Always-Nuevo inició.

~GRAN COMEDOR~

Los carruajes atravesaron las verjas y avanzaron por el ancho camino... después de unos minutos se detuvieron ante la gran puerta principal de roble.
Entonces Harry, Neville, Seamus y Dean saltaron del carruaje y subieron la escalinata a toda prisa, hasta hallarse en el interior del vestíbulo
alumbrado con antorchas.

Los alumnos tuvieron que soportar además del frío y la humedad, la pesada broma de Peeves el poltergeist, el cual parecía no querer terminar de fastidiar hasta que la profesora McGonagall lo interrumpió y le exigió que se retirara.

—¡Bueno, vamos! —ordenó bruscamente la profesora McGonagall después de que Peeves se retiró—. ¡Vamos, al Gran Comedor!

Los alumnos cruzaron el vestíbulo entre resbalones y atravesaron la puerta doble de la derecha, al ingresar se percataron de que el ambiente era mucho más cálido que en el vestíbulo.

Las cuatro largas mesas pertenecientes a las casas estaban abarrotadas de alumnos. Al fondo del comedor, los profesores se hallaban sentados a lo largo de uno de los lados de la quinta mesa, de cara a sus alumnos.
Harry ignorando todo tipo de miradas y murmuros,  paso por delante de los estudiantes de Slytherin, de Ravenclaw,  Hufflepuff, y se sentó con los de su casa.

Seguía tiritando por el frío que no se dio cuenta que Nick lo miraba satisfecho.
—Buenas noches—le dijo con una sonrisa.

—¡Nick! Hola. ¿Que cuentas?—contestó Harry escurriendo una parte de su capa—. Espero que se den prisa con la Ceremonia de Selección.

Los minutos trascurrieron, Colin Creevey le pidió a Harry un poco de su suerte para la selección de su hermano, los alumnos de primero ingresaron junto con la profesora
McGonagall, la expectativa por el nuevo profesor de Defensa creció mas, Harry también estaba curioso por quien seria, pues los últimos no habían dado la talla, a excepción claro del profesor Lupin y luego de una espera el azabache por primera vez, logró por fin presenciar la selección de otros.

Cuando la selección termino el profesor Dumbledore se puso de pie y sonrió a todos los alumnos.
—Tengo sólo dos palabras que deciros —dijo, y su profunda voz resonó en el Gran Comedor—: ¡A comer!

Todos obedecieron, las fuentes vacías de repente aparecieron llenas.

Cuando los alumnos terminaron los restos del plato principal se desvanecieron y fueron reemplazados, en un
abrir y cerrar de ojos, por los postres.
De igual modo, una vez terminados los postres los últimos restos desaparecieron de los platos, dejándolos completamente limpios, entonces Albus Dumbledore volvió a levantarse e informo que la lista de objetos prohibidos en el castillo estaba en aumento, también de que el bosque que está dentro de los
terrenos del castillo es una zona prohibida, al igual que el pueblo de Hogsmeade para todos los alumnos de primero y de segundo. Pero la verdadera información chocante fue cuando dijo que la Copa de quidditch no se celebrará ese curso.
Cuando estuvo por aclarar el motivo, las puertas del Gran Comedor se abrieron de golpe.
En ella un hombre se apoyaba en un largo bastón y se cubría con una capa negra de viaje.

Cuando el extraño mago se bajó la capucha, Harry quedó algo perturbado por su imagen; su rostro estaba repleto de miles de cicatrices, la boca era como un tajo en diagonal, y le faltaba un buen trozo de la nariz, además de eso poseía un ojo eléctrico, el cual se movía sin cesar.

El extraño llegó hasta Dumbledore. Le tendió una mano tan toscamente  y Dumbledore la estrechó, después tomo el asiento vacío que había a su derecha.

Harry ya se estaba planeando muchas preguntas sobre el.
Tal vez incluso le comentaría a Sirius después.

—Os presento a nuestro nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras —dijo animadamente Dumbledore, ante el silencio de la sala—: el
profesor Moody.

Harry abrió los ojos de par en par. Ahora estaba fascinado. Se notaba que el sabia de defensa contra las artes oscura... Pero de igual manera iba a comentarle a Sirius. 

Dumbledore volvió a aclararse la garganta.
—Como iba diciendo —siguió, sonriendo a los  estudiantes—, tenemos el honor de ser la sede de un emocionante evento que tendrá lugar
durante los próximos meses, un evento que no se celebraba desde hacía más de un siglo. Es un gran placer para mí informaros de que este curso tendrá lugar en Hogwarts el Torneo de los tres magos.

“Ahí esta”... No pudo evitar pensar Harry... “Es por eso motivo que no se celebrara la copa de quiddicth, por un torneo... ¿Y eso que tiene? Mas importante es la copa... Porque... No negare que deseo ganarle a Draco”

Se perdió en sus pensamientos que cuando volvió a prestar atención Dumbedore había estado queriendo contar un chiste, pero lastimosamente fue interrumpido y tuvo que seguir con su explicación del torneo, además del motivo por el cual antes ya no se celebraba. 

Mientras más escuchaba Harry, más se llegaba a interesar por el torneo. Pero su ilusión y la de los demás alumnos se vio pinchada cuando Dumbledore volvió a hablar y les informo que  solo los estudiantes de diecisiete años o más
podrán proponerse a consideración.

•~•

Después de que el director termino de hablar, los alumnos se dirigieron a sus salas comunes. Harry se mantuvo apartado de sus compañeros todo el camino hacia la torre de Gryffindor. Logro ingresar a la sala común, después de Seamus e ignoro de la mejor manera a Ron y los demás Weasley. En ese momento era fácil, tenía ganas de conversar con Sirius, subió hacia el dormitorio, solo Neville se encontraba ahí con la pijama puesta, saco de su baúl su pijama e ingreso al baño. Cerro la puerta y rápido saco de su bolsillo el espejo que su padrino le había obsequiado.

—Sirius—llamo mirando su reflejo—. ¿Estas ahí?... Sirius.

“Dime”el rostro de su padrino apareció en el pedazo del espejo“¿Sucedió algo?”

—Esta cosa es muy rara.

“Si.. Te acostumbradas”

—Escucha. Hay un nuevo profesor de defensa. Se llama Moody. O algo así..

“¿Ojo loco moody”le pregunto con un brillo especial en los ojos

—Si... Supongo. Tiene un ojo que se mueve raro.

“Es un ex auror, Harry. Perteneció a la orden del fénix, fue muy cercano a los miembros... Bueno a casi todos. Tu madre le tenia algo de recelo. Decía que era muy... Moody”

—¿Que le paso en el rostro?—le pregunto curioso

“Muchas cosas. Es por ese motivo que dejo de ser auror. Incluso cree que su sombra es un mortifago.”

—Ah...

“El es muy confiable, Harry. Te recomiendo que si no puedes conversar con Dumbledore, lo hagas con el. Te ayudara... Pero puede ser duro.”

—¿Duro?

“Es brusco con sus palabras. Pero aprenderás muchas cosas de el. Ahora tengo que irme Harry, creo que deje algo encendido en la cocina. Huele a quemado... Cualquier cosa. Sabes que puedes usar el espejo en cualquier momento”

—De acuerdo—le dijo con una sonrisa. El rostro de su padrino le devolvió la sonrisa y desapareció. Quedando solo el reflejo de un adolescente.