andrómina • jjk ✔️

23. crystal snow

El siguiente lunes desperté decidida a hablar con Jungkook. No lo había intentado contactar durante el fin de semana porque a) estaba nerviosa y b) utilice ese tiempo para pensar en que era lo que le diría.

Él había intentado hablar conmigo pero mi orgullo y mi necedad me impidieron afrontar mis emociones. Siempre había sido buena con las palabras, pero había tardado mucho tiempo en encontrar una explicación a lo que estaba sintiendo. ¿Quién hubiera pensado que iba a terminar viendo a Jungkook en todas partes, sin poder dejar de pensar en él y deseando con todas mis fuerzas que pudiéramos estar juntos?

Esa mañana llegue a clases con mi suéter rosa favorito, jeans azules y mis converse blancos. Mi cabello estaba sujeto en una floja coleta de caballo y un peculiar temblor me invadía de vez en cuando a mitad de las clases al pensar en Jungkook.

— ¿Has hablado con él? — Sana y yo estábamos de camino al salón después de haber ido al baño en medio del segundo descanso del día.

— No, pero hablé con Jimin. Al parecer ya todos saben que lo que tenían era mentira, pero no sé que tanto sepan.

— Estoy muy avergonzada — dije, tapándome brevemente la cara con una mano.

— Que va. Ni te preocupes.

———-•

Cuando fuimos a la cafetería para encontrarnos con los chicos, todos estaban ahí menos Jungkook.

— ¿Cómo que no vino a clases? — le pregunto Sana a Taehyung mientras se sentaba a su lado. El chico se encogió de hombros.

— Me mando un mensaje diciendo que estaba enfermo. Un resfriado o algo así. Dijo que tal vez faltaría toda la semana.

— Patrañas — me susurró Sana, de modo que solo yo la escuche.

— ¿Te dijo algo más? — pregunte.

— No, nadie lo ha visto desde la feria — contesto.

Ninguno de los chicos parecía estar molesto ni nada, pero cuando Tae mencionó la feria, percibí cierta tensión en la mesa.

— Lamentó haberlos engañado con lo de Jungkook, chicos. Se nos salió un poco de las manos y...

— No nos tienes que explicar nada, Yun. Esta bien — dijo Jimin.

— Solo fue extraño — dijo Hobi.

— Ojalá lo arreglen — Tae sonrió levemente.

Considere llamarlo o mandarle algún mensaje, pero en el fondo sabía que lo que tenía que decirle debía ser dicho en persona. No había otra forma.

Una parte de mi tenía la pequeña esperanza de que por la noche fuera por mi después del trabajo, como siempre. Pero no fue así. Después de mi salida, me quede en la estación e ignoré a dos autobuses esperando a que se apareciera. Llegue a casa más tarde de lo normal y directamente me fui a tirar a la cama.

Revise el estado de Jungkook en línea, pero ni siquiera aparecía la última vez que se conectó porque debió haber sido hace varios días.

Decidí enviarle un mensaje. Al diablo. Solo quería saber cuando podría hablar con él.

" ¿Te sientes mejor? ''

Literalmente dure diez minutos viendo la bandeja de entrada esperando una respuesta que no llego nunca. Avente el celular en el colchón y me levante para ponerme la pijama, cuando de repente el sonido de una nueva notificación llegó a mis oídos.

Me apresuré a tomar el celular esperando ver un mensaje de Jungkook, pero era otro mensaje de ese número desconocido.

"Rosa"