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,,¡Simón, amor, abre la puerta por favor!" gritó Villa desde la cocina cuando escuchó ruidosamente tocar la puerta.

,,Seguro que son Martín y Juan", sonrió Simón, levantándose del sofá. Fue hacia la puerta y su sonrisa se hizo más grande cuando vio a su amigo.

,,Hola Marto, somos...¿Martín?", Se detuvo en medio de la oración cuando vio cómo se veía su amigo. Estaba tan blanco, su cabello estaba tan desordenado y estaba llorando tanto que apenas estaba de pie.  ,,Jesucristo, ¿qué pasó? ¡Villa!"  Simón llamó a su esposo y llevó a Martín a la sala donde apareció el segundo hombre.

,,¿Martín?  ¿Qué demonios pasó?" se preocupó Villa cuando vio a Martín llorando. Solo sacudió la cabeza y se sentó en el sofá.

,,Lo...lo siento...yo...me duele...mucho", murmuró incoherentemente, secándose las lágrimas que brotaban de sus ojos.

,,¿Te lastimó?" Villa se sonrojó por la ira.

,,No...no cómo...cómo piensas", sollozó Martín.

,,No lo entiendo, Marto, hoy te hablé..." se sentó Simón junto a su amigo.

,,No quiere ... no quiere al bebé, Simón.  El dijo que mientras soy su esposo, tengo que olvidarme del bebé. Odia tanto nuestro sistema de bebés que me quiere robar la felicidad de tener un bebé", sollozó Martín y Simón le dio un fuerte abrazo. Miró sin palabras a Villa. Ambos sabían cuánto dolor es para Martín. Ordenados son criados con estilo "tu vida es completa cuando tienes esposo, casa, trabajo e hijo". Y Martín acaba de descubrir que nunca llegará al último. Y ambos niños sabían cómo Martín siempre soñó con ser padre.

,,Tal vez cambie de opinión, Martín. Estaba sorprendido", trató Villa para calmarlo. Pero él simplemente sacudió la cabeza, totalmente roto.

,,Lo sabía. Lo sabía desde el principio, desde que escuché la idea de casarme con él. Pero cuando Nathalia me dio el papel, yo...mis emociones tomaron el control", exhaló.

,,Entonces, ¿por qué no nos lo dijiste antes, Marto?" preguntó Simón. Martín se miró las rodillas y volvió a sollozar.

,,Solo pensé que iba a cambiar de opinión. Que le agradaré y que nuestra relación funcionará...que querrá tener una familia conmigo, que se acostumbrará a vivir en la ciudad...pero no. Nunca será Ordenado". Su cuerpo comenzó a temblar y comenzó a llorar de nuevo.

Villa lo abrazó con fuerza y ​​le acarició el pelo.

,,No volverás a casa hoy, dormirás aquí".

,,Pero Villa...", dijo Simón. Eso estaba estrictamente en contra de las reglas. Cada Ordenado tenía que quedarse en casa después de las 10 pm, si no tenía un permiso especial.

,,No te preocupes, Simón, tengo un permiso de Nathalia. Me lo dio por otros casos además de este, pero no importa", se secó las lágrimas Martín.

,,¡Excelente! Veremos algunas películas y por hoy te olvidarás de Juan", ordenó Villa y encendió la televisión. La diferencia entre las máquinas de hoy y la que existía antes del apocalipsis era que las televisiones de hoy eran solo en 3D.

Martín se cubrió con una manta que Simón le dio y se concentró en la película. Solo había unos pocos, porque hoy no tenían recursos para hacer nuevas peliculas, y los que sobrevivieron desde el pasado tuvieron que ser estrictamente censurados.  El Consejo temía que si la sociedad quisiera películas donde no estuvieran separadas de Solteros, Ordenados y Rechazados, harían una revolución.  Martín ya vio la película, por eso, poco después de que comenzara, su cabeza cayó sobre el hombro de Simón y se quedó dormido, exhausto debido a la ola de emociones de hoy.

Elección// Isargas, traduct al español Donde viven las historias. Descúbrelo ahora