Había invitado a Luzu a dormir en mi casa, después de todo estaba más cerca que la suya y ya habíamos pasado mucho por esta noche, pero dijo que debía volver.
-Alexbitas esta en mi casa, habíamos quedado en ver una maratón de Star Wars pero nos dormimos en la primera película- Asentí suavemente.
-Esta bien, nos vemos más tarde en ese caso, cuídate Luzu- Hice un movimiento de despedida con mi mano mientras lo veía alejarse tranquilamente.
No quería que se fuera, lo quería a mi lado, simplemente hablando, riendo, sin tener que preocuparnos de nada más.
Supongo que la mayoría de esas sensaciones se debía más que nada al recientemente formado lazo de compañeros, pero aún así. Quería ser egoísta por una vez, quería que se quedase, que me quisiera y me cuidase... no quería estar solo, no de nuevo.
Un mareo me hizo caer al suelo, sentí una presión en mi pecho ¿Qué sucedía conmigo? Lagrimas caían por mi cara ¿Estaba llorando? ¿Por qué? Cerré los ojos, intentando en vano detener las lágrimas que caían de mis ojos.
¿Por qué? ¿Por qué Rubius no me quería? ¿Por qué los dioses no me querían? ¿Acaso no era yo perfecto? ¿Había algo mal en mi? ¿Por qué no podía ser feliz?
Un estruendo y un gran peso sobre mí me sobresalto.
-¡¡Vegettita!! ¡¿Qué sucede?! ¡¿Por qué lloras?!- Sentí unos brazos rodeándome.
-¿Lu...Luzu? ¿Qué haces... ¿Qué haces aquí?-Me ayudo a levantarme del suelo y me dejo en el sillón.
-Estaba a mitad de camino cuando sentí algo muy raro, no sé que era, pero algo me dijo que tenía que venir aquí inmediatamente- Fue a la cocina rápidamente y me trajo un vaso de agua.
-Gracias pero... ¿Qué le dirás a Alexby?- Tome un trago de agua mientras veía a Luzu sentarse a mi lado y abrazarme.
-Ya se me ocurrirá algo cuando le vea, ahora solo importas tú, así que venga, no tienes que decirme nada ¿Vale? Solo déjame cuidarte- Asentí suavemente con la cabeza y le devolví el abrazo.
-¿Por qué siempre me dejan Luzu? ¿Hay algo mal en mí? ¿Soy muy pesado con eso de la ilegalidad o algo? ¿Soy muy aburrido? Puedo cambiar, lo juro, puedo ser más liberal y divertido y yo...-
-Ya esta bien, ya basta- Luzu me interrumpió con voz seria ¿Se había molestado conmigo? ¿Había hecho algo mal? -Eres perfecto como eres Vegettita, y no por que los dioses te hayan hecho para ser perfecto, sino porque eres tan imperfecto como todos nosotros... con tus chistes malos, con tu preocupación y tus idas de olla cuando construyes algo, así eres perfecto, si las personas no saben quererte tal y como eres, entonces no merecen tu dolor- Sentí un sollozo escapar de entre mis labios -Venga, abraza a Mami Luzu todo el tiempo que quieras, por que necesitas aprender una cosa aquí y ahora, estoy aquí, y estas conmigo-
No estoy seguro del porque, tal vez fue el cansancio físico sumado con el emocional, tal vez fue la suave canción que tarareaba Luzu junto con las leves caricias que dejaba en mi pelo, tal vez fue el calor y la comodidad que sentí en aquel momento (De hecho, muy probablemente fuese todo aquello al mismo tiempo) pero tuvieron que ser más o menos las seis y media de la mañana cuando caí dormido y por fin pude descansar.
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Dioses Oscuros //Karmaland 4//
FanfictionDos héroes con el corazón destrozado, incapaces de avanzar sin ayuda, e incapaces de encontrar a alguien que les ayude. Una petición que desemboca en la renuncia del mayor héroes de todos y el... ¿Hijo de los dioses? Unos espíritus dispuestos a hace...