Dioses Oscuros //Karmaland 4//

Especial 1 Año Después #Boda

El sol alumbraba todo el paisaje, la gente miraba hacia un punto emocionada desde sus asientos y todos esperaban expectantes las palabras de Merlon. 

Vegetta vestía un traje blanco con corbata violeta y portaba una corona de flores del mismo color (Con pequeñas flores en rojo y rosado) y Luzu vestía un traje negro con corbata azul y una corona de flores azules y rojas.

Ambos chicos se miraban sonrientes mientras se tomaban de las manos, vieron a Merlon inspirar profundo y comenzar. 

-Estamos aquí para presenciar la unión entre estas dos personas quienes son muy importantes para nosotros, Borja Luzuriaga y Samuel de Luque, amigos, héroes, compañeros y dioses, que la suerte y el karma siempre estén a vuestro favor, podéis decir vuestros votos- Al terminar de hablar un cerdo se acercó a los chicos sosteniendo una pequeña almohada con la boca. 

-Ay Manolo, eres tan cute tío- Luzu se agachó un poco para recoger uno de los anillos que había sobre la almohada, era un anillo de plata con una pequeña gema azul en el centro. 

Vegetta se agachó también y tomó el otro anillo el cual era exactamente igual al primero pero con la excepción de que la gema del centro era morada. 

Los dos se enderezaron y se miraron con todas sus emociones brillando en sus miradas; Nerviosismo, alegría, temor, ansiedad, felicidad... 

Luzu inspiró profundamente, sosteniendo de forma delicada la muñeca descubierta de Vegetta y comenzó -Yo, Borja Luzuriaga, héroe y caballero, rey, príncipe y hechicero, ninfa, ladrón y dios, reconozco a Samuel de Luque como mi compañero y unidad, le brindo mi poder y protección- Se inclinó sonriente para besar de forma suave la muñeca del contrario -Y le juro mi amor y compañía eternos- Seguido de esto los chicos aplaudieron suavemente y Luzu puso el anillo en la mano de Vegetta. 

El oji morado inspiró y sonrió, admirando como el anillo brillaba en su dedo, y sostuvo con suavidad la muñeca de su amado, preparado para decir aquellas mismas palabras por segunda vez en su vida. 

-Yo, Samuel de Luque, héroe y caballero, rey, príncipe y hechicero, ninfa, ladrón y dios, reconozco a Borja Luzuriaga como mi compañero y unidad, le brindo mi poder y protección- Besó la muñeca de su pareja y se levantó sonriente -Y le juro mi amor y compañía eternos- Seguido de esto puso el anillo en el dedo del contrario. 

-Ahora pueden besarse- 

Apenas Merlon terminó de decir aquellas palabras todos los presentes saltaron de sus puestos festejando y aplaudiendo, Luzu y Vegetta simplemente se miraban sonrientes y ajenos a todo, acercándose de a poco para juntar sus frentes. 

-Ahora estamos casados, así que como tu esposo, te digo desde ya, quita de tu cabeza cualquier idea de volver a sacrificarte de esa forma y que no se te ocurra romper otra vez la conexión que tenemos- Vegetta se rio ante las palabras de Luzu, admirando de reojo la figura de león que aparecía en su muñeca. 

-No se me ocurriría hacer algo así de nuevo, créeme, lo único que quiero ahora es pasar el resto de mi vida contigo tranquilamente... Y nuestra luna de miel, también quiero nuestra luna de miel- Ambos rieron mientras se sonrojaban, conscientes de que la gente comenzaba a mirarlos nuevamente. 

-¡Vegettita! ¡No seas guarro!- Volvieron a reír y Vegetta acercó el rostro de Luzu al suyo jalándolo ligeramente de la corbata. 

-Cállate de una vez y bésame, tontito- 

Y así, entre pétalos que caían (Cortesía de Alexby), gritos de jubilo y festejo, luciérnagas y unas hadas ilegalísimas que pasaban por ahí casualmente (Lo que viene a ser; Rubius las trajo), ambos se besaron, disfrutando de aquel momento como si nadie más estuviera a su alrededor.

La vida iba a resultar muy explosiva y sin duda alguna dinámica y emocionante, sobre todo con compañeros y amigos como los que ellos tenían, pero valdría la pena. 

Por que ya fueran dioses, amigos o héroes, ellos siempre se enfrentarían al peligro, y de alguna forma u otra, siempre saldrían ganando.