nos sonrió,
-¿Que me perdí?-quiso saber y me dieron arcadas-¡Lali!
Ambos gritaron mi apodo, quería vomitar pero no podía, me daba tanto asco pensar en Mariano Martinez.
-Quiero matarlo-les dije convencida- no se como pero.. Quiero matarlo