Tú Y Yo: Complicado

CAPÍTULO 70 (Final)

Macarena termina de cerrar su maleta, casi sentándose sobre ella para hacer que el cierre pase por completo. Es su último día en la Isla, está lista para regresar a Mission Creek y orientar su futuro, un futuro hacia la universidad.

—No puedo creer que sea tu último día aquí—Bree hace un puchero—. ¡Voy a extrañarte tanto!—la abrazó por los hombros.

—Prometo venir de visita algún día—acarició el flequillo de su amiga.

—No me dejes sola, te lo suplico—aquello provocó que Melanie hiciera un puchero.

—Mi hermana se va a quedar aquí, está demasiado colada por tu hermano como para dejarlo escapar ahora—las chicas ríen.

En otra punta de la academia estaban los chicos, en un debate que por poco los iba a llevar a las manos.

—A ver, ser más inteligente de la tierra—Marcus llama la atención de Chase—. ¡Mi hermana se va hoy!—exclama exasperado—. ¡¿Quieres dejar de lloriquear e ir tras ella?!

—¡¿Para qué voy a ir tras ella?!—Chase casi grita en respuesta—. ¡¿Para que me lance su maleta a la cara?!

Marcus bufa, ni siquiera puede creer que el chico que lleva todo un año hablando de lo mucho que se arrepentía de los errores que había cometido con Macarena. No había un solo segundo en el que no dijera algo referente al tema.

—Por lo menos para que sepa que sigue importándote, pedazo de...—el Wilson se contiene de decir una grosería.

Maca camina alrededor de la empresa después de haber dejado su maleta cerca de la entrada del tren que va a llevarla de regreso a Mission Creek. Sin duda va a extrañar el lugar que la vio crecer como persona, gracias a aquella isla es quien es hoy día. No hay nadie dentro, todos están en el patio exterior, es día libre, algunos de los estudiantes que quedan (que ya son pocos) practican y otros se entretienen. Los chicos están sentados cerca de la piscina, ríen mientras cuentan anécdotas del curso que está a punto de terminar en la academia.

—¿Dónde está Chase?—Bree pregunta de pronto.

Chase no puede evitar sentir que su corazón se aprieta cuando localiza la maleta de Maca junto al andén. Esta es su última oportunidad. Ha pensado muchas palabras desde que ella anunció que se marcharía a estudiar fuera, pero todas parecen haberse esfumado solo con ver aquella bolsa frente a él.

Macarena traga duro al ver a Chase mirando hacia su equipaje. Se había prometido que enterraría sus sentimientos en lo más profundo para jamás volver a estar atraída por él, pero... eso era engañarse a sí misma. El chico había sido su amor de la adolescencia, había sido la primera persona que se había fijado en ella de una manera... especial.

—¿Ya te vas?—pregunta él sacándola de sus pensamientos. Ella tiene un nudo en la garganta.

—Sí...—responde.

—Es definitivo.

—¿A dónde quieres llegar?—se arrepiente enseguida de hablar, su voz tiembla. Chase se mantiene en silencio, no sabe por dónde empezar.

—Quería pedirte que te quedaras...

—No lo intentes—lo interrumpe—. No intentes convencerme de que estaré mejor aquí que buscando mi propio futuro. No. Lo único que me ataba aquí era el entrenamiento y ya se acabó. Mis hermanos son felices aquí, pero yo no.

—Macarena...

—No puedo quedarme sabiendo que tendría que ver todos los días a la persona que me ha hecho más daño e ignorar mis sentimientos para evitar salir lastimada de nuevo. No puedo, Chase. Busca otra chica, yo me cansé.

El silencio se instala de nuevo. Ambos se miran y miles de recuerdos los abrazan. El primer beso, la primera cita, un abrazo, una noche juntos... Maca cierra los ojos un momento, esperando que cuando los abra, él ya no esté. Pero no pasa, se ha acercado y la tiene a su alcance, ella retrocede un paso, necesita distancia.

—Te he perdido para siempre...—Chase quería que aquello sonara como una pregunta y ha terminado siendo una afirmación—. Pero necesito que lo sepas una última vez.

Él agarra su mano y la lleva hacia su pecho, donde su corazón late, despacio, pero un poco más rápido que de costumbre. Ella levanta la mirada de su pecho, quiere apartarse, pero él está ejerciendo presión para evitarlo.

—Chase, no lo hagas más difícil...

—Siéntelo...—su mandíbula está tensa porque está intentando controlar sus sollozos—. Es como la primera vez, cuando te pedí que fueras mi novia... Como cada vez que te veía llegar...

—Basta...—ella ya está llorando.

—Quisiera poder mirar atrás y cambiarlo todo... Hacer hasta lo imposible para que siguieras a mi lado...

—No sigas...—se sentía débil.

—Y lo único que nos queda ahora es separarnos y esperar que algún día podamos reencontrarnos y no queden cenizas. Me duele que tengas que irte—finalmente, Chase libera su mano.

—Tengo que olvidarte... Me hace daño el solo pensar en lo nuestro...—solloza ella—. Adios, Chase.

Maca toma una bocanada de aire mientras recoge su maleta y activa la puerta del andén para entrar al tren y se acomoda en el asiento. Chase se vuelve para mirarla una última vez. Las puertas se cierran lentamente y la primera lágrima cae por su mejilla. El tren comienza a moverse, el ruido exterior acallando los sollozos de Maca. Es el fin de todo...

Tiempo después...

—Y finalmente... Macarena Wilson, graduada de la licenciatura de biotecnología con honores—el rector anuncia y los aplausos estallan mientras ella sube las escaleras hacia el palco para recoger su diploma—. Enhorabuena, joven Wilson—la felicita—. Ha sido la mejor de su promoción.

Se acerca al micrófono, lista para dar un discurso de agradecimiento a la escuela que le ha brindado una oportunidad después de dejar atrás su pasado. No ha vuelto a hablar con nadie de la Isla, salvo con sus hermanos, y las pocas noticias que obtuvo fue gracias al telediario.

El resto de miembros de la promoción suben al escenario, ella está en el centro y todos lanzan sus birretes al aire en señal de que por fin son graduados, Jackson tira de ella hacia atrás para besarla disimuladamente, ocultos de la cámara que toma la fotografía final.

Bajan juntos del estrado y los hermanos de ella se les lanzan encima para felicitarlos. Sus padres están allí también, pero ella se siente tensa al ir y saludarlos, ha sido mucho tiempo sin verse.

—Estamos muy orgullosos de ti, hija—Venus toma sus manos dándole una sonrisa materna, haciendo que ella se sienta un poco más tranquila.

Alguien entra al enorme salón, desconcertado por el ruido intenso de los aplausos y las felicitaciones. Mira alrededor en busca de una persona.

Sus ojos se encuentran por un segundo, ella lo ve, está cambiado, igual que ella.

—Chase...

N/A:

Creo que este final es un poco... ¿malo? Tal vez. Pero no preocuparse que vamos a cerrar el ciclo con el epílogo.

Me gustaría saber vuestras opiniones sobre el final, sobre la historia en general, sobre cosas que querríais que hubieran pasado, sobre cómo creéis que será el epílogo... Lo que queráis.

Se despide,

KMF