El día a diferencia de otros era cálido, algo un tanto extraño después de tantos días de lluvia.
¿Qué está haciendo ese niño? - se preguntó la pequeña viendo como el oji-negro veía una pequeña planta con sus mejillas un tanto sonrojadas.
¿Un deseo? - se preguntó mientras recordaba lo que su medre le había dicho.
-Está pequeña planta se llama diente de león, si la soplas mientras pides un deseo se te cumplirá- al momento de acabar de decirlo le extendió aquella planta pero antes de poder tomarla una fuerte ráfaga de viento se presentó, volándola.
El pequeño solo se quedó viendo por donde se había ido, su madre al ver la expresión de su hijo solo sonrió - No es el momento para que pidas tu deseo, Sasuke, cuando la veas otra vez vuelve a intentarlo - se limitó a asentir mientras seguían su camino hacia su casa - Cuando sea el momento.
Y ahí se encontraba, estaba frente a un diente de león y...no sabía bien que pedir. ¿En verdad me cumplirá el deseo? - se preguntaba el niño mientras lo veía atentamente, sin poder evitarlo la sonrisa de una peli-café se puso en su mente. Quiero saber por qué me causa curiosidad - pensó el niño decidido - Deseo saber... el por qué me causa tanta curiosidad - y así como término de decir esas palabras soplo la pequeña planta.
La mirada de la niña se dirigió donde los pelos del vilano danzaban en el aire, estaba asombrada, sabía de la existencia de esa planta pero no sabía que se podía hacer algo como eso.
Al dirigir su mirada al frente pudo ver como el Uchiha ya no estaba, con curiosidad se acercó a aquel lugar para ver si encontraba aquella planta pero para su desgracia no había nada.
Estaba confundida, ¿Qué era lo que ese niño le dijo a esa pequeña planta? - se preguntó recordando como decía algo que fue inaudible para ella.
Y así fue como por primera vez ella sintió curiosidad por el azabache, el cual nunca supo que ella estaba escondida detrás de un árbol observándolo.
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Curiosidad... (Sasuke y tú)
FanfictionTodos la conocen pero nadie la conoce. Ella es como una pieza de un famoso museo, la puedes admirar pero no la puedes tocar. ¿Qué pasa por su mente todos los días? - esa pregunta es la que siempre atormentaba a un pequeño niño, curiosidad