Doll(y)

Capítulo 17

—¿Sabes, Timmy?— Dolly preguntaba de forma retorica y con un tono cargado de emoción. —Es la primera vez que he cocinado yo solo. Hasta ahora papá solo me dejaba quedarme a su lado mientras preparaba la comida. Creo que tiene miedo de que me lastime.— Soltó una risita —Seguro que se sentirá muy orgulloso de mí— En ese momento su amigo pudo apreciar el brillo en los ojos de Dolly.

Timmy no pudo aguantar más, se quedó quieto, haciendo que su amiga también se detuviera al estar ambos tomados de la mano. —¿Que ocurre?—

Sabía que debía ser rápido, le diría la verdad a Dolly y correría a donde fuese, no iba a mirar atrás. No iba a permitir que llevase encima la pesada carga de haber asesinado a su padre. No permitiría que su familia hiciera llorar a Dolly, que viviese con la culpa, pues no importa si el verdadero culpable era su hermano, ella se seguiría pensando que fue su culpa. —¡La sopa está envenenada!—

—¡¿Que?!— Preguntó horrorizado.

—¡No le hagas caso!— Irrumpió Dennis.

—¡Es cierto! ¡Quieren matar a tu padre! ¡No le des sopa!— Reafirmó Timmy.

—No... No es posible... Si... Si lo preparé yo...— Negaba en voz baja mientras soltaba la mano del otro chico.

—¡Dennis puso veneno en las especias!— Y justo luego de decir aquello, se auto abofeteó, aunque aquella mano era manejada por su padre.
—¡Por tú culpa, ahora vamos a morir todos!— Gritó el adulto.

—No debe ir hasta el señor Gluskin— Comentó el abuelo, cuando vio a Dolly correr. —Hay que hacerla callar.— Mientras daba la orden, ya iban corriendo tras Dolly.

—¡Papa! ¡Papá, salvame!— Gritaba asustado mientras huía de aquella familia.
Quiso meterse por un conducto de ventilación, pero le estaban alcanzando, y no le daría tiempo entrar en uno.

—¡¿Dolly?!— Escuchó a Eddie en la lejanía. —¡¿Que está pasando?!

—¡Papá!— Miró hacia atrás y pudo ver cómo Dennis estaba apunto de agarrar su brazo. Por suerte pudo esquivarlo, y abrió veloz la puerta que se encontraba cerca e intentó cerrarla una vez entró a la oscura habitación. Pero antes de poder lograr dar un portazo, Dennis agarró con una mano la puerta, y con la otra el marco de esta.

No hubo opción a un forcejeo, pues la diferencia de fuerzas era considerable. Es por ello que Dolly terminó cayendo al suelo. Pudo contemplar con horror como el otro hombre lo miraba, sabía que está vez no era un juego, quería lastimarlo. No supo si era Dennis, Su padre, su abuelo, o todos ellos. Aunque en su corazón rogaba que entre ellos no se encontrase Timmy.

—¡Puta! ¡¿Que le haces a mi hija?!— Escuchaba fuera de la habitación, y con esto hizo temer a su agresor, quien por instinto giró la cara en dirección a dónde provenía aquellos gritos. Oportunidad que utilizó Dolly para levantarse.

—¡¡Papá!!— Gritó, alarmando de vuelta al hombre que tenía en frente, quien intentó atraparle, pero este corrió en dirección a la ventana que permanecía abierta y saltó.

—¡No!— Gritó el padre, ya que quería usarla de rehén ahora que todos los planes estaban frustrados y con Eddie apunto de atraparlo. Así que en cuanto vio a Eddie entrar, tomó la decisión de saltar por la ventana al igual que hizo la menor.

Eddie se asomó por la ventana y contempló con horror como su hija se encontraba tirada en el suelo, con sangre que surcaba desde su cabeza.

—¡¡¡Dolly!!!—