—Ya está atardeciendo y seguimos sin saber de Ámbar desde hace 5 días. —Se quejó un Croconaw con el resto de Pokémon que le hacían compañía dentro una pequeña casa rodante estacionada cerca de una central eléctrica abandonada a unos cuantos kilómetros de ciudad Molayne horas antes del atardecer de ese mismo día—. ¡El concierto es en tres días y esta niña siempre se la está dando de diva! ¡Si no llega a tiempo para las prácticas les juro que yo mismo la mato!
Cinco eran los Pokémon que se encontraban dentro de la casa rodante en ese momento, todos pertenecientes al famoso grupo de rock del momento llamado "Los protestantes de Giratina" ensayando para dar su próximo concierto en ciudad Molayne programado para la noche del sábado 22 de Octubre durante el cierre del festival de La Fundidora, una de las fiestas más importantes celebradas en el reino de Plata.
Un Krokorok en la guitarra eléctrica, un Croconaw en el bajo, un Barbaracle en la batería, un Drifblim en el teclado, y finalmente un Toxtricity forma grave como vocalista y líder de la banda eran los integrantes que conformaban al grupo original, y buscaban presentar de manera oficial a Ámbar Braixen como su nueva segunda voz durante el festival.
—¡Ya deja de llorar por ella! —Le respondió Krokorok fastidiado de escucharle decir lo mismo durante ya varios días—. ¡Ya sabemos que lo que buscas es una excusa para sacarla del grupo porque desde que se unió la gente te ignora aún más! —Expresó de manera fría y rápida—. Deberías enfocarte más en ensayar y menos en cuestionar todo lo que hace Ámbar o lo que decide Duo.
—¡Mira niño bonito a mi no me vas a decir qué hacer! —Exclamó más que molesto por el golpe bajo—. ¡Si hay alguien aquí cuyos sentimientos le impiden tocar bien eres tú! —Le señaló con la mano derecha mientras sostenía su instrumento con la izquierda—. ¡¿Por qué no sales y afinas tu guitarra afuera en lugar de encerrarte en tu habitación a besar la foto de Duo que ocultas bajo la almohada?!
Sonrojado por esas palabras el cocodrilo de tierra trató de defenderse con excusas baratas, luchando por mantener en secreto algo que ya todos sabían desde hace meses sobre él, pero que aún se negaba a aceptar repitiendo que sólo se trataba de un malentendido hasta que todos le siguieran la corriente antes de volver a la normalidad.
—¡Silencio ustedes dos! —Los mandó callar Duo desde la pequeña mesa plegable que tenían sentado en compañía de Barbaracle, donde esperaba por la llamada de Ámbar sosteniendo un pequeño dispositivo electrónico conectado a una bola de cristal también ubicada sobre la mesa. Un aparato del que sólo unos pocos conocían de su existencia para ese momento—. Si Ámbar no está aquí tiene que ser porque algo grande le ha ocurrido. —La justificó observando la gran flauta que descansaba de pie sobre una de sus paredes—. ¡Yo también quisiera saber sobre ella lo antes posible y acudir a su rescate si es necesario! —Expresó con un poco de miedo siendo que conocía bien el destino que le aguardaba—. ¡Cualquier cosa sería mejor que estar perdiendo el tiempo en este basurero escuchandolos pelear toda la tarde todos los días! —Azotó la mano sobre la mesa haciendo que esta se tambalease y la esfera arriba de ella rodara hacia el suelo. Los cuatro Pokémon fijaron su mirada en ella temiendo que le hubiera pasado algo.
—Parece que no le ha pasado nada... —La recogió Barbaracle del suelo con cuidado—. Es decir, ni siquiera sabíamos si funcionaba en primer lugar. —Dejó salir lo que realmente pensaba de Ámbar aprovechando que Duo finalmente se había metido en la discusión de los dos lagartos—. Capaz y esta niña nos ha engañado con un cacharro inútil para tenernos esperando aquí como tontos. Creer en ella fue una tontería desde el principio.
—¡No vuelvas a expresarte así de Ámbar! —Le arrebató la bola de cristal de las manos con recelo—. Sé que para ustedes no debe de parecerles más que una niña mimada... o un obstáculo en su camino —Volteó a ver a los Pokémon cocodrilos—. Pero yo la conozco desde hace mucho tiempo y sé que es una mujer muy buena en el fondo. —Cerró los ojos un momento—. Después de todo ella fue quien me...
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Pokémon: La fuga del soñador
Hayran KurguUn Lucario que pasa sus días soñando con convertirse en caballero y un Lycanroc obsesionado con recuperar lo que le fue arrebatado, unen sus fuerzas a las de un Espeon desesperado por conseguir un objeto legendario procedente de la era mitológica. ...