𝐈𝐌𝐀𝐆𝐈𝐍𝐀𝐒, calum hood

（ ６６ ： "ＹＯＵ'ＲＥ ＭＩＮＥ" ）

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— ¿Así que no tienes nada más que decir? — Espetó Calum con enojo una vez la puerta de vuestra casa fue cerrada a sus espaldas. Vuestra noche había comenzado bien, ambos habíais salido con unos amigos de fiesta y habíais estado pasando un buen rato hasta que Calum vio algo que no le acabó de gustar del todo.

Habías ido a la pista de baile con tus amigas mientras Calum se quedaba en la mesa, admirando como tu cuerpo se movía al ritmo de la música a la vez que tomaba algún que otro sorbo de su bebida.

Todo iba bien hasta que alguien se acercó a ti con una sonrisa de oreja a oreja, mirando tu cuerpo de arriba a abajo. Estabas bailando con tus amigas cuando se acercó, una sensación de incomodidad haciéndose presente en tu estómago al notar como cada vez se acercaba más a ti.

— Hola, preciosa. ¿Te importa si bailo un rato contigo? — Preguntó. Diste un paso hacia atrás al ver la sonrisa del desconocido, tus amigas no habiéndose dado cuenta de tu ausencia mientras dabas otro paso hacia atrás, chocando con una pared.

— Yo uh- tengo novio. — Tartamudeaste, tus ojos abandonando al hombre para tratar de buscar a Calum con la mirada, encontrándolo riéndose con sus amigos mientras bromeaban. Diste un paso para apartarte pero te detuviste en seco al ver como el hombre se recostaba contra la pared, bloqueando tu paso y tu vista hacia Calum.

— Pero yo no lo veo por ninguna parte. — Sonrió casi de forma malvada, levantando una mano para apartar un mechón de cabello de tu rostro. Tragaste saliva de forma nerviosa, tratando de apartarte del hombre para volver con tu novio.

— Bueno pues está aquí, así que por favor muévete. — Dijiste, dándole un empujón para marcharte pero siendo detenida por una mano agarrando tu muñeca. Una ola de dolor se apoderó de la zona a la vez que un par de manos desconocidas rodeaban tu cintura. — ¡Suéltame! — Trataste de gritar sobre la música, volviendo a deshacerte de su agarre y mirando con incredulidad su horrorosa sonrisa.

— Hey, ¿cuál es el problema, muñeca? — Preguntó mordiendo su labio inferior y volviendo a dar un paso hacia ti, sus dedos moviéndose para acariciar tu mejilla mientras tú lo mirabas con terror en tus ojos. Los labios del hombre se separaron para volver a hablar pero antes de que pudiera hacerlo alguien le interrumpió.

— El problema es que ya tiene novio.

— ¿Qué más quieres que te diga, Calum? ¡No he hecho nada malo! Él fue quien me empezó a hablar y yo traté de irme. ¡¿Por qué mierda no me crees?! — Gritaste, lágrimas comenzando a formarse en tus ojos mientras observabas a Calum, sus ojos llenos de rabia y su ceño fruncido mientras su mandíbula estaba todo lo apretada que podía estar.

Humo salía de sus orejas al verte con un hombre totalmente desconocido, su celosía sacando lo peor de él mientras os veía a través de la sala.