Detalles de misión

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Un suspiro salió de los labios del recién llegado. Ya habían pasado dos días desde que la pequeña se había ido, sin avisar, de su lado. Había cumplido su misión y ahora solo faltaba darle el reporte a Tsunade.

No tardó mucho en llegar a la Torre Hokage, por lo que al no tener pequeños distractores dedujo que su equipo estaba en alguna misión.

Tocó dos veces por respeto, aunque sabía que la mayor ya sabía que él se encontraba detrás de la puerta. Entregó el pergamino del informe de misión y cuando Tsunade ya esperaba que desalojara el lugar, un nuevo pergamino se hizo presente, una denuncia.

Sabía de antemano que su superior tomaría riendas en el asunto, después de todo, una mujer entiende más lo que paso la pequeña que un hombre con creencias antiguas, como lo era el Tercero. Lo más seguro es que el Hiruzen solo lo guardaría junto a las demás denuncias.

- Ese maldito idiota...

Esa era la Hokage actual, dispuesta a que hubiera un cambio.

[...]

No faltó mucho para que los tiempos no concordaran, y faltó mucho menos tiempo para que informaran el descubrimiento de los cuerpos sin vida de dos gennin, encontrados cerca de la pasada entre Konoha y Suna.

Una simple misión se volvió el enigma de la Hokage, sobre todo al encontrar el cuerpo sin vida de la persona protegida unos metros de distancia de dónde fue el enfrentamiento.

Los cuerpos fueron traídos y el escenario fue examinado a grandes rasgos. No hubo congruencia en los hechos y no hubo testigos de lo que paso en ese atardecer. Las huellas ya habían sido borradas ante el paso de los días. 

Tsunade suspiró ante todo el alboroto que estaban haciendo los familiares de los shinobis, diciendo que tenían que encontrar al culpable. El cliente, por otra parte, le reclamaba ante el incompetente trabajo.

Todo eso no era lo que realmente le interesaba, aunque todo ese alboroto ya llevara una semana. Lo que en verdad le daba dolor de cabeza era el cuerpo sin vida de la Utakama, lo encontraron putrefacto en la orilla de un río a varios kilómetros de distancia, era realmente irreconocible, solo que pudo identificar por sus huellas dactilares.

Los allegados a la pequeña llegarían mañana y ella tendría que darles la noticia.

[...] 

Entraron a la oficina, y la penetrante mirada de la Hokage los recibió. En la oficina de Lady Tsunade, se podían apreciar dos chicos con sus respectivos maestros (el Sennin con Naruto y el Hatake con Sasuke).

- ¿Qué es lo que pasa, Tsunade-obachan? - preguntó Naruto confundido por el ambiente tan tenso que se estaba formando.

Si bien la Hokage podía llegar a ser sería y más con el estrés de mantener una gran Aldea a salvo, de un tal vez un segundo ataque, y la poca economía que ahora tenía la Aldea, nunca tenía esa aura pensativa, o esa mirada dubitativa.

Parecía estar analizándolos, parecía que se encontraba reensayando lo que había estado practicando desde hace tiempo.

- Sasuke, Naruto, Kakashi...- los llamo con seriedad haciendo que se tensaran. - Utakama ______ y su equipo han sido asesinados en su misión anterior - Soltó de golpe mientras que los tres quedaron inmóviles. Simplemente, no podía irse por las ramas en temas tan delicados.

La oficina del Hokage quedó en completo silencio por unos segundos. Sin embargo, decidió proseguir - Las heridas que sus compañeros presentan en sus cuerpos, son heridas causadas por las técnicas de _______, eso significa que ella los atacó - relató con seriedad. Esa manera de matar era la que ella utilizaba, y por lo visto, la menor era su discípula.

Curiosidad... (Sasuke y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora