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____ pasó el fin de semana con Jace. O, mejor dicho, él lo pasó con ella. Ash iba y venía, trayéndoles comida y por norma general preocupándose por tonterías. Los dos hombres trajeron películas y se quedaron tumbados en el sofá viendo la tele hasta que ____ se quedaba dormida por culpa de la fiebre.

El lunes por la mañana, ya se sentía mejor, pero no lo bastante como para volver al trabajo. Así que llamó a Louise y Greg para hacerles saber que no iría.

Jace y Ash se dirigieron hacia la oficina, pero le dijeron que volverían porque tenían algo especial planeado para la noche.

Durante todo su gripazo, no había escuchado ni una sola palabra de Harry. Ni había recibido flores ni regalos. Solo silencio. La ponía de los nervios y hacía que se cuestionara cada decisión que tomaba con respecto a él.

_____ no tenía corazón para decirle a Jace que no estaba para lo que sea que tuvieran planeado él y Ash. Ambos habían sido muy buenos con ella durante todo el fin de semana, la habían mimado a más no poder y habían intentado todo lo posible por animarla.

Sea lo que fuere que tuvieran planeado, ella estaría preparada y lo recibiría con una sonrisa en la cara. Jace le había dicho que se vistiera con ropa de abrigo, así que se podía imaginar que el sitio a donde iban era al aire libre.

Gracias a dios que ya no tenía fiebre, o si no el mero pensamiento de salir a la calle, al frío, la hubiera puesto de los nervios.

Se duchó por la tarde e intentó con todas sus fuerzas hacer algo decente con su pelo y su maquillaje para no parecer resacosa o que un camión le hubiera pasado por encima. Pero incluso el maquillaje tenía sus limitaciones.

A las seis, Jace y Ash llegaron con ojos traviesos. Ella soltó un quejido para sus adentros porque obviamente lo que tenían planeado no era nada bueno, y, teniendo en cuenta que iba a estar involucrada, seguro que sería víctima de lo que sea que tuvieran entre manos.

Jace tenía chófer esta noche, un hecho extraño, ya que él tendía a conducir su coche por la ciudad cuando se trataba solo de ellos. Aun así, la metieron en el coche tras asegurarse de que se había tomado los medicamentos por si acaso la fiebre le volvía a subir.

-¿Adónde vamos? -preguntó con exasperación.

-Eso solo lo sabemos nosotros, y pronto lo averiguarás -le dijo Jace con suficiencia.

Tanto él como Ash parecían niños en Navidad; los ojos les brillaban de felicidad de una forma excesiva. ____ se relajó en el asiento y se dijo a sí misma que disfrutaría fuera lo que fuese aunque el corazón aún le doliera por ese vacío que sentía. Harry había desaparecido tras esa noche del viernes cuando se quedó con ella en el apartamento. No había oído nada de él, ni una palabra. ¿Se habría rendido?

Cuando se pararon frente a Saks en la Quinta Avenida, junto al Rockefeller Center, ____ ahogó un grito de alegría al ver el árbol tan gigantesco que se alzaba por encima de la pista de patinaje. Era muy bonito, y la hacía ponerse nostálgica por los recuerdos que tenía de Jace trayéndola aquí cuando ella era una niña. Nunca se habían perdido, ni una sola vez, la primera iluminación del árbol. Hasta este año, de hecho.

-Oh, Jace -susurró mientras se bajaba del coche-. Tan bonito como siempre.

Jace le sonrió con indulgencia, y luego tanto él como Ash se pusieron cada uno a un lado de ella y la guiaron hasta la multitud que había reunida alrededor del árbol.

Este se alzaba sobre ellos brillando con miles y miles de lucecitas de colores. La música navideña llenaba el ambiente, y luego empezó a oír una melodía cuando un hombre comenzó a cantar The Christmas Song.

Mi Éxtasis (01)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora