𝑻𝒂𝒓𝒅𝒆 𝒐 𝑻𝒆𝒎𝒑𝒓𝒂𝒏𝒐 (𝑹𝒐𝒔𝒆𝒌𝒐𝒐𝒌)

★ꫀ᥊𝕥𝕣ꪖ★

⚠️Narración: Omnisciente⚠️

Hyun Su🍼🐶

Los estrechos asientos de la sala de espera del hospital empezaban a asfixiarle las caderas.

Jungkook comenzaba a sentir que la muñeca se le tornaba violeta de tanto que Rose la apretaba. Intentó resistirse para no molestarla, pero luego la rubia se había dado cuenta de que el azabache no paraba de hacer muecas extrañas.

Rose: Y ahora... ¿qué te picó?.- Preguntó sonriendo divertida ante las graciosas muecas que ponía.

Jungkook: Vas a dejarme sin brazo.- Respondió en un hilo de voz, con ojos casi vidriosos por el dolor.-

Rose lo notó y rápidamente soltó la muñeca de su novio.

Estaba nerviosa, se le notaba a kilómetros, y Jungkook se sintió algo culpable por no haber aguantado un poco más. Él podría quedarse sin un brazo, pero no podría ver a Rose de esa manera.

Los piesitos de Rose daban diminutas pisadas con la misma frecuencia una y otra vez. Dentro de unos minutos la llamarían para hacer la ecografía de su bebé, y nada podría ponerla más nerviosa que aquello.

Durante varias semanas, Rose había tratado de comer lo más saludable que podía y a intentar resistir de manera casi inhumana todas las náuseas y malestares que le provocaba.

Pero hace unos días, se encontraba practicando yoga con la humilde intención de calmar los aires y llenar el ambiente que rodeaba a su bebé de tranquilidad. De repente un mal movimiento logró que Rose cayera y se lastimara el tobillo, aquello no era para tanto ya que su panza no estuvo ni cerca de impactar contra el suelo.

Pero Rose y Jungkook eran demasiado exagerados y preocupados cuando de la salud de su bebé se trataba; parecían dos niños ansiosos en la fila de un supermercado esperando a que su mamá volviera a la caja registradora para pagar las compras.

Jungkook notó la perdida mirada de su novia y no dudó ni por un segundo en tomar su mano y resguardarla entre las suyas. Besó dulcemente el dorso de esta y recibió una sonrisa angelical a modo de respuesta.

Rose era la mamá primeriza más tierna y hermosa de todas, pensó él.

Jungkook: Amor, tranquila... Todo estará bien. De seguro ese pequeño niño está montando una fiesta allí adentro.- Sonrió y tomó la diminuta cintura de Rose para luego cargarla y colocarla sobre su regazo.-

Rose infló sus mofletes y frunció el ceño.

Rose: ¿Cómo estás tan seguro de que es un niño?.-Cuestionó la rubia perdida.-

Jungkook: No lo sé... Pero espero que lo sea.-Sonrió dejando que sus alegres hoyuelos salten hacia sus mejillas, embobando a la rubia.-

Rose: ¿Osea que si no es un niño no vas a quererla? ¿Si es niña me vas a dejar? ¿Ya no me quieres? ¿Es eso?.- Rose frunció los labios y se cruzó de brazos, formando un triste puchero de niña pequeña.-

Las hormonas... Las hormonas...

Jungkook negó sonriendo.

Jungkook: Primero que nada, estoy aquí porque te amo y no me cansaré de repetírtelo todos los días si es necesario; no me iré a ningún lado.-Rose sonrió tímida.- Segundo... Por supuesto que la voy a querer. Imagínate una preciosa niña con tus ojitos y tu naricita... ¿Cómo no querría a una cosita así?.- El azabache rió como un bebé con tan solo imaginárselo.-

Rose se lanzó a su novio y lo abrazó por el cuello. Jungkook se embriagó con el aroma que desprendía el dulce perfume de vainilla de la rubia y acarició su espalda con pequeños círculos suaves.