- Oigan, chicos - estos al instante voltearon hacia donde se encontraba _______. En su mano derecha tenía una pequeña hoja por lo que dedujeron que era para ver si encontraba dichos libros en la biblioteca - Voy a salir, ¿Quieren algo, un postre o algo? - preguntó la pelinegra mientras se levantaba de su silla. El rubio que anteriormente estaba entrenando lanzamiento de shuriken en una pared especial que la chica hizo abrió la boca pero ella al instante lo interrumpió - Que no sea ramen instantáneo - al instante el rubio se cruzó de brazos y miró a otra parte indignado.
- Unas papas - dijo simple el azabache sin despegar la vista de su libro. _______ asintió al saber ya a cuáles se refería miro el rubio pero este seguía indignado por lo que simplemente lo ignoró y se fue.
- Me ignoró...- hablo sorprendido. El Uchiha sonrió de lado.
- Deberías de preocuparte más por tu entrenamiento que por ella, Dobe - dijo egocéntrico el Uchiha mientras veía como pocas veces le había atinado al centro. Naruto lo miró con el ceño fruncido formando así una pelea.
[...]
La chica se encontraba en la gran biblioteca de Konoha. Su mirada viajaba por los grandes estantes de libros, al menos para ella eran enormes. Encontró dos libros de ficción y solo un libro de Anatomía de tres que necesitaba, agradeció encontrar ese ya que hablaba mayormente de chakra, que era lo que a ella le interesaba. Siguió buscando, pero no tuvo éxito alguno. Rendida se dirigió con la bibliotecaria aparentando ser una chica de 23 años, ya que al parecer confiaban más en un adulto que una niña. La bibliotecaria aburrida se limitó a poner sellos y registrar los libros que fueron llevados.
[...]
- ¿Por qué tardaste mucho, ______-chan? - dijo el rubio cruzado de brazos. Al instante que escuchó el sonido de la puerta salió del cuarto, donde se encontraba aquella pared especial, para quejarse del Uchiha - El Teme de Sasuke estaba insoportable - El nombrado se limitó a darle una mirada fulminante que él no dudo en regresar.
- ¿No pudieron escoger otro día para pelearse? - pregunto fastidiada la Utakama mientras dejaba sus nuevos libros en su escritorio. Bostezo mientras dejaba las compras en la mesa. Al instante los dos chicos bostezaron causando una risa en la menor - Ten tus papas, Sasuke - dijo mientras que le lanzaba dicho producto - En el refri vi una lata de refresco, aunque no se si Naruto ya se lo tomo - dijo mientras se encogía de hombros el Uchiha se levantó dispuesto a ir al refrigerador.
El rubio fue a su lado para ver si le había traído algo. La niña al instante soltó un suspiro mientras que le extendía un ramen instantáneo de edición limitada sin mirarlo al saber que ella había perdido ante el rubio. Él se limitó a tomar el envase rápidamente y abrazar fuertemente a su amiga recibiendo quejas de ella. Él se fue corriendo a hervir agua mientras que ella abría una cajita de plástico donde se podía apreciar un pequeño pay individual.
Sus amigos al llegar nuevamente a la sala apreciaron como esta comía haciendo muecas de satisfacción al comer de aquel postre. Ambos habían descubierto que no le gustaba los pasteles, ni lo dulce, aunque el chocolate era la excepción, al igual que el pay, y aún más si este era de limón.
Sasuke al salir de la cocina se dió cuenta que _______ se encontraba sentada en el sofá. Sin poder evitarlo se debatió mentalmente si hacerlo o no.
Anteriormente ya se había usado las piernas de la pelinegra como almohada, esa vez estaba con los nervios de punta, y lo más valiente que se le ocurrió fue fingir que no le había tomado importancia y solo quería dormir. En todo el tiempo que estuvo ahí pudo sentir la mirada de la menor sobre él.
Suspiro y se encaminó a dónde se encontraba la chica, ni siquiera le dirigió una mirada, simplemente tomó el libro que se encontraba en el sillón y se recostó en él, usando las piernas de la oji-café como almohada otra vez.
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Curiosidad... (Sasuke y tú)
FanfictionTodos la conocen pero nadie la conoce. Ella es como una pieza de un famoso museo, la puedes admirar pero no la puedes tocar. ¿Qué pasa por su mente todos los días? - esa pregunta es la que siempre atormentaba a un pequeño niño, curiosidad