CAPÍTULO 16: CÁLLATE...

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          No es sorpresa saber que Camino esa noche prácticamente no durmió, la fiebre de Maite le había quitado por completo el sueño sumado a enterarse de quien era la verdadera artista de ese cuadro que tanto le había impactado y que no sólo se trataba de su amor, sino que el motivo de creación de tan exquisita pintura era la añoranza de no estar junto a su amada.

          Cumpliendo al pie de la letra, Camino se presentó (sola) en el hospital, Sophie tuvo que ausentarse debido a que las autoridades de L'ecole solicitaron tener novedades relacionadas con el estado de salud de una de sus profesoras más estimadas en la institución.

- Buenos días Camino con una sonrisa radiante la recibió Aurora. ¿Cómo se encuentra hoy?

- Buenos días Aurora, ojala tuviera una respuesta a su pregunta, pero para serle sincera la verdad es que no lo sé, la noche no fue muy buena con voz cansada le respondió Camino.

- Pues lo importante es que ha venido hasta aquí, eso es bueno remarcó la enfermera tratando de darle ánimos.

- ¿Cómo se encuentra Maite?

- Lo siento señorita, pero va a tener que esperar al Dr. Loygorri para que él la ponga al tanto. Yo recién he comenzado y ya tengo un lio con los historiales que me han retrasado bastante en mis labores. Así que si me disculpa...

          Aurora se retiró con el montón de historiales que cargaba encima y Camino se ubicó en la que ya era su banca a esperar la llega del Dr. Loygorri. La espera se volvió lenta, los segundos parecían minutos y los minutos parecían volverse horas. Camino comenzaba a inquietarse, sin embargo, la ansiedad de esperar se transformó en expectativa cuando vio al galeno terminar de subir las escaleras con su bata blanca impoluta.

          Camino ya se encontraba de pie cuando Cristóbal llegó hasta ella. La ansiedad la hizo levantarse de un impulso.

- ¡Buenos días doctor!

- Buenos días Camino, ¿Cómo se encuentra? quiso saber el médico.

- Algo mejor, pero no mucho. ¿Tiene alguna novedad sobre Maite? ¿Sigue con fiebre?

- La Srta. Zaldúa está respondiendo favorablemente a la medicación y hemos logrado que la fiebre desaparezca.

           Llevando su mano al pecho y exhalando un suspiro de alivio Camino se alegró por la buena nueva que Cristóbal le acababa de compartir. El galeno quiso aprovechar que estaba a solas con ella y hablar un asunto en privado.

- Camino, si no le importa, quisiera conversar con usted un par de asuntos importantes.

- Si, doctor, dígame de que se trata.

- Venga conmigo

          Cristóbal le pidió que le siguiera hasta su consultorio, le hizo tomar asiento mientras él cerraba la puerta para tener mayor privacidad y evitar recibir interrupciones. Camino comenzó a sentir temor porque desconocía de qué se trataban esos asuntos que el médico quería conversar con ella.

          Sentados frente a frente, Cristóbal se apoyo sobre el escritorio y tomó la posta.

- Señorita Camino, la razón por la que quiero conversar con usted es porque he observado algunos comportamientos en usted que me han generado ciertas dudas y quiero que por favor sea honesta conmigo y me diga la verdad.

          Camino experimentó un frío que le recorrió todo el cuerpo, desde la cabeza hasta los pies.

- No le comprendo con voz temblorosa se manifestó Camino.

"Maite & Camino" Siempre nos quedará París...Cartas Maitino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora