Sonrisas

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Kakashi llegó después de una semana de misión, esta vez, dejó su olor por toda la casa, se aseguró de que Tenzou estuviera realmente cómodo y durmió en el nido para que se sintiera menos solo.

-¡Senpai!.- Tenzou estaba en la cocina, así que brinco emocionado al ver que su alfa al fin llegó, dejó lo que estaba haciendo a un lado y fue directo a abrazarlo de forma cariñosa mientras aplastaba un poquito su pancita contra Kakashi.

-¿Como has estado cariño?.- Kakashi pregunto mientras olfateaba el olor del omega, al también necesitaba su fragancia.

-B-bien ¿Estas muy cansado?.- Tenzou se despegó del albino pero mantenía el contacto visual.

-No, de hecho no, vengo muy fresco.- Le sonrío al contestar.

-Es que, tenemos que hablar de algo.- Dijo nervioso cambiando la atmósfera del momento.

-Uh.. si, claro, dime.- Kakashi trato de no alarmarse con eso.

-¿Podemos ir al sillón?.- Señalo la pieza café que estaba en la sala.

Claramente se escuchaban las tonalidades nerviosas y asustadas del castaño en su voz, era obvio que sería algo grande, quizás de peligro ¿Un engaño? No, definitivamente no, él no era así ¿Entonces qué era?. Tenzou se sentó y Kakashi junto a él, por alguna razón no le estaba dando la mirada.

-Si.. ehm..  son, son dos cositas rápidas Kakashi.- Respiraba lento pero cortado.

Kakashi puso una de sus en su muslo para que sentirá un poco más a gusto.

-Dime.-

-Bien, esta semana fui al ginecólogo, ya sabes, las citas mensuales.- Empezó a mover sus manos tratando de explicar un poco más el asunto.- Y.. me dijo algo, no es mucho pero.- Volvió a respirar hondo y Kakashi veía lo asustado que estaba.

-Si, ¿Qué dijo?.- Kakashi hizo lo posible por ver a la cara al omega.

-Dijo, que por mi retraso de presentación, por mi edad y por los problemas que tuvimos, estoy pasando por un embarazo de alto riesgo.- Tenzou esbozo su boca mientras una lagrimas salían de sus ojos.

-Oh..- Kakashi arqueo su ceja descubierta y rápido abrazo al pequeño niño asustado.

Había leído su libro secreto sobre los omegas, y al parecer, Tenzou apenas dejó de ser un cachorro, ni si quiera había comenzado la etapa adulta, en este tipo de edad, se busca la mayor atención posible de sus alrededor, pero Tenzou jamás necesito atención de más, y si a eso le agregas que esta embarazado.. Kakashi estaba aprendido a consentir a las personas muy bien.

-Y después.- Se alejo del albino, pues aun no terminaba. Trataba de secarse las lágrimas para que no estorbaran mucho.- Yo solo quería salir por manzanas, yo solo quería manzanas, pero cuando estaba en el pueblo.- Volvió a callarse y la piel de Kakashi se puso helada.

-¿De qué hablas Tenzou? ¿Qué paso?.- Puso sus manos sobre sus hombros mientras el rostro del castaño se hacía más miserable.

-Estaba caminando y Kinoto me encontró.- Dijo tratando de secar las lágrimas que no dejaban de salir.- Y-yo no pude ocultar mi embarazo y..- Levanto la mirada para ver mejor a Kakashi, sus ojos grandes guardaban miedo.- ¿Y si le dice a Danzou? ¿Y si me quitan a mi bebé?.- Sus labios temblaban y su nariz roja se ponía.

-¿Qué? No, no, no, eso jamás pasara cariño, jamás, no dejaré que nadie se acerque ni a ti, ni a nuestro hijo ¿Si? No va a pasar nada, absolutamente nada, en serio.- Trataba de hablar con toda la calma posible, pero era inevitable descartarlo como posibilidad.- Los protegere con vida ¿Entiendes?.- Tenzou asintió contra su pecho temblando de miedo.

Hermosa Belleza- Kakayama-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora