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Llegamos al río, el sol había salido un poco, me arrepentí de haberme puesto un mega suéter, me estaba cosiendo literalmente.
Lo quite y pude ver los ojos curiosos de Chiquete, a ese wey no se le escapa ni una.

-Un solo comentario y te parto tu madre.- Le advirtió mi hermano.
Todo esto por que me había quitado el suéter ¿Saben por que? Por que yo no andaba nunca con la ropa pegada ni con escotes pronunciados ni nada de eso.

-Me calló a la verga.- Dijo el Chiquete y solté una risa.

Pude ver a Vitolias divertirse en la moto, era el único de todos que sabía más o menos cómo manejarlas y les ayudaba a sus amigos, Eduardo platicaba fuera de cámara con sus amigas obviamente, mientras que al Chiquete le valía madre y hasta las presentaba por primera vez.

A pesar del incidente y que yo creí que sólo vendríamos nosotros me divertí un poco, teníamos tiempo que no pasábamos la tarde juntos.

-Hoy estás muy callada Ferchi.- Se acercó Eduardo sentándose junto a mi en el tronco.

-Para nada, solo estoy cansada, ya sabes la escuela, las tareas y eso.- Le dije simple pero con ganas de gritarle CANSADA EMOCIONALMENTE Y POR TU CULPA.

-Oye, se que me vas a regañar.- Dijo avergonzado, ay no ¿A quien embarazo?. He estado hablando con Itzel.- Soltó y mi corazón se rompió más.
Itzel, su única novia "Oficial" habían terminado definitivamente hace dos años,según el por que la distancia no favorecía la relación de los dos, pero yo  sabía  que no era así, entre mujeres conocemos nuestras mañas, ella no era más que una interesada y estaba segura que está fachada de interés era por el nivel de fama que venía manejando Eduardo.

-¿Están hablando?.- Trate de que mi voz no sonara dolida, pero creo que no lo logré.

-Si, digo ya tiene dos años y ella me pidió vernos.- me contestó por lo bajo.- ¿Tú que crees?.-

-Que hagas lo que tú corazón te diga, mira los dos sabemos que la quieres y que siempre te lo dolió que ella te dejara, tal vez deberían de hablar.- Le dije con el dolor de mi corazón, pero yo sabía que eso era lo que él quería escuchar.

-¿Sabes que eres la mejor amiga del mundo?.- Un putazo dolía menos.- Por eso te amo.

Mire su felicidad, sabía que iba a durar poco pero mientras el esté feliz yo estaré feliz, de eso se trata la amistad ¿No?.

-¿Y ella?.- Le pregunté por la muchacha de pelo negro.

-Somos amigos nada más, ya sabes.- Se encogió de hombros, si ya sabía que clase de amigos.

-Ten cuidado Eduardo, sabes que si vuelves con Itzel tendrás que renunciar a todo esto.- Le advertí.

-Si mamá.- Se burló de mi y yo lo mire sería.- Ya se, ya se, déjame disfrutar lo ultimo de mi soltería.

Se paró y fue hacia ellos, me quede nuevamente sola observando cómo grababan y hacían sus ocurrencias, para eso ellos se pintaban solos.
Después de un rato se cansaron y nos fuimos de ahí, llegamos a comer algo al Ranch y llegamos a nuestro hogar dulce hogar.

Me tiré en el sillón en cuanto entre, sin darme cuenta que ellos también venían entrando.

-No seas huevona mija, párate.- Me regaño chiquete haciendo que me sentara como se debe en el sillón.

-Déjala wey está cansadita la muchachita.- Le respondió Eduardo y me abrazo.

Ay voy de nuevo, como Gorda en tobogán a sentir esas mariposas en el estómago, Eduardo ¿Es mucho pedir que no me emociones así?.

Mi hermano salió de la cocina con cervezas en mano, les repartió una a cada uno y tomó asiento.

-¿Que van a hacer ese fin?.- Pregunto.

-Yo valer verga.- Dijo chiquete con una sonrisa.

-Eso siempre.- Le dije, ya me tocaba.- Ya haz algo nuevo por favor.

-Mira tú pinché apestosa, cállate.- me respondió y reí por el apodo.

-Déjamela en paz.- Le dijo Marco.

-A la verga ya salió el novio defensor.- Le respondió el.

Me quede en silencio, mi hermano me puso cuidado y Víctor soltó una carcajada haciendo que yo también soltara una un poco fingida.

-Verga ya digan bien, hay que ir de ruta ¿No? Ya hace falta.- Comentó Víctor sacándome de apuros.

-Simon yo jalo hasta donde dice empuje.- Le contestó Chiquete.

-¿Te apuntas?.- Me miro Eduardo y asentí haciendo que el sonriera.

Y así pasó la tarde hasta que obscureció por completo y cada uno se fue a su casa, bueno Víctor no, el se quedaría por hoy con nosotros, mañana se iría al Tamarindo temprano y volvería el viernes por la noche.

Subí cansada a mi cuarto, hace algunos pendientes y los subí a la plataforma.
Puse a cargar mi teléfono, mire mi bandeja de entrada y un mensaje de Javier apareció en el.
Mi confusión fue mucha, Javier era un compañero de la Universidad, nunca hablamos por ello mi confusión.
Abrí el mensaje.

-"Fer, soy Javier, no se si me tengas registrado, tome tu número del grupo, espero no te moleste".- El mensaje había sido enviado desde las siete, supuse que no tenía caso contestar, ya le abran pasado la tarea.

Agarre mis cosas de aseo personal y me metí a bañar para poder descansar como dios manda.

Al día siguiente fue la misma rutina, iba tarde como siempre aunque no hiciera nada por las mañanas pero me encantaba dormir más de lo necesario.

Iba sumida en mis pensamientos, choque con alguien todo por ir de boba.

-Perdon, no te vi.- Dije alzando la vista y encontrándome a Javier frente a mi.

-No te disculpes, debí suponerlo, tienes los audífonos puesto.- Dijo quitando uno de mi oído.- Ayer te envié un mensaje, me dejaste en visto.- Mencionó y asentí.

-¿Conseguiste la tarea?.- Le pregunté.

-¿Había tarea?.- Pregunto confundido .- No era para eso, quería platicar contigo.

-¿Conmigo?.- Ok esto no era normal, empecé a caminar nuevamente con el a un lado.

-Si contigo, quería invitarte a salir..- Pare en seco ¿Esto era una broma?.

-Mira Javier con gusto te paso la tarea de Dávalos pero no pongas esas excusas ¿Va?.- Le dije molesta sacando una hoja de mi carpeta y entregándosela.

-Cuando termines de copiar, me la das.- Avancé con paso rápido al salón.

El no tenia que buscar excusas para pedirme trabajos, yo conocía como se las gastaban.

"MAS QUE AMIGOS" (Markitos Toys) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora