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Maratón 2/2 

No sé en qué momento de la fiesta termine con un cintillo color negro con plumas que decía Prom XIX en letras doradas sobre mi cabeza. Mi peinado consistía en un moño, pero ahora parecía más un nido de aves que un lindo peinado y con collares de diferentes colores más como un carnaval.

Y no podíamos olvidar que en este momento me encontraba dentro de un gran en un círculo de chicas de todas las edades bailando como si fuéramos strippers. Todos los hombres estaban mirando el espectáculo que estábamos dando, algunas chicas mucho más provocativas que otras.

Todo estamos de acuerdo que el alcohol es un enemigo de la cordura y la vergüenza, no sé qué jodidamente tenían esas bebidas o había sido yo que había perdido la cuenta de cuantos vasos de licor había ingerido en mi organismo, pero acá estábamos.

Ya pasada la noche no encontrábamos cenicienta después de haber sonado los doces campanadas, si así mismo perdiendo todo el encanto.

Ahora si podía decir que me estaba divirtiendo. Gasper era un chico muy divertido y combinado con las locuras de Steven esto se convirtió en todo un descontrol, una mala influencia para mí que nunca decía que no y no tenía pena alguna para hacer estupideces.

Podía decir con cierta contundencia que era la que estaba más sobria de todas mis amigas y quizás de todas las chicas que estábamos aquí, pero no podía afirmar lo mismo de los chicos, vi a un montón de chicos mayores mezclando bebidas y dándoselas a los graduados que eran más jóvenes, mañana tendrían una cruda horrible.

Harley había desaparecido de mi vista al igual que Katherine. No quería pensar en donde o que estarían haciendo, pero era muy fácil deducirlo.

Kennedy no se quedaba atrás, su sensual baile y esa manera de hacer twerking tenía a todos esos jóvenes muy mal, era muy descarada para la salud mental de Scott, y su cara era mucho peor que la de un ogro.

Una pelirroja que se había incluido en el grupo llamando mucho la atención por su vestimenta y su hermosa cabellera, era mucho más joven que nosotras así que supongo que era alguna chica de primer año.

Pero eso no le impedía destacar, también tenía una manera de bailar bastante despampanante, se movía con soltura. Un chico la agarro por detrás bailando muy pegado a su trasero, seguramente era su novio porque no se inmuto cuando lo sintió acercarse.

Levante mi vestido y lo arremangue en la cintura para que no se arrastrara más, de por si era un vestido blando, ahora parecía un vestido blanco con la orilla marrón de tanto arrastrarlo por el suelo sucio.

La temperatura estaba tan elevada aquí adentro, las gotas de sudor corrían por mi cuello, agradecía tener una coleta.

De un momento a otro Dereck me abrazos por detrás besándome la mejilla y me levanto para darme vueltas en el aire, solté una carcajada cuando me puso nuevamente en el suelo. Nunca lo había visto tanta feliz como lo estaba ahora, Terry estaba sentado al final del circulo tomando algo de su vaso.

Me dejo y volvió a desaparecer de mi vista.

Yo seguí divirtiéndome con el grupo, bailábamos y cantábamos a todo pulmón las canciones que ponía el Dj. Unas manos tocaron mi cintura, - ¿Por qué no me bailas así de sexy a mí?

Me gire para encararlo, su voz estaba más ronca de lo normal pero aun así la voz era inconfundible. Tenía los ojos un poco rojos, pero no quise preguntar estaba demasiado feliz para arruinarlo todo.

Acaricie su cuello con mis uñas subiéndolas y bajándolas hasta dejarle el cuello un poco sonrojado por la acción continua que hacia -Pues, si no te hubieras ido por ahí dejándome como una tonta sola.

RAWRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora