Rousuke Kitahara apodado Ryuuji es un humano algo extraño algo... "salvaje", en otros terminos este llega a la academia Seton y conoce a Jin y a los demas integrantes del club de cocina y viven aventuras divertidas y otras no tanto debido a algo que...
-¡Ya detente déjalo en paz! ¡No tienes que llegar a eso, estás excediéndote!- gritaba una mujer con el cabello castaño claro a un muchacho con el cabello rubio.
-El debe aprender la lección, ¡Me dejó en ridículo!-
La imagen de ese chico se fue desvaneciendo poco a poco, a medida de que Ryuuji abría lentamente sus ojos.
El humano se enderezó en su cama y miro un rato a la nada sosteniéndose la cabeza, con una mirada careciente de vida.
-Otro sueño de nuevo, esto se está volviendo muy cotidiano, ¿Porque?- pensaba Ryuuji mientras se levantaba y tomaba camino a la ventana para así correr las cortinas y toparse con que el sol aún no había salido.
-¡¿Eh?! ¡¿Aun falta un rato para que amanezca?!, ¡¿Qué hora es?!...- susurró viendo su teléfono celular y ver qué marcaban las 5:10 de la madrugada.
-¡¡¿Ehhhh?!! ¡Las cinco de la madrugada!, bueno que importa- pensó viendo a un lado con una tonta sonrisa.
El muchacho camino hasta su armario que estaba justo en frente de la cocina al lado de la puerta de salida, y tomo una sudadera deportiva negra, seguido de unos pantalones color gris, se colocó unos zapatos para para correr, arremango un poco su manga derecha mostrando una muñequera negra, acto seguido tomo camino a la puerta y finalmente a la salida de la habitaciónes.
Ryuuji se hecho a correr alrededor de toda la academia, la cual poco a poco comenzaba a ser iluminada por los rayos del sol.
-Wow... Este lugar es realmente hermoso, no me había dado cuenta, en ningún momento me detuve a verlo con claridad- pensó en voz alta.
Después de correr un rato Ryuuji se detuvo a descansar caminando un poco, después de un rato intentando regular su respiración vió una banca en la cual podía sentarse.
Una vez se acerco, al momento de sentarse se percató de que una muchacha también iba a hacer lo mismo.
-¡Ah! ¿Oh perdona te ibas a sentar?- pregunto Ryuuji señalando a su lado.
-Ah si, ¿No te molesta?- contesto algo agitada ya que también parecía haber estado corriendo.
-¡Para nada! Adelante- La chica tomo asiento justo al lado Ryuuji quien se había sentado con su postura hacia adelante, con sus codos ubicados sobre sus rodillas y la espalda un poco encorvada.
Ryuuji la observó de pies a cabeza.
-Cabello marrón, esas orejas delicadas, un cuerpo esbelto y bello, si definitivamente es...- pensó mientras la veía de reojo y finalmente preguntar.
-¿Impala?-
-¿Mm?-
-Perdón, digo ¿Eres una Impala?- preguntó ante la curiosidad.
-Si, lo soy ¿Por qué preguntas?- interrogó ladeando su cabeza.
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