Maite está en la cárcel acusada por escándalo público, una acusación falsa y que todo indicaría que Felicia es quién está detrás de toda esta treta.
El matrimonio de Ildefonso y Camino está condenado al fracaso, él tiene una herida física irremediab...
Camino se ahogó levemente cuando Sophie develó de debajo de la mesa el sobre y se lo dio a Maite quien se le entregó el sobre. No se lo esperaba y tampoco entendía de qué se trataba.
Los tres invitados miraban atentamente como Camino cogía el sobre y lo abría. Dentro de él encontró una hoja blanca, pero con la poca luz que había en la habitación Camino no pudo ver en un primer momento qué decía.
Esforzando la vista, empezó a leer lo que el grueso papel decía y unos segundos después sus ojos se agrandaron, la mano que sostenía el papel empezaba a temblarle mientras que con la otra mano se tapaba la boca. La halagada española no podía creer lo que estaba leyendo en silencio.
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París diciembre de 1914.
Señorita Camino Pasamar:
Es un placer para mi informarle por medio de la presente que le ha sido concedida una beca completa para cursar en el programa de grado de la carrera de Bellas Artes en nuestra casa de altos estudios L'école d'art entre los meses de febrero a diciembre del próximo año.
Esperamos acepte la presente beca asumiendo el compromiso de cumplir todas y cada una de las cláusulas que dispone el código de nuestra honorable casa de estudios.
Sin ningún otro particular.
La saluda.
Atte.
François Moreau.
Decano
- ¡¿Esto es real!? riendo de nervios preguntó Camino a punto de dejar escapar lágrimas de alegría.
- Absolutamente confirmó Sophie tomando un corto sorbo de su bebida.
Camino tenía decenas de preguntas pero no lograba articular palabra alguna, era tal la emoción que quería salir de su cuerpo que simplemente miraba el papel y miraba a sus amigos aún sin poder creerlo del todo.
- Maite me comentó que te habías presentado al concurso así que decidí pedir ver tu portafolio ya que Maite me había hablado muy bien de tu trabajo y teniendo la oportunidad de corroborarlo por mí misma no dudé en hacerlo y déjame decirte Camino que Maite fue muy mesurada para describir tu talento.
Camino se volteó a ver a Maite quien la veneraba con la mirada y no podía dejar de sonreírle.
- ¿Esto ha sido idea tuya? le preguntó.
- Camino... se perfectamente cuál es tu talento y lo mucho que te apasiona pintar tomó la palabra Maite mientras le cogía de la mano a Camino. Así que le hable a Sophie sobre tu talento y tus aptitudes para la pintura para saber cuál era su opinión al respecto y como bien ha dicho ella he sido muy moderada al hablar de tu idoneidad para pintar, así que se me ocurrió... con el apoyo absoluto de Sophie claro, hablar con François, el decano, para que considerara darte una beca en L'école.
Camino se mordía los labios tratando de no ponerse a llorar en esos momentos a la vez que apretaba más la mano de Maite por la emoción que tenía.
- Así que con Sophie les llevamos tus dibujos al decano para demostrarle fehacientemente el increíble talento que tienes y hacerle ver que era un despropósito no concederte una beca en L'école. Como profesoras allí hemos visto alumnos que se esfuerzan arduamente casi toda su carrera intentando alcanzar una técnica que a ti se te da de forma natural y con una correcta formación vas a llegar a convertirte en una artista extraordinaria.
Maite respiró hondo porque la emoción empezaba a querer brotar y no quería ponerse a llorar.
- Así que este es nuestro regalo para ti, cielo
- En realidad interrumpió Sophie a Maite, el regalo es de Maite,todo fue idea suya yo simplemente estuve de apoyo técnico y moral reconoció dejando escapar un par de risas.
- Muchísimas gracias con la voz en un hilo dijo Camino.
Nicolás para levantar un poco el espíritu emotivo que se había colado entre ellos propuso un nuevo brindis.
- ¡Por Camino! exclamó alzando su Whisky.
- ¡POR CAMINO! repitieron todos tomando sus copas y chocándolas unas con otras mirándose a los ojos.
Al cruzar miradas con Camino, Maite se le acercó y le dijo en voz baja:
- Te dije que te merec... y Camino simplemente calló a Maite estrellando, apasionada y perdidamente enamorada, sus labios en los de Maite; sin consideraciones de las miradas de algunos curiosos de las mesas vecinas.
- Te amo Maite, contigo soy la mujer más feliz de la tierra le confesó susurrando a milímetros de la boca de Maite con sus frente apoyadas una contra la otra.
Pasaron un par de horas más en las que los canapés y las bebidas ya empezaban a tener sus efectos, así que los cuatro amigos decidieron volver a sus respectivos hogares.
Nicolás y Sophie se fueron tambaleando levemente hasta su coche tarareando jocosamente la Marsellesa mientras que Maite y Camino, riendo por el estado de embriaguez de sus queridos amigos, cogieron un taxi que las llevó hasta el departamento.
Este día se convirtió en el cumpleaños que Camino recordaría por el resto de su vida.
