𝐵𝑎𝑏𝑦, 𝑊𝑒 𝑀𝑎𝑑𝑒 𝐼𝑡 // 𝙻𝚊𝚛𝚛𝚢 𝚂𝚝𝚢𝚕𝚒𝚗𝚜𝚘𝚗

//𝑡𝑟𝑒𝑐𝑒//

-¿Mamá?- preguntó ya que respondió el celular sin fijarse quien era.

-¡Dónde estás William Tomlinson!- odiaba que lo llamara así. -Llamé a la escuela para preguntar por qué te demorabas tanto en llegar y me dijeron que te fuiste con alguien ¡antes del almuerzo! ¡Ven ahora mismo!- Louis rodó los ojos, no se quería ir.

-Ya voy mamá- dijo con un tono de molestia, cortó y giró sobre sus talones hacia Harry, este lo miraba atento, había recogido la camisa y se la había amarrado en la cintura, igual que como la traía antes de llegar. -M-me tengo que ir- bajo la mirada y Harry se acercó.

-Te llevo- dijo cerca de Louis y este asintió, sonriendo inconscientemente.

-Oh déjame aquí- dijo Louis cuando iban llegando a su casa.

-¿Por qué aquí y no en tu casa?- preguntó bajando la velocidad.

-Porque si mi mamá te ve me va a obligar a presentarte y después va a decir que no quiere que me junte contigo por haberme ido contigo y bla bla bla- Harry rió y paró el auto.

-Está bien- dijo el rizado casi en un murmuró y Louis abrió la puerta del auto, antes de salir se giró para mirar a Harry.

-Gracias por dejarme estar contigo y emm traerme- dijo el castaño inseguro y Harry negó con una sonrisa.

-Está bien enano, nos vemos- Louis sonrió. Se empezaba a acostumbrar al apodo.

-Adiós- susurró.

No se quería ir, quería estar con el rizado, ir a cualquier lado pero con él no sabía por qué pero quería, se contuvo, quizás Harry no quería estar con él y... su madre probablemente lo mataría por no llegar.

Harry quería que el castaño se diera la vuelta, subiera al auto y fueran a cualquier lado, pero... Louis no lo hizo y él tampoco iba a hacer algo al respecto.

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-¡¿Dónde estabas?!-

-Hola mamá, estoy bien ¿y tú?- dijo el castaño con sarcasmo. Con suerte había entrado a la casa y su madre ya le estaba gritando.

-¡Louis Tomlinson! No me vengas con tus jueguitos, ¿Donde estabas?- Louis sólo rodó los ojos. -No me pongas los ojos Louis, ¡¿con quien andabas?!- el castaño resopló, su madre era una dolor de cabeza algunas veces.

-¡Con nadie mamá!-

-Bueno si no me quieres decir, estas castigado, no vas a salir de fiesta por dos semanas y vas a venirte directo a la casa luego de la escuela- dijo Johannah cruzando sus brazos.

-¡Ya hacia eso!- reclamó el oji azul.

-¡No me grites o te agrego otra semana!-
Louis rodó los ojos y se dirigió a la escalera haciendo mucho ruido con sus pies. -Y no quiero que te juntes más con Niall- dijo la mujer con un tono más tranquilo, Louis paró de golpe y se giró a ella.

-¡¿Qué?!- sus ojos se empezaban a llenar de lágrimas.

-Desde que lo conociste cambiaste, vas a fiestas y llegas tarde, y ahora te arrancas de la escuela con ¡quién sabe quien!-

-No voy a dejar de juntarme con Niall- dijo con la voz en un hilo.

-Oh ¡si lo harás! Soy tu madre y me tienes que hacer caso- dijo señalándolo con su dedo índice.

-¡No!- gritó y rompió en llanto, quería decirle a su mamá que Niall había sido el primer verdadero amigo que tenía, que se preocupaba por él y lo quería pero no pudo por culpa de su llanto.