𝐵𝑎𝑏𝑦, 𝑊𝑒 𝑀𝑎𝑑𝑒 𝐼𝑡 // 𝙻𝚊𝚛𝚛𝚢 𝚂𝚝𝚢𝚕𝚒𝚗𝚜𝚘𝚗

//𝑣𝑒𝑖𝑛𝑡𝑖𝑢𝑛𝑜//

Esto no era una película, ni un libro, era la realidad y no le veía un buen futuro a esto.

Louis y Harry salieron por la parte de los estacionamientos de los profesores, un profesor por poco los ve y cuando estuvieron fuera, Louis empezó a sentir arrepentimiento. Su madre se iba a enterar y lo iba a castigar de por vida, estaba seguro.

El día estaba horrible, en cualquier momento se ponía a llover, eso tampoco ayudaba al entusiasmo de Louis.

Odiaba los días nublados y lluviosos, le traían recuerdos, le daban nostalgia, sólo quería dormir y llorar.

Por otro lado a Harry le gustaban bastante, podía andar con sudaderas o chaquetas de mangas largas, no era necesario andar con sus estúpidas pulseras para que no se vieran sus cortes.

Empezaron a caminar sin una dirección, sólo caminaban en silencio, con un Louis muerto de frío.

-¿A dónde vamos a ir?- preguntó el castaño abrazándose.

-Tienes frío- dijo el rizado ignorando su pregunta.
Louis asintió inseguro, ¿Por qué nunca traía chaqueta si era tan friolento?

El rizado se acercó y pasó un brazo por los hombros de Louis, no era como que le abrigara mucho a Louis, pero era mejor que antes y el castaño lo agradecía.

Siguieron caminando y Harry lo iba guiando. El castaño ya conocía el camino, iban a "Fridays" Louis de verdad agradecía por haber ido allí y no a la colina o otro lugar, tenía frío y ese lugar tenía calefacción y chocolate caliente.

Entraron y vieron que no estaba muy lleno, se sentaron en una mesa que daba hacía una ventana. Harry esta vez se sentó al lado de Louis y no lo dejó de abrazar en ningún minuto.
Harry pidió un cafe y donas, el castaño sólo pidió un chocolate caliente y el rizado sonrió cuando lo escuchó pedir lo que quería, era jodidamente tierno o eso pensaba Harry.

El castaño se acomodó en los brazos de Harry, se podría dormir ahí y no le molestaría.
Revisó su celular en caso de que su madre ya se hubiera enterado pero no tenía ninguna notificación, guardó su celular en su bolsillo y miró a Harry, este le devolvió la mirada.

-¿Qué pasa enano?- preguntó pero no de esa manera burlona si no, una más... ¿amorosa?.

-Tengo miedo- confesó bajando la mirada. Tenía vergüenza. No quería decirlo, menos a Harry pero sólo, lo soltó. Espero de verdad una broma, pero, no.

-¿Por?- preguntó el rizado mientras le peinaba el flequillo al menor, este se sonrojó un poco.

-Si mi mamá se entera, algo que si hará definitivamente, me va a castigar por el resto de mi vida- dijo bajito mientras que Harry lo escuchaba atento.

-Si quieres te puedo llevar a tu casa y decir que yo te obligué- dijo el rizado con una sonrisa y el menor sonrió mientras negaba.

-Imbécil- susurró con una sonrisa y Harry abrió su boca haciéndose el indignado.

-Estoy ofreciéndome para que el que muera sea yo y no tu, y ¿así me pagas?- el rizado dijo irónico con una sonrisa y el menor sonreía.

Lo que pidieron llegó así que se separaron un poco, no mucho para tomar sus cosas y comieran, bueno, Harry comiera.

-¿Después puedes acompañarme a mi casa?- preguntó Louis inseguro, Harry lo miró. -No te haré hablar con mi mamá, lo juro- dijo antes de que el rizado hablara y este rió bajito.