Capítulo 24

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—No hay muros en la costa, pueden salir —nos dijo Michael con un limon en la mano mientras entraba rodando.

—Moros, es moros —le dije.

—mE RASPE LOS ROLLOS CON LA MADERA Y LOS SALVE DE UNOS MAFIOSOS Y VOS ME VENIS A CORREGIR.

—Disculpame, rey del choripan que necesitaba el premio de Bolivia.

—BASTA —dijo Ashton y Michael me sacó la lengua.

[...]

—Mirá esto —le dije a Ashton cuando ya estabamos solos en casa.

—Espera, estoy agujereando la remera.

—Pero no te das cuenta que es una gronchada.

—A mí me gusta, cerra la concha.

—Vas a leer o.

—Bueno dale.

"AY QUE GRANDES ESTAN MIS POLLITOS COMO LOS EXTRANO A VER CUANDO VIENEN A CASA DE LA ABU LELA LOS AMO BESOS A TODOS FELICES FIESTAS QUE DIOS LOS BENDIGA".

—Desde cuando la abuela tiene facebook.

—qué se yo boludo.

—PONGANSE ROPA LIMPIA QUE VIENEN TODOS  A COMER.

—Hola pa yo bien y vos nada casi me matan jaj.

—PONGANSE ROPA LIM-

—BUENO.

[...]

—_____(comoporongatellames), hay una rata en la puerta —me dijo Ashton.

—Dale tarado. Nunca haUNA RATAAAaaaaAaaAAAAA,

—Callate estúpida.

—QUE PASA MIS NIETITOS LINDOS?

—Nada abu —le contesto Ashton mientras me tapaba la boca.

—Qué es lo que querés hacer? —le pregunté en el oido.

—Vení.

Ashton y yo nos levantamos de la mesa, agarramos una escoba y una bolsa y fuimos en puntitas de pie hasta la rata. Cuando la cosa asquerosa ya estaba adentro, Ashton la tiro en el pelo de la novia de nuestro tio, que de casualidad nos caia para el orto.

Al principio nos re cagamos de risa, pero cuando la rata le arranco un ojo a la pobre mujer y su vestido blanco era rojo... nos seguimos riendo.

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