𝐵𝑎𝑏𝑦, 𝑊𝑒 𝑀𝑎𝑑𝑒 𝐼𝑡 // 𝙻𝚊𝚛𝚛𝚢 𝚂𝚝𝚢𝚕𝚒𝚗𝚜𝚘𝚗

//𝑡𝑟𝑒𝑖𝑛𝑡𝑎 𝑦 𝑛𝑢𝑒𝑣𝑒//

Se acercó a la puerta con la misma cara de tristeza que llevó toda la semana y la abrió.

Realmente no se lo esperaba pero ahí estaba. Harry.

El rizado luego de ser obligado a tomar un café amarguísimo y ser empujado hasta la calle, se convenció de ir a hablar con Louis.

Harry observó a Louis cuando abrió la puerta, se veía triste, desanimado, eso lo hizo ponerse un poco nervioso. El castaño abrió un poco la boca sorprendido y Harry miró al suelo.

¿Un minuto había pasado? Ninguno decía nada, Louis estaba apoyado en la puerta mientras miraba a Harry, el cual se veía muy nervioso, estaba jugando con sus manos.
Tomó una bocanada de aire y habló.

-Yo...- dijo nervioso mientras se rascaba la nuca. -Emm, yo...vine porque... emm- tartamudeaba mirando hacia cualquier lado menos Louis, este lo miraba atento, nunca había visto a Harry tan nervioso. -Vine porque...- suspiró y murmuró un "Mierda". -Perdón- dijo rápido y mirándolo por unos segundos. -Perdón, fui un imbécil- dijo volviendo a mirarlo.

Louis lo miró atento, no dijo nada, aun que por dentro estaba gritando ¡Harry está pidiendo perdón!
El rizado tomó una gran bocanada de aire.

-Te extraño- soltó rápido y Louis se sorprendió ¡¿Él en serio dijo eso?! -Fui un imbécil, perdón, te extraño-

¡Y lo dijo de nuevo! Louis iba a explotar.

-Yo debería haberte explicado y- no terminó de hablar porque Louis prácticamente se tiró encima de Harry y lo besó, se separó para mirarlo a los ojos.

El verde se encontró con el azul, Harry agarró las mejillas del menor mientras que este estaba abrazado a su cuello.

-También te extraño- dijo casi en un susurro y Harry sonrió, y lo besó.

Louis ya no quería que Harry hablara, con eso le bastaba, el rizado agradecía que hubiera sido así ya que quería arreglar todo y no sabía que más decir. Nunca pide perdón así que....

Se besaban con deseo, habían estado cuatro días sin dirigirse la palabra y parecía que llevaban años sin besarse.
Louis comenzó a tirarlo más hacia él, eran cuatro días sin hacer nada, se había acostumbrado a tenerlo cerca todos lo días, se había acostumbrado a hacer cosas que no se deberían hacer en la escuela y menos en un cuarto de aseo.

Louis comenzó a caminar hacia atrás, para entrar a la casa, Harry lo agarraba de la cintura con fuerza y antes de entrar, Harry dejó de caminar.

-¿Tú mamá?- preguntó en el beso. No quería encontrarse con su madre quería estar con el castaño, lo extrañaba, no se quería alejar.

-No está, llega tarde-

Harry sonrió y siguió besándolo mientras entraba y cerraba la puerta con el pie.
Lo pegó con fuerza contra la pared que estaba al lado de la escalera y Louis jadeo, le gustaba cuando Harry se ponía brusco.

Harry introdujo su lengua y Louis de inmediato comenzó a mover la suya, haciendo que sus lenguas danzaran.

El castaño alejaba un poco su cadera de la pared para hacer fricción pero Harry lo volvía a pegar con fuerza contra la pared, el castaño se volvía loco.
Louis se separó un poco y el rizado supo de inmediato que quería que lo tomara, lo hizo y lo volvió a pegar contra la pared, el menor gimió muy bajito en el beso y eso hizo que Harry se calentara más, todo lo que hacía el otro lo encontraban perder.

Luego de un rato así, Harry se alejó un poco y lo bajó, empezó a guiarlo para subir la escalera sin dejar de besarse, cuando llegaron a la habitación Louis empujó a Harry contra la puerta, todo sin dejar de besarse, Louis se sentía en las nubes, estaba más que excitado y bueno Harry también le encanta cuando Louis intenta tomar el control.
Luego Harry empezó a caminar hacia la cama, quedando encima del menor pero con cuidado de no aplastarlo, Louis abrió sus piernas para que Harry se colocara entre medio de estas lo cual hizo e inconscientemente se comenzaron a mover para generar fricción.