Auron volvía con las manos en los bolsillos de la reunión. Tampoco se había enfadado tanto, solo un pequeño roce con ella... La odiaba, era oficial.
- Auron - Mara se paró enfrente de él impidiéndole el paso.
- Mara...- contestó el otro sin querer apartarla a empujones como normalmente hacia. No quería simplemente porque era su amiga, le tenía aprecio por mucho que fuese un ángel.
La chica sonrió mientras abrazaba al demonio, el hecho de que les hubiese defendido en la reunión más importante que ha habido en el año era algo muy importante para una amistad, y más para una entre ángeles y demonios. Auron no lo rechazó y cubrió con sus alas a la chica, hacia tiempo que nadie le abrazaba.
- Gracias por... Por simplemente confiar en nosotros - pronunció la ángel despacio con una pequeña sonrisa.
- No iba a dejar que todo el mundo pensase que era un mentiroso y encima me aprovechaba de vosotros - contestó el demonio viendo como Reborn también se acercaba.
A Auron no le apetecía nada tener una charla con él ahora, no le hablaba desde una semana. Así que solo siguió su camino ignorando a dicho ángel. El demonio siguió sin notar como el ángel le seguía, iban a arreglar las cosas sí o sí, al parecer eso era lo que pensaba Reborn. El ángel le agarró del brazo haciéndolos entrar en una clase para hablar a solas.
-¿Qué cojones te pasa?- preguntó el demonio con furia.
- Dialoguemos... Voy a hacer que vuelvas a tener fe en los ángeles - le explicó tranquilo Reb.
- Suerte...- Auron rió ante lo dicho ¿Enserio alguien creía que podía dejar de tenerle odio a los ángeles?
- Vengo a ayudarte capullo - fue la respuesta que recibió de parte del ángel - probemos algo.
- Te escucho solo porque... Nada solo porque estoy aquí.
- En una semana tienes que actuar normal con todos los ángeles.
- Estás de coña - aseguró el demonio mirando a los lados intentamos buscar a alguien que le sacase de esa conversación.
- A cambio, nosotros, los ángeles haremos que vuelvas a confiar en nosotros - siguió su explicación ignorando la cara del otro.
-¿Y qué gano si acepto?- preguntó el demonio mirando seriamente al ángel.
- Recuperar amistades y ser mejor persona - le contestó en tono sarcástico aunque estaba diciendo la verdad.
- Una semana eh - aceptó después de un largo silencio.
- Te prometo que los verás de otra manera - sonrió Reborn agusto con el resultado de su propuesta.
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Por la mañana, lunes, empezaba la semana en la que Auron tenía que intentar ser como antes, ser como si no supiese todo el tema de su familia.
