04. lie

3K 209 90
                                    

Cuando llegue a la facultad ese lunes, agradecí infinitamente no compartir ninguna clase con Seung este semestre.

Sana me había interrogado sobre lo que había pasado con Jungkook, pero no había logrado que le dijera mucho. No sabía que decir exactamente, ¿cómo seguir la mentira? Le di solamente respuestas vagas, nada concreto.

Tenía que ver a Jungkook.

Ahora.

Pero no sabía exactamente donde buscarlo, pues nunca nos habíamos visto por nuestra cuenta en la universidad, sino que siempre estábamos con alguno de los chicos o Sana.

Iba a tener que esperar hasta el final del día, cuando acabaran las clases, para poder ver a ese chimpancé.

———•

— Estás muy rara hoy, Yun — me dijo Sana, de camino hacia nuestra última clase del día.

Había perdido la cuenta de las veces que había echado un vistazo por encima de mi hombro para asegurarme de que Seung no estuviera cerca.

— ¿Por qué? — me hice la tonta, frunciendo el ceño e intentando sonreír sin preocupaciones. — Estoy como siempre.

Mi amiga, a pesar de mi actuación, me miró suspicaz y terminó por arrugar los labios en una amenazante sonrisa.

— Yo creo que algo paso con Jungkook pero no me quieres decir — dijo, usando un tono de voz medio cantadito y burlón.

Tuve miedo de meter la pata, así que seguí dándole largas. Tampoco quería contarle lo de las visitas nocturnas de mi ex novio, no quería alarmarla. Además, ya me estaba encargando de ello, ¿no?

— Nos hemos estado llevando mejor — me limite a decir.

— ¿Desde cuándo? Nunca los había visto juntos sin estarse gritando, ¡mucho menos tocándose!

— Basta.

— La imagen de ustedes dos tomándose de la mano me persiguió hasta en mis sueños.

— ¡Sana! — me tape la cara con las manos.

— Bien, no me digas nada. Pero al final voy a terminar sabiéndolo todo — frunció el ceño solo por unos cuentos segundos, hasta que su mirada se detuvo en mi muñeca. — Por cierto, lindo brazalete, ¿en dónde lo has conseguido?

———-•

Al salir por fin de clases, me dirigí a la cafetería del campus junto a Sana, pues los chicos nos habían dicho que estarían ahí. Al llegar, todos estaban en una mesa no muy al fondo. Nunca me había alegrado tanto de ver a Jungkook... corrección, nunca antes me había alegrado de verlo.

Él, al vernos aproximándonos a ellos, dejo de comer y se limpió la boca de forma muy brusca. Se levantó rápidamente y, antes de que llegáramos a la mesa, vino hacia mi y me hizo caminar en la dirección contraria, a su lado.

— Eh — bufé cuando me pasó un brazo por encima de los hombros.

— Me di cuenta en mal momento de que no tengo tu número— me dijo, ofreciéndome su celular.

Lo tome para ingresarlo en sus contactos. Se lo entregue después de enviarme un mensaje a mi misma. No me podía arriesgar a necesitarlo y que él no me hubiera contactado para yo también tener el suyo.

— ¿Le has dicho algo a Sana?

— No, nada muy exacto.

— Bien, te actualizo — dijo, apretándome más hacia él con su brazo, para tener mayor proximidad a mi oído. Pero, ¿y esto? Este mequetrefe ya se andaba muy manitas. — Ya le dije a los chicos que estamos juntos.

andrómina • jjk ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora