____ abrió los ojos y se encontró a Harry inclinado sobre ella intentando despertarla.
-Arriba. Hora de levantarse e ir al trabajo -le dijo.
Ella se restregó los ojos en un intento de recuperar su nítida visión.
-¿Qué hora es?
-Las seis. Dúchate y vístete, cogeremos algo para desayunar de camino a la oficina.
Cuando estuvo más despierta se percató de que Harry ya estaba vestido. No se había enterado siquiera de cuándo se había levantado de la cama, pero pudo advertir el olor a limpio y a pulcro de su gel de baño y el seductor aroma de su colonia. Llevaba puestos unos pantalones, una camisa, cuyo último botón seguía desabrochado, y una corbata alrededor del cuello, todavía por anudar.
Estaba... intachable. Indiferente y tranquilo. Un gran contraste con el hombre que la había hecho suya la noche anterior una y otra vez.
____ se impulsó hacia arriba y maniobró entre las mantas hasta llegar al borde de la cama.
-No tardaré mucho.
-Tómate el tiempo que quieras. Esta mañana no tengo prisa. Tengo una reunión a las diez, hasta entonces estoy libre.
Se dirigió torpemente al cuarto de baño y se miró minuciosamente en el espejo. Además de mostrar signos de cansancio, no se veía diferente. No sabía por qué pero esperaba que el mundo pudiera ver en su piel todo lo que ella y Harry habían hecho la noche anterior.
Durante un buen rato, ____ se quedó sentada en la tapadera del váter y dejó que el agua corriera en la ducha. Necesitaba unos minutos para serenarse. Estaba dolorida; ____ nunca había tenido un maratón de sexo en su vida. Todos sus encuentros sexuales habían sido muchísimo más lentos y monoorgásmicos.
Harry la había poseído cuatro veces a lo largo de toda la noche. Cuando terminó se disculpó con hosquedad, como si le estuviera haciendo daño por dentro. Sus ojos habían estado llenos de verdadero arrepentimiento. Le dijo que quería ser más suave con ella, que quería mantener la promesa que le había hecho de ir con calma al principio pero que era incapaz de contenerse, que la deseaba demasiado.
¿Se suponía que eso la tenía que molestar?
Tener a un hombre tan loco por ella que no pudiera siquiera controlarse no era algo malo precisamente. Obviamente estaba dolorida y tenía marcas y pequeños moratones que le habían dejado sus manos y su boca, pero no le había hecho daño. Había disfrutado cada minuto de la noche aunque la mayor parte del tiempo se hubiera sentido completamente abrumada.
Se metió en la ducha y se quedó de pie para dejar que el agua caliente le cayera por el rostro. Consciente de que Harry ya estaba vestido y listo para ir al trabajo, ____ se lavó rápidamente el pelo y se enjabonó el cuerpo antes de salir de la ducha y de envolverse en una toalla.
Fue entonces cuando se dio cuenta de que no se había traído ninguna muda al baño; no sabía siquiera lo que él había hecho la noche anterior con la bolsa que Caroline le había preparado.
Tras enrollarse el pelo con una toalla, ____ abrió la puerta y se asomó. Harry estaba sentado en la cama y la ropa que ella necesitaba se encontraba justo a su lado. Cuando se encaminó hacia él, este cogió las bragas y las dejó colgando de la punta de un dedo.
-No las necesitarás -le dijo.
____ puso los ojos como platos.
-Sin bragas en el trabajo. Son un estorbo -dijo Harry con ojos resplandecientes mientras se la quedaba mirando fijamente.