Prólogo

19K 1.2K 61
                                    

5 años antes.

Observé al hombre dentro del edificio unos segundos pensando que nunca quería volver a tenerlo tan cerca.

Aún me costaba procesar las palabras de mi padre. Unas que me negaba a creer, que egoístamente, lo sabía, quería que se tragara de regreso.

Cómo era posible que la vida de mi padre, sus años de trabajo y esfuerzo no hubieran servido de nada, que todo hubiera desaparecido, perdido.

No podía creer que se había equivocado, que por confiar en quien no debía perdió todo. Y peor aún, no podía creer que ese hombre de cabello negro y ojos de un color verde claro y brillante, era a quien le debía casi el alma.

Pero había algo peor, y es que lo conocía, claro, él no a mí. Pero yo lo había visto en la televisión, en revistas, diarios, lo había seguido como si fuera una celebridad, y peor aún, me había gustado hasta el día de ayer.

Él había sido mi amor platónico. Hice una mueca, y aún lo era.

Como lo vi salir del restaurante y caminar hacia el automóvil que estaba justo detrás de mí, miré alrededor un segundo antes de examinarlo a él, quien se veía bastante joven para ser empresario.

Me moví junto con mi bicicleta y acomodé mi mochila en mi espalda mientras lo examinaba. Monté mi vehículo y afirmé mi falda de colegio entre mis piernas para que no se separara y levantara. Justo en ese momento él me observó. Se detuvo antes de subir a su elegante y caro vehículo y alzó una ceja.

Sonreí como si nada.

, pensé, por tu culpa mi familia está en la ruina.

Y sin meditarlo me lancé con mi bicicleta hacia él con fuerza. Satisfecha lo vi pegarse de un salto a la puerta trasera de su auto. Cuando me giré un segundo para verlo me gritó.

—¡Idiota!

Le saqué la lengua y respondí:

—¡Estúpido!

Con eso me fui rápidamente deseando jamás volver a encontrarme con él.

Solo Son NegociosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora