CAPÍTULO VEINTITRÉS| VÚDÚ
ABRÍ LOS OJOS CUANDO el sol golpeó mi rostro, estiré mis brazos con pesadez y mire hacia mi alrededor solo para confirmar que todo era real. Un estado, como cualquier otro pero aún así seguía siendo diferente, aquí había historia.Baje del bus, y empecé a caminar por la banqueta, el sol estaba tenue, opacado por las nubes y además estaba helando, me puse mis gafas de sol y camine hasta lo que parecía ser una tienda pequeña para turistas. Una vez adentro compre un mapa de la ciudad y una botella de agua, cheque un reloj que colgaba por encima de la puerta principal y este marcaba las ocho de la mañana.
Volví a salir hacia la calle y camine hasta un pequeño parque, me senté debajo de un árbol, sentada me puse a pensar, sintiendo el frío de la nieve en mis piernas y a lo lejos podía oír como un artista callejero tocaba un saxofón. Fije mi mirada en el mapa, según parecía estaba bastante lejos de el objetivo, aún así decidí quedarme un poco más de tiempo sentada en la sombra.
Si bien yo no era supersticiosa, más bien la razón de estar aquí era conseguir ayuda, de cualquier tipo y si era posible también volver a Suecia a como diese lugar. Pero todo eso no quitaba el hecho de mi gran fascinación a este gran lugar, magia, historias y leyendas que eran el pan de cada día de los habitantes.
Me levante del césped cubierto de nieve sacudiendo mi pantalón, habían personas caminando por las calles pero no demasiadas, era un estado un poco pequeño lo cual me facilitaba las cosas un poco.
Iba siguiendo las indicaciones del mapa, si hubiera estado aquí en otra situación hubiera tomado un tour turístico para apreciar mejor el lugar y escuchar las historias a detalle pero bueno, en otra ocasión será.
Después de quien sabe cuánto tiempo por qué no tenía reloj pude dar con el objetivo.
1140 Royal Street.
Una mansión de tres pisos del siglo XIX en donde había vivido la infame Delphine Lalaurie, la mujer socialite que mato y torturo a más de sesenta esclavos afroamericanos en los 1800, la mujer de cara cara bonita pero una maldad inmensa, una de las mujeres más sádicas de toda la historia de los Estados Unidos, de tan solo imaginar todas las atrocidades cometidas en esa casa se me ponían los vellos de punta.
Anteriormente había pertenecido a un empresario pero actualmente funcionaba como una mansión común y corriente, pero si algo había aprendido era a no fiarme de las apariencias pues además de ser una de la casa que albergaba un trágica y sangrienta historia allí también residían mujeres practicantes del vúdú, se podría decir que era algo más o menos parecido a un aquelarre solo que no de ocultismo como tal.
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𝐈𝐍𝐍𝐎𝐂𝐄𝐍𝐓, damian wayne
FanfictionAudrey no es muy bonita, interesante o inteligente. En realidad podría decirse que es una joven bastante común y aburrida lo cual nunca le causó ningún tipo de problema. Pero detrás de toda esa fachada de tranquilad hay una maraña de problemas que...