_____ se dobló sobre la mesa de trabajo de Harry y apoyó las manos en la superficie, con la falda subida hasta la cintura para que este le extrajera el dildo. Cerró los ojos y dejó escapar un suspiro de alivio; el juguetito la había tenido de los nervios toda la tarde. A lo mejor ahora podía calmar todo ese subidón que le había provocado.
Harry le limpió el ano con cuidado. Se tomó su tiempo en pasarle la toalla por la piel, y luego le bajó la falda y le dio una ligera palmada en el cachete.
-Ve a por tus cosas. Pasaremos por el apartamento para cambiarnos y después iremos a cenar.
____ solo quería quedarse tumbada encima de la mesa durante los siguientes quince minutos mientras se recuperaba de esa sensación de tensión que había sentido durante tanto rato. En vez de regañarla por no seguir sus órdenes de inmediato, Harry deslizó las manos por sus hombros, la levantó y la estrechó entre sus brazos.
Ella se acurrucó junto él, inhaló el olor sazonado que desprendía su piel y absorvió todo su calor. Luego Harry la besó en la cabeza y murmuró:
-Sé que te he presionado mucho. Pero parece que no me sale hacer otra cosa.
Ella sonrió contra su pecho y lo envolvió con sus brazos para estrecharlo con fuerza. Harry pareció sorprenderse ante el gesto; se quedó rígido durante un instante pero luego la apretó más contra él y escondió el rostro en su cabello.
-No dejes que te cambie, ____ -le susurró-. Eres perfecta tal y como eres.
Pero ya la había cambiado de una forma irrevocable. ____ ya nunca volvería a ser la misma.
Cuando la soltó, Harry se giró casi como si no le hubiera gustado el hecho de haberle susurrado lo que acababa de susurrarle. Ella se alisó la ropa y pretendió no ver su incomodidad. Se acercó a su propia mesa para coger el bolso y luego se volvió a girar hacia Harry con una amplia sonrisa en el rostro.
-¿Nos vamos?
Él extendió el brazo para instarla a ir delante y luego le puso la mano en la espalda al tiempo que salían del despacho. Ambos se despidieron de Eleanor, que también estaba preparándose para marcharse, y luego se encontraron a Ash esperando el ascensor.
A ____ se le paró el corazón. ¿No se suponía que estaba en una cena de negocios con Jace? Dios, ¿qué hubiera pasado si hubiera querido presentarse en el despacho de Harry? ¿Habría ido y se la habría encontrado cerrada? Peor, ¿podría haber escuchado algo?
-Ash, pensé que estabas con Jace -pronunció Harry como si nada.
Ash sonrió y ____ se asombró de lo guapo que era ese hombre.
-Me olvidé una carpeta con información importante sobre la gente con la que nos íbamos a reunir. Jace está camelándoselos y excusándome por mi inevitable retraso.
____ resopló.
-¿Jace camelándoselos? Ese es tu fuerte, Ash. ¿Cómo demonios te las has apañado para ser tú el que venga por la carpeta? Seguramente se está tirando de los pelos ahora mismo.
Ash la cogió de la barbilla y luego la estrechó entre sus brazos.
-Te he echado de menos, chiqui. Y sí, no es que le haya dejado muchas opciones a Jace. Me fui antes de que pudiera mostrarse amenazante.
Ella le devolvió el abrazo a Ash, relajada ante el evidente afecto que le estabamostrando. Hasta ese momento, había pasado bastante tiempo desde la última vez que había disfrutado de la compañía de Ash y Jace. Lo echaba de menos. Echaba de menos su constante y reconfortante apoyo.
