El sol atinó a golpear en la cara a Spiderman, quien con fuerzas renovadas se despertó descubriendo a una diminuta X-23 que se aferraba al frente de su camiseta y a las demás yendo en dirección al baño medias dormidas con toallas en sus brazos. Pausadamente, el tótem fue irguiéndose, tomando con él a la clon ya que se negaba a soltarlo a menos que quisiera convertirse en una brocheta.
Grrrr suertuda- nuevamente la clon gruñó con celos así yo de la lectura.
Laura abrió los ojos, hallándose en brazos de un Peter que preparaba diligentemente un desayuno que convertía en agua su boca, por lo que simplemente se dedicó a ver como el hombre cocinaba completamente ajeno al hecho de que ella miraba como tarareaba al son de una canción que el televisor emitía.
Nosotros también queremos desayunos del tío Peter- chillaron los pequeños Storm, para su sorpresa unos palitos de comida aparecieron delante de ello, rápidamente miraron al único hombre mayor.
Solo digamos que Spiderman escucho una vocesita en su cabeza que le pidió hacer dos desayunos- respondió a las dudas de muchos con una calida sonrisa paternal.
Mientras que los niños, bueno ellos solo escucharon desayunos hechos por Peter, comenzando a comer disfrutando cada bocado.
-Hola, Peter! – se oyó saludar a Jennifer, quien traía consigo un peine.
-Buen día, Jen. Cómo amaneciste? Oh, hola a ti también Laura! – respondió el castaño, volteándose y percatándose de la pelinegra que frunció su ceño al ser vista, procediendo a removerse en su agarre hasta finalmente soltarse.
-Voy a bañarme…- gruñó la mutante mientras se retiraba.
-Vaya, no es una persona diurna parece- con un tono divertido, dijo Peter.
No tienes idea respondieron pálidos los mutantes presentes.
-Ya está el desayuno? – She-Hulk quiso saber, poniéndose de puntas de pie para ver a la perfección que era lo que se estaba llevando a cabo.
-Estoy esperando que ustedes terminen de bañarse y se sienten en la mesa. Oye, necesitas ayuda con eso? – replicó la araña con suavidad mientras alzaba a la mini heroína cuando quiso robarse un panqueque, para después indicar el peine que la niña llevaba.
Lo mismo pasaba en la actualidad al ver un esponjoso panqueque en los platos de los niños pero fallando rotundamente, para su sorpresa un plato llenos de panqurques y miel apareció delante de ella.
(Nota:Pobre spidy ya lo tienen de cocinero, pero que ricos desayunos)
-Qué? Ah, sí! Puedes peinarme? – despabilándose del hecho que era transportada fácilmente por el hombre al que siempre trató mal junto al pensamiento de recibir un desayuno así todas las mañanas, logró contestar a Peter mientras era sentada en una silla y entregaba el peine.
La susodicha comenzó a ruborizarse
Él asintió sonriente y se dedicó a tratar el largo cabello verde, saludando a cada una de las infantes que salían del baño y hacían fila con sus cepillos en mano, esperando por el turno que tácitamente solicitaron. Peter no tenía problema alguno con ella, ya que más de una vez se imaginó haciéndole esto a su propia hija, lo que dibujó una sonrisa triste en su cara sin que lo supiese pero las demás si vieron.
Stan puso una mueca triste recordando lo que ah tenido que sufrir el arácnido, solo esperaba que con esto, esos días acabarán.
-Ven, Peter! Vamos a desayunar! – clamó Carol, tomando la mano del adulto y ayudándole a llevar los alimentos.
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leyendo niñeros por obligación
Hayran KurguAntes que nada tengo permiso del autor para hacer un leyendo de está increíble historia y tal como el título indica es un leyendo niñeros por obligación, y me disculpo por todas las faltas de ortografía que probablemente habrá.