Capitulo 57

548 11 0
                                    

Justin posó su oreja sobre la última puerta. Sonidos diferente se escucharon ahí, a diferencia de las otras habitaciones, sabía que esta sí estaba ocupada por alguien. Así que no lo pensó de nuevo y golpeó fuerte aquella puerta con el pie derecho, haciéndola retumbar. Pero no funcionó. Lo hizo de nuevo, con la misma velocidad y fuerza. Y aquella puerta terminó por caer hacia adentro.

Se quedó sin aliento al observar la escena que veían sus ojos.

Sofia estaba en brazos de Max, que la cargaba mientras ambos observaban el horizonte.

Justin tuvo ganas de vomitar. Jamás había sentido tanto odio y repugnancia por alguien. Jamás había sentido tantas ganas de asesinar a alguien como en ese momento sus impulsos le ordenaban. Tenía a su chica, a su hija, en sus brazos, meciéndola y hablándole como si de los mejores amigos se tratasen.

- Oh, mira quien ha llegado. – le dijo Max a Sofi, que volteó de inmediato hacia Justin.

- ¡Papi!

+++

Corriendo hacia el segundo piso, un grito desesperado se escuchó tras los tres. ______ se volteó de inmediato al reconocer aquella voz.

Emily corría escaleras arriba, tratando de alcanzarles. Había una expresión de horror y desesperación en su rostro, que ______ pudo descifrar al tenerla cara a cara.

- ¿Qué haces aquí? – preguntó Travis, casi en gritos.

Ella lloraba y abrazó a ________, cayéndose en sus brazos. _________ tuvo que agarrarla fuerte para evitar que se lastimara.

- Sofia… - susurró Emily, con los ojos semi-abiertos. Lucía demasiado cansada. Y es que había estado buscando a Eli por todo aquel inmenso bosque que estaba afuera. – Se… se fue…

+++

- Has llegado justo a tiempo. – Max sonrió hacia Justin, que le miraba con una expresión desairada. Deseaba tanto matarle.

- Quítale las manos de encima. – le ordenó Justin, todavía apuntándole con el arma.

- ¿Por qué no bajas ese juguete? No creo que tu hija quiera ver esto.

- Quítale. Las manos. De encima. – volvió a pedir él, con la voz dura como una roca. Jamás había estado tan cabreado en toda su vida.

- Tranquilo, muchacho. – Max alzó los hombros. – Tu papá está algo exaltado hoy. – le dijo a Sofi, que desde que había visto a Justin, había intentado zafarse de Max, pero este la tenía cogida demasiado fuerte.

- Ya estoy aquí. Ahora suéltala.

- He esperado tener frente a frente desde hace mucho tiempo.

Justin ladeó la cabeza.

- ¿Quieres vengarte? – arqueó una ceja y su rostro de inmediato hizo una mueca burlona. - ¿Vengarte porque _________ y tú nunca pudieron tener nada? Eres patético. La misma mierda patética de siempre.

- De siempre… - Max asintió, sintiendo esas palabras en lo más profundo de él.

- Ya me tienes. Suéltala, déjala libre, ella no tiene por qué pagar por todo esto.

- Vale… vale… - Max soltó a Sofia, colocándola sobre el suelo. La niña corrió a pasos rápidos hacia su padre. De inmediato le abrazó un pierna, colocándose detrás de él.

- Ahora dime dónde está _________. – ordenó Justin una vez más.

Max sonrió.

- No lo sé.

- ¡Dime donde está!

- No lo sé… - volvió a decir Max, negando con la cabeza. – Te lo juro… - dijo ahora con una sonrisa en los labios, que hizo que sus palabras sonaran poco creíbles. - ¿Vas a matarme ahora que tienes lo que quieres?

Justin rozó el gatillo con sus dedos.

- ¿Así como mataste a nuestro padre?

Con el cuerpo tenso, Justin frunció el ceño. ¿Pero qué…

- ¿Lo has olvido ya, Justin? – Max levantó la voz, casi en gritos, empezó a moverse de un lado a otro en medio de la habitación, sin perder aquella inmensa sonrisa perversa. – Soy un maldito esquizofrénico. – sonrió plácidamente. Justin tragó saliva. – ¿Acaso me has olvidado? – la mirada de Justin se perdió en medio de muchísimos recuerdos. No… No… ¡No! - ¿Has olvidado aquella estación de tren donde Nicholas Bieber me dejó?

- ¡Basta! – gritó Justin, con fuerza, esta vez no tuvo reparo en querer apretar el gatillo del arma.

- ¿Has olvidado cuando te golpeé, porque eras el favorito de papá? – arqueando una ceja, Max miró a Justin fingiendo una ternura que luego pasó a convertirse en odio puro. – Mátame, y matarás a la única familia que te queda.

- Tú no… no… tú no eres…

- Mátame y matarás a la única persona que conoce donde he puesto la bomba que tenía tu querida hija.

+++

________ y Travis corrían escaleras arriba. Chaz en cambio se había quedado cuidando a Emily, que tardaría en reaccionar por lo menos unos minutos.
Ambos se detuvieron al llegar al último piso, el número cuatro.

- No quiero que entres. – le ordenó Travis a __________.

- Debes estar bromeando. – le respondió una __________ furiosa.

- No sabes lo que puede haber ahí aden…

- ¿Crees que tengo tiempo para esto? No tengo una maldita idea de donde está mi hija, no sé si Justin está bien, mi mejor amiga está muriéndose y un jodido sicópata dice ser hermano de…

Travis abrió la boca.

- ¿Hermano de quién? – preguntó, mirando a _________ detenidamente.

- Larga historia.

- ¿Podrías dejar de resumir todo con esas palabras?

- Ahora no. – ella caminó decida, paso a paso hasta lograr observar la última puerta del pasillo totalmente derribada. – Joder… - exclamó. Imaginándose lo peor. – Es ahí.

Travis observó también la puerta derribada, supuso entonces que Justin estaba ahí. Antes de que ambos pudieran correr hacia aquella habitación, un disparo se escuchó desde ahí.

A ___________ se le enfrió el corazón.

Tentation 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora